Secciones
Referencias
Resumen
Servicios
Descargas
HTML
ePub
PDF
Buscar
Fuente


La Pedagogía como Proceso Social de Carácter Complejo
Revista Científica CIENCIAEDUC, vol.. 8, núm. 1, 2022
Universidad Nacional Experimental de los Llanos Centrales Rómulo Gallegos

Revista Científica CIENCIAEDUC
Universidad Nacional Experimental de los Llanos Centrales Rómulo Gallegos, Venezuela
ISSN-e: 2610-816X
Periodicidad: Semestral
vol. 8, núm. 1, 2022

Recepción: 15 Noviembre 2021

Aprobación: 20 Noviembre 2021

Resumen: La respuesta a buena parte de las situaciones de vulnerabilidad, de riesgo o de conflicto que sufren las personas y comunidades, es asunto de interés para la pedagogía social, que apuesta por una educación transformadora, en el marco de complejidad. Guiando la construcción de este artículo con base en los siguientes objetivos: 1) profundizar en el concepto de pedagogía social y su relevancia compleja; 2) exponer consideraciones de la implementación de la pedagogía social compleja en el contexto educativo; 3) Redefinir el afianzamiento de la pedagogía social en su naturaleza compleja para transformar la realidad. En lo teórico, encuentra su fundamenta en Freire, Núñez, Santos y Moran, orientando sus voces hacia una interacción de relaciones, vivencias y experiencias en una realidad compleja. La metodología corresponde a un estudio documental, método analítico hermenéutico de la fuente escrita, desde una rigurosa revisión de textos científicos y académicos, asociados a temáticas específicas. Los resultados permitieron extraer el giro o ingrediente adicional que de manera acelerada le asigna la complejidad a la pedagogía social en la actualidad. Las conclusiones permiten destacar la interacción teórica de la pedagogía social, en combinación compleja hacia el diálogo y la práctica educativa, convocando a la reflexión para potenciar la transformación que muestra la dinámica social cambiante con nuevos elementos y situaciones.

Palabras clave: Pedagogía social, pedagogía compleja, transformación, dialógica.

Abstract: The response to a good part of the situations of vulnerability, risk or conflict suffered by people and communities is a matter of interest for social pedagogy, which is committed to a transformative education, within the framework of complexity. Guiding the construction of this article based on the following objectives: 1) deepen the concept of social pedagogy and its complex relevance; 2) present considerations of the implementation of complex social pedagogy in the educational context; 3) Redefine the consolidation of social pedagogy in its complex nature to transform reality. Theoretically, it finds its foundation in Freire, Núñez, Santos and Moran, directing their voices towards an interaction of relationships, experiences and experiences in a complex reality. The methodology corresponds to a documentary study, hermeneutical analytical method of the written source, from a rigorous review of scientific and academic texts, associated with specific topics. The results allowed us to extract the twist or additional ingredient that in an accelerated way assigns complexity to social pedagogy today. The conclusions make it possible to highlight the theoretical interaction of social pedagogy, in a complex combination towards dialogue and educational practice, calling for reflection to enhance the transformation that shows the changing social dynamics with new elements and situations.

Keywords: Social pedagogy, complex pedagogy, transformation, dialogic.

INTRODUCCIÓN

La inquietud científica que se expone en esta investigación está centrada en la pedagogía social con una connotación compleja, resultante de una amplia revisión de fuentes documentales. Vista la pedagogía social por su extensa inclusión en el campo teórico y científico, donde actúe, con sujetos que habitan contextos socioculturales de alta complejidad, que sufren o no problemas derivados de aquella, hacia la búsqueda de soluciones pedagógicas para problemáticas sociales, mirando a la ciencia, disciplina y enseñanza, como un tejido de fundamentos, que no se pueden fragmentar.

Un ejemplo del objeto de estudio (pedagogía social), puede mirarse en la forma de administrar un programa educativo, para un área del conocimiento, lo que a su vez responde a un diseño curricular. Fundamentado en un cuerpo teórico, para una población con particularidades especiales o que amerite de la inclusión, termina por la necesidad de introducir contenidos que no pueden ser estáticos, pues tanto el sujeto como la dinámica social son cambiantes. Y si a ello se le agrega que cada educando, es una individualidad, con docentes que también tienen su forma de entender los procesos desde distintos puntos de vista, la complejidad siempre estará presente. (proceso complejo).

A lo anterior se añaden la individualidad de cada educando y la del docente, que también tienen su propia forma de entender los procesos desde lo teórico hacia los diversos escenarios de la práctica, para entrar al terreno de una enseñanza social en respuesta al problema de vulnerabilidad personal o comunitario particular, que deban solucionarse a plazos con recursos y cambios estructurales. Encontrando la pedagogía social un nexo con la política, donde la primera responde al proceso en sí mismo, pero la segunda, son los lineamientos con los que se materializa la primera. Resultando en el panorama de la complejidad el siguiente dilema: ¿puede la complejidad de situaciones ser atendidas mediante una pedagogía social o más bien la política puede proveer soluciones?

Al respecto Lauritsen (2003), sostiene que “la desintegración de la sociedad debe ser reconocida como problema político y cultural antes que científico o psicológico” (98). Desde esta apreciación la pedagogía social no está en capacidad de dar respuestas, por sí sola a problemas estructurales complejos. Esa no es la misión de la pedagogía social, así como tampoco su objetivo. En ese sentido, ya Freire (1985), mostró que una importante dimensión política no significa que sea solo política o que haya que confundirla. Resultando que, para construir una pedagogía social sólida, debe estar en sintonía con lo justo, equitativo y eficaz para las personas, grupos y comunidades, a las que se acompaña para construir vidas dignas de ser vividas.

Marco que deja ver una gama de problemáticas sociales diversas, cargada cada una de complejidades, para ser asistidas por la pedagogía social, actuando frente a sujetos que habitan contextos socioculturales de alta complejidad, sufriendo o no problemas derivados de aquella. Constituyéndose en la disciplina en elemento obligante de materia académica, por la debida asistencia educativa que le otorga la sociedad y el Estado fuera del ámbito escolar y familiar, direccionada hacia los sujetos desde sus particularidades, emplazados al contexto social, libres para participar activamente en su propio proceso educativo emancipador.

Vista de ese modo, participación, emancipación y democratización, no están aislados, conectados a las conveniencias de relación, cuyos conceptos clave y orientadores de la práctica de la Pedagogía Social, encuentran una política en sus procesos y fines, en las ideas de Freire (1985 al 2010), con vigencia actual, bifurcada en educación para la transformación social y el estado de conciencia del sujeto en interacción entre sí, hasta derribar afanosas actuaciones de poder de los opresores a los oprimidos. A partir de este escenario, se plantean los siguientes objetivos;

1) Profundizar en el concepto de pedagogía social y su relevancia compleja.

2) Exponer consideraciones de la implementación de la pedagogía social compleja en el contexto educativo.

3) Redefinir el afianzamiento de la pedagogía social en su naturaleza compleja para transformar la realidad.

Estructurando el cuerpo del contenido, con base al método, la consistencia argumentativa al análisis de los resultados por objetivos, asociando discusión y conclusiones.

MÉTODO

El estudio se cimentó en una investigación de carácter documental, la cual es entendida como el estudio de problemas, con el propósito de ampliar y profundizar el conocimiento de su naturaleza, con apoyo principalmente, en trabajos previos, información y datos divulgados por medios impresos, audiovisuales o electrónicos. citando de Ramírez (s/f), que,

se centra exclusivamente en la recopilación de datos teóricos, exclusivamente en forma documental, y su propósito es profundizar en las teorías y aportes ya emitidos sobre el tópico de estudio, se soporta en fuentes bibliográficas, iconográficas, fonográficas, películas, vídeos y medios magnéticos. Su grado de carácter documental es muy alto, apoyando lo encontrado con muy poca investigación de campo. (p. 62).

Asumiendo un diseño bibliográfico, por cuanto la investigación se fundamenta en soportes documentales, en revisiones de textos, libros, materiales impresos, entre estos: material electrónico, artículos, trabajos de investigación, entre otros. Material que permitió el análisis de unidades para extraer del dato, respuesta a las premisas que se desprendan de la interpretación y análisis de contenido.

RESULTADOS

La información documental obtenida, permitió desglosar el eje central, definido en la Pedagogía como proceso social de carácter complejo, en tres cuerpos teóricos: 1) profundizar en los conceptos de pedagogía social y su relevancia compleja; 2) exponer consideraciones de la implementación de la pedagogía social compleja en el contexto educativo; 3) Redefinir el afianzamiento de la pedagogía social en su naturaleza compleja para transformar la realidad.

La Pedagogía Social es una rama que se orienta hacia fines específicos, asociados a las necesidades sociales, manifiesta en ciencia práctica social y educativa no formal, en cuya misión esta la prevención, incluyendo hasta la reinserción de quienes pueden pasar por situaciones en su vida, sobrevenidas de necesidades básicas de socialización.

Ocupándose en ese sentido la Pedagogía Social, en los individuos normalizados, así como en personas o grupos en situación irregular, tales como inadaptación, marginación o exclusión social, constituyéndose la doctrina de la formación social del individuo. Exigiendo del pedagogo social la intervención, lo cual para Núñez (2011) llama la atención:

Cuando a la educación se le llama intervención se producen algunos efectos curiosos”. En primer lugar, cortamos todo nexo entre la práctica y la teoría. La intervención es un concepto que en su origen (se puede ver en un diccionario etimológico o incluso en cualquiera de uso común), se empleó en cirugía: en una intervención quirúrgica se extrae algo pernicioso” (p. 189).

Planteamiento que, en el tema de la intervención, coloca al coordinador y comunicador para:

● Negociar las soluciones con los usuarios.

● Ayudar a la gente a dar pasos hacia el cambio desde el respeto y sin imponer la solución.

● Ser un agente de cambio social y personal.

● Ayudar a los grupos sociales problemáticos a coordinarse en la búsqueda de soluciones.

● Promover el diálogo y la solución entre la gente.

De allí que se identifique al pedagogo social por su naturaleza progresista freiriano, en consistencia con el proceso de facilitación del aprendizaje, estableciendo una relación dialógica de concienciación, generándose la segunda premisa: ¿Puede la intervención dentro de la orientación conceptual de la pedagogía social, responder a su carácter complejo? Siendo precisamente acá donde la humanización como proyecto educativo, praxis transformadora del individuo y de su contexto social, en su sentido complejo, supone penetrar en las contradicciones que el tejido social le impregna al acto pedagógico.

En base al acto pedagógico, la intervención, provocada por la contraseña de la hiper-modernización y las transiciones culturales paradigmáticas se interconecta en un mismo ombligo, que a su vez les arroja un anzuelo de complejidad e incertidumbre ascendente. Panorama que se muestra desafiante para la transformación de una educación emancipadora, confundiendo el rumbo de organizaciones sociales colectivas, pues la dirección económica, prácticamente de carácter ultraliberal, las altera.

En ese sentido, lo antes planteado es causa-efecto, justamente por las profundas dinámicas socio-productivas, además de una transición paradigmática, que viene a desestructurar los referentes epistemológicos tradicionales y los efectos que se observan en las orientaciones de la cultura contemporánea, tales como la modificación profunda en las pautas de interacción social y productiva y la conformación de tendencias postmodernas que disuelven las certezas de la razón.

Por otra parte, la implementación de la pedagogía social compleja en el contexto educativo, como segundo punto de discusión, permite hacerse esta interrogante: ¿Qué puede hacer la pedagogía social respecto a las situaciones diversas de desigualdad y vulnerabilidad en el contexto educativo? De allí que el objetivo de este texto sea doble, uno para generar argumentos que sustenten la realidad y la otra, para recibir de profesionales la intervención socioeducativa, a efectuar: (1) una lectura más ajustada de las realidades en las que actúan y (2) desarrollar acciones más eficaces, equitativas y sostenibles.

Eso significa relacionar la pedagogía con la política y señalar las funciones y disfunciones que se producen entre ellas frente a las situaciones de desigualdad y vulnerabilidad. Representa también especificar el papel que desempeñan las personas participantes en las relaciones socioeducativas y las características que deberían tener las intervenciones socioeducativas que se producen en tal situación. Lo cual, para algunos autores, entre estos Bauman (2001), sostiene que, en el contexto de unas sociedades, se produce la disolución de las redes que nutrían la convivencia social, agudizando la presencia de desigualdades y discriminaciones, con los daños colaterales, que ello provoca.

Imperando en esa línea de pensamiento, la necesidad de una modernidad sustantiva. Constatando Bourdieu (1998), la composición progresiva de un pensamiento único, mostrando su rostro totalitario y autoritario para dominar el complejo escenario del capital cultural. Frente a tales argumentos, pensadores como Berardi (2007), proponen la presencia de una acción social relativamente incidente, desde las redes y subjetividades radicales como medio de imbricar en este difícil escenario, nuevos sentidos a la praxis humana.

Con respecto a la pedagogía social en su naturaleza compleja para transformar la realidad, el encontrarse contingentemente interconectada con la política, no significa ni que sean lo mismo, ni tampoco que cumplan unas mismas funciones, pues persiguen distintos objetivos regulados por tiempos diferentes. Escenario que introduce la tercera premisa: ¿Cómo se plantea la pedagogía social sobre su naturaleza compleja frente a la realidad?

Vista la pedagogía social en su necesaria conexión con los problemas de las comunidades y de la realidad circundante, encuentra en la política, su otro brazo, aunque en la realidad actúan como dos entes distanciados el uno del otro, siendo válido sobre ello hacer hincapié en señalar que la pedagogía social actúa como expiración y la política, como inspiración. Precisando de un trabajo conjunto, donde se coordinen acciones por el bien común y el de las personas participantes, con objetivos coincidentes, o al menos convergentes.

Llamado que trae al sentido de las palabras, donde se reconoce a toda política como pedagógica, en el sentido que crea determinados comportamientos que afectan a personas, a los grupos, comunidades o sociedades, pudiendo dirigir la regulación de los comportamientos, así como apostar de forma indirecta por el cambio de mentalidades.

Escenario donde Jiménez (2020), a propósito del ingrediente complejo, sostiene que el modelo donde convergen los diversos fenómenos se puede mirar desde la simplicidad en principio, porque en ella, también está presente la complejidad, pero se suaviza su tono, en los siguientes términos:

…definir la complejidad supone exponerla de manera negativa, en contradicción con lo simple, dado que lo complejo no es simple, ni simplificable, como tampoco se reduce a leyes simples, a causas simples; siendo el punto de partida de la complejidad el rechazo a la simplificación bajo todas las formas reductoras y mutiladoras. Sobreponiéndose a una ideología que pretende explicar todo por medio de concepciones racionalistas. (p. 25).

Desde esa mirada el proceso complejo para la pedagogía social configura en su intencionalidad un cambio de mentalidad que, subsidiariamente, puede conducir a cambios en los comportamientos; mientras que el proceso complejo, dice Morin (1996) “actúa como un tejido de constituyentes heterogéneos inseparablemente asociados, presentando paradoja de lo uno y lo múltiple” (p. 32). Asumiendo el tejido de eventos, acciones, interacciones, retroacciones, determinaciones, azares, que constituyen escenario deprimidos, vulnerados y desiguales, dificultan afrontar la solidaridad de los fenómenos entre sí.

Siendo casi imposible distinguir los problemas o cuestiones a reducciones importantes, en razón a que no hay realidad que se pueda comprender de manera unidimensional, abarcando variables de enorme interrelación, como afirma Santos (2000) “la constatación de la complejidad en los procesos biológicos y sociales obliga a que una de las funciones básicas de la escuela sea la de formar al alumnado para que éste pueda elaborar respuestas, desde su misma condición de complejidad” (p. 138)

Y si a lo anterior se le lleva al terreno de la pedagogía social, cargada de situaciones sociales diversas, la complejidad se agudiza, asumiendo retos mencionados o recordados de Zabala Luis, citado por Santos (2000), partiendo por introducir que construir un pensamiento para la complejidad, es uno de los retos fundamentales, visto como sigue.

1. La complejidad del sistema educativo procede de su objeto, que no es otro que el de transformar a los seres humanos.

2. La dimensión del propio sistema, merced a la importancia adquirida por el sector público en este ámbito.

3. La complejidad formal de su estructura normativa y complejidad informal, resultado de la interacción en el interior del sistema.

4. La ambivalencia del sistema, que se presenta, de una parte, como cerrado y, por la otra, como enormemente abierto a la sociedad.

5. Su operación y efectos se produce en el largo plazo con la mutua implicación entre sistema educativo y sistema económico.

6. Imprecisión en la medida de los efectos del sistema y las dificultades para evaluar el grado de consecución de fines y objetivos generales.

7. La dificultad para articular políticas carentes de ambigüedad y la conflictividad inherente al sistema educativo.

Lo mencionado es apenas un ápice del iceberg, para levantar equipos multidisciplinarios en conexión con las interdisciplinas, en áreas de la educación, apostando por un acompañamiento redefinido en el tránsito de la realidad compleja, que merece del esfuerzo sostenido, con la carga de compromiso, que se precisa.

Discusión

Profundizar en las teorías y aportes que se generan del análisis de la Pedagogía como proceso social de carácter complejo, permite extraer las tres vertientes:

1. Intervención dentro de la orientación conceptual de la pedagogía social, responder a su carácter complejo.

Asociada la idea de intervención a los problemas sociales con cambios profundos, es probablemente utópico, porque frente a lo complejo de la realidad, ya existen argumentos de la conexión o el trabajo que debe gestarse en lo concerniente a política. De allí que esa desconexión, que se produce en el campo educativo, en el marco de un discurso neoliberal dominante desdibuja las prácticas, de efectos verdaderamente educativos, sustituyéndolas por intervenciones, que norman y rigen sobre sujetos a los que se aplica un plan, un protocolo, algo previamente elaborado, en cuyo diseño no participa el afectado para su construcción, ni incorporación.

Asumido del modo expuesto, el discurso hegemónico está produciendo notables estragos, con otras fuerzas en juego, aunado a discursos y prácticas, que precisan del esfuerzo en investigaciones sobre temas sociales que ya no se pueden calificar de impacto para su intervención; dado que situaciones que parecen ser simples, en su raíz puede estar alimentada de una esencia compleja y de allí se ramifican.

A lo anterior se agrega que las diversas disciplinas, tienen una alta tarea en ese sentido. Por ejemplo, ya no son necesarias las alambradas o las verjas electrificadas; basta con catalogar a los sujetos como pobres, inmigrantes, drogadictos, madres solteras, jóvenes en riesgo, aunque sea con la mejor intención del mundo, para después crear circuitos específicos de intervención, supuestamente a la medida de su problemática social. Tratando Núñez (2004), de la sujeción de la praxis científica tradicional a un nuevo modo de saber y organizar el conocimiento, desde otras reglas e intereses, ajenos a la razón pública.

2. La pedagogía social respecto a las situaciones diversas de desigualdad y vulnerabilidad en el contexto educativo.

El saber pedagógico social en escenarios educativos, en planteamientos de Núñez (2004):

Tiende a configurarse como espacio no tanto legitimador (ello ya no es visto como necesario), sino facilitador de instrumentos eficaces para el ejercicio capilarizado del control de las poblaciones. Esta nueva modalidad implica la redefinición de los roles del oficio educativo, hacia perfiles operacionales y protocolares destinados a ofrecer una prevención de los conflictos sociales” (p. 9).

Reforzando de Freire (2005) la búsqueda del individuo desde y hacia sí mismo, tomando como punto de interés la conciencia, con visión contextual del mundo para acometer acciones. Crear el estado de concienciación individual y colectiva transforma el mundo, teniendo la educación como lo mira Freire, la llave para la transformación social hacia la liberación, derribando las dinámicas de dominación y de subordinación de las clases sociales.

Al respecto, se producen transformaciones que develan situaciones de desigualdad y vulnerabilidad en el contexto educativo, donde diálogo y concienciación, representa entre sí comprensión y construcción del mundo, afirmando Freire (2005) “el diálogo es la herramienta que permite la búsqueda del sí mismo y la cooperación hacia la transformación social”. (p. 52). Marco que da paso a diálogo, que en acción reflexiva permite la praxis transformadora. A su vez la transformación del mundo requiere acciones concretas, tomando la crítica y valor para la praxis transformadora, en un escenario complejo.

3. Pedagogía social en su naturaleza compleja para transformar la realidad.

La progresiva flexibilización de la pedagogía social, en la praxis viene adoptando entre sus características básicas un estilo perceptivo con una perspectiva de educación adaptativa en un sistema abierto, cuya consistencia fundamental radica en la dialéctica de la equilibración cognitivo-afectiva, fundamental y decisiva para un adecuado funcionamiento en todas las esferas de la vida.

Sin embargo, infiriendo de Morín (1996), es necesario plantear otro modo de entender la construcción de los sujetos en su mundo, integrando las dimensiones del conocimiento y proyectándolas desde la totalidad del ser humano que aprende, cognitiva y afectivamente hablando. Por ello, la vinculación social, en lo epistemológico precisa de movilidad en dirección a situaciones individuales, conociendo desde el ser, que lo mueve en su mundo interno a la acción.

Vista la acción en actuación consciente, con nuevas vías de comprensión, hurgando en la indagación de todas las claves que favorezcan la reunificación del pensar, hacer y actuar, en correspondencia con el conocimiento, que se produzca de profesionales, dispuestos a recuperar una meta fundamental, como lo sostiene Santos (2000) la de educar a todas las personas, sin miramientos, ni éticas, donde la inclusión, sea el resultado de una auténtica comprensión holística de la realidad.

CONCLUSIONES

Sintetizando entorno a la pedagogía como proceso social de carácter complejo, se pronuncia en:

1. La Intervención dentro de la orientación conceptual, se ve disminuida para responder a la realidad compleja. Siendo necesario que emerjan protocolos distintos con vivencias sociales de sus protagonistas y su iniciativa consensuada para las medidas oportunas.

2. Las diversas situaciones introducen desigualdad y vulnerabilidad en el contexto educativo, provocando una tenencia de cambios que invitan a la redefinición de roles en el oficio del pedagogo social, frente a la prevención social. Pronunciándose por el diálogo para la praxis transformadora, en un escenario complejo.

3. La naturaleza compleja para transformar la realidad traza una perspectiva hacia la educación adaptativa para un sistema abierto. Marcado este por una dialéctica del equilibrio cognitivo-afectiva, lo cual obliga transcender de la vinculación social, a la movilidad individual de su mundo interno a la acción.

Referencias

Bauman Zygmunt. (2001). La sociedad individualizada. Madrid: Cátedra.

Berardi Franco. (2007). Generación post-alfa. Patologías e imaginarios en el semiocapitalismo. Buenos Aires: Tinta Limón.

Bourdieu Pierre. (1998). Capital cultural, escuela y espacio. soc ménez (trad, y comp.), México, Siglo XXI, 1997, 206 pp.

Freire Paulo. (1985). Pedagogía del oprimido. Madrid: Siglo XXI.

Freire Paulo. (2005). Pedagogía de la esperanza. Un reencuentro con la pedagogía del oprimido. México: Siglo XXI.

Lauritsen Janet. (2003). How families and communities influence youth victimization. OJJDP Juvenil Justice Bulletin. Washington, D. C.: US Department of Justice.

Jiménez Sandra. (2020). Ciencias de la complejidad. En: Modelamiento: Desde la Simplicidad a la Complejidad. Serie NODO ITC. Volumen 1. No 2 - Julio 2020. Fondo Editorial de la Universidad Bicentenaria de Aragua (FE-UBA)

Morin, Edgar. (1996). Introducción al pensamiento complejo. Barcelona: Gedisa.

Núñez, Violeta (2004). Una aproximación epistemológica a la pedagogía social y sus escollos de actualidad: de las tecnociencias al tecnopoder. Ponencia presentada al 1º Congreso Iberoamericano de Pedagogía Social y el XIX Seminario Interuniversitario de Pedagogía Social. SIPS, Santiago de Chile.

Ramírez Alberto. (S/f), Metodología de la investigación. [citado 2021-11-10]. Disponible en: https://www.postgradoune.edu.pe/pdf/ documentosacademicos/ciencias-de-la-educacion/1.pdf

Santos Miguel Anexo. El pensamiento complejo y la pedagogía: bases para una teoría holística de la educación. Estudios. pedagógicos. [online]. 2000, n.26 [citado 2021-11-13], pp.133-148. Disponible en: . ISSN 0718-0705. http://dx.doi.org/10.4067/S0718-07052000000100011.

Úcar Xavier. (2018). La pedagogía social frente a las desigualdades y vulnerabilidades en la sociedad. Zona Próxima, 29, 52-69.



Buscar:
Ir a la Página
IR
Modelo de publicación sin fines de lucro para conservar la naturaleza académica y abierta de la comunicación científica
Visor de artículos científicos generados a partir de XML-JATS4R