Artículos de Investigación
Recepción: 20 Marzo 2020
Aprobación: 30 Abril 2020
Resumen: En el presente trabajo se plantea una reflexión acerca del docente, el rol que en materia de personalidad debe desempeñar en lo referente a la Inteligencia emocional y su influencia en la enseñanza como rendimiento académico del estudiantado en educación universitaria. En este sentido, la investigación es esencialmente documental porque se consultan, analizan e interpretan datos e informaciones de fuentes escritas a través de la cual se develó la importancia y/o necesidad que los estudiantes universitarios y docentes en servicio para la obtención de una acertada formación en lo referido con la inteligencia emocional. Las conclusiones reflejan que, desarrollar la inteligencia emocional y estimular las relaciones interpersonales en el proceso formativo, permite la inclusión de personal docente altamente motivado; por ello se recomienda que en el Pensum de Estudio se incluya la Inteligencia Emocional como contenido del componente de formación general por las bondades que esta ofrece.
Palabras clave: Inteligencia Emocional, Formación Docente, Desempeño y Competencias.
Abstract: In the present work a reflection about the teacher, the role that in the matter of personality should play in relation to emotional intelligence and its influence on teaching as academic performance of the student in university education is proposed. In this sense, the research is essentially documentary because data and information from written sources are consulted, analyzed and interpreted, through which the importance and / or need for university students and teachers in service to obtain a successful training was revealed. as regards emotional intelligence. The conclusions reflect that, developing emotional intelligence and stimulating interpersonal relationships in the training process, allows the inclusion of highly motivated teaching staff; for this reason, it is recommended that Emotional Intelligence be included in the Study Pensum as content of the general training component due to the benefits it offers.
Keywords: Emotional Intelligence, Teacher Training, Performance and Competencies.
INTRODUCCIÓN
La humanidad se encuentra inmersa en un proceso acelerado de cambios que se manifiestan en todos los ámbitos del acontecer, político, social, científico y cultural, el contexto donde se desenvuelven las sociedades sin duda ha cambiado, la globalización plantea escenarios distintos a los acostumbrados entornos. Venezuela no escapa de ese proceso de cambios ni a los retos surgidos de ellos, es en este sentido como la educación universitaria venezolana está siendo llamada a ajustarse y responder a las exigencias de los tiempos, en las que las nacientes oportunidades se encuentran acompañadas de nuevos desafíos.
Como respuestas a estos cambios ha surgido en las Instituciones Universitarias, la necesidad de responder a las exigencias competitivas del medio, aparece entonces el interés por otro tipo de capacidades, cualidades, habilidades o aptitudes que van a marcar la diferencia entre un individuo, con un alto desempeño y los individuos con desempeño promedio o inferiores, producto de sus emociones y la manera por la cual actúa según su temperamento. Esta inteligencia es definida por Goleman (2006) como “la capacidad aprehensible para conocer, controlar e inducir emociones y estados de ánimo, tanto en uno mismo como en los demás” (p.24).
De lo expuesto, se infiere que el docente universitario puede desempeñar un papel clave al relevar diversas funciones tales como: orientador o guía que estimula al estudiante para que desarrolle su capacidad cognitiva y sus habilidades para avanzar en el aprendizaje de manera independiente, facilitador en la aplicación de medios y estrategias de aprendizaje; de tal modo que este docente apoya en los procesos de evaluación y de instrucción, así como el enlace entre los diversos elementos que integran el ambiente de aprendizaje del estudiante; asumiendo conjuntamente como evaluador que participa en la programación y ejecución de las actividades de evaluación; además el docente debe incentivar el esfuerzo, estimular el sentido de responsabilidad y actuar como agente motivador para su permanencia dentro del sistema educativo y social. Ahora bien, del discurso profesional como única vía de acceso al conocimiento durante las sesiones de clase; al reflexionar se elaboran las siguientes preguntas: ¿La Inteligencia Emocional permite que el docente incida en el comportamiento estudiantil?, ¿A través de la Inteligencia Emocional mejoraría el perfil del docente de educación superior?, ¿Cuál debe ser el perfil del docente para categorizarlo Emocionalmente inteligente?, ¿Cuáles son las competencias que debe poseer un profesional de la educación universitaria según la teoría de la inteligencia emocional?
Objetivos de la Investigación
Objetivo General: Generar reflexiones teóricas sobre la Inteligencia Emocional y su aporte en la formación profesional del gerente educativo en el contexto universitario.
Objetivos Específicos
Analizar la manera en que la Inteligencia Emocional permite que el docente incida en el comportamiento estudiantil.
Develar a través de la Inteligencia Emocional como mejoraría el perfil del docente de educación superior.
Describir el perfil del docente para categorizarlo emocionalmente inteligente.
Destacar las competencias que debe poseer un profesional de la educación universitaria según la teoría de la inteligencia emocional
Justificación de la Investigación
Dentro del marco referencial, la comprensión emocional posee connotaciones altamente formativas y humanizantes; estas se manifiestan en la capacidad de diálogo, respeto, convivencia y amor hacia los demás sentimentalmente expresados. Es preciso indicar que, la inteligencia emocional aporta los cimientos para el desarrollo de otras competencias más elaboradas, aunque algunos autores diferencian entre las habilidades básicas de inteligencia emocional y otro tipo de competencias emocionales y sociales más generales, el modelo de inteligencia emocional propone una serie de habilidades básicas tales como la percepción, la asimilación, la comprensión y la regulación emocional. Una vez desarrolladas estas habilidades se está preparado para adquirir competencias más complejas que aparecen reflejadas en los programas de educación superior.
El tomar conciencia de cómo actúa el docente, el autoevaluarse y monitorearse cuando aborda y plantea sus problemas o asuntos en estudio, con el propósito de minimizar sus desaciertos y optimizar sus acciones, con una actitud autocrítica, contribuye a incrementar exitosamente sus habilidades en la situación específica aquí tratadas como son las inteligencias emocionales.
BASES TEÓRICASTipos de Inteligencias
A partir de los años ochenta hasta la actualidad, se habla de diferentes tipos de inteligencia; es por esta razón que resulta familiar escuchar hablar de inteligencia espacial, inteligencia lógica, inteligencia emocional, entre otras. Los tipos de Inteligencia, se sintetizan en estas tres importantes teorías:
Inteligencias Múltiples: Gardner (1983), crea la teoría de las Inteligencias Múltiples, donde propone varios tipos de inteligencia tomándose las siguientes:
Inteligencia Lógica – Matemática: capacidad de resolver problemas de lógica y matemática.
Inteligencia Intrapersonal: está relacionada con las emociones y permite entenderse a sí mismo.
Inteligencia Interpersonal o Social: considerada como la capacidad para entender a las demás personas con empatía, se encuentra relacionada con las emociones.
Sin embargo, esta teoría la crítica más común que recibe es que la Inteligencia Musical y la Cinéstesica no muestran Inteligencia sino talento.
En cuanto a la Teoría de la Inteligencia Emocional: desarrollada principalmente por el psicólogo Daniel Goleman, el cual la describe como “La capacidad para reconocer sentimientos propios y ajenos y la habilidad para manejarlos” (p.22). De igual forma expresa que este tipo de inteligencia se puede organizar en cinco capacidades: conocer las emociones y sentimientos propios, manejarlos, reconocerlos, crear la propia motivación y manejar las relaciones. Se pueden mencionar otros tipos de Inteligencia tales como lo afirman Thurstone y Thurstone (1999):
Inteligencia Abstracta: el dominio del espacio en todas sus dimensiones. Inteligencia Práctica: la cual es la habilidad para usar de manera conjunta todos los recursos disponibles para sortear con éxito una situación.
Sin embargo, más allá de la descripción de las inteligencias y de sus fundamentos teóricos, Gardner (ob.cit) considera que es importante destacar ciertos aspectos:
Cada individuo posee varios tipos de Inteligencia, dependiendo de varios factores como: la educación, la cultura, el ambiente.
La mayoría de las personas puede desarrollar cada inteligencia hasta un nivel adecuado de competencia.
Las inteligencias generalmente trabajan juntas de forma compleja, o sea, siempre interactúan entre sí.
Tomando como referencia la atención a los planteamientos de los diferentes psicólogos e investigadores, entre lo que destacan: Goleman, Mayer y Fernández-Berrocal, entre otros; se evidencia la importancia que tiene el conocimiento y uso adecuado de la inteligencia emocional para desarrollar en el presente trabajo investigativo el siguiente objetivo de investigación: Destacar la importancia de la Inteligencia Emocional la formación profesional del docente.
Cualidades de la Inteligencia Emocional
Se puede caracterizar la inteligencia emocional como la capacidad para conocer y controlar las emociones propias y ajenas, con el fin de obtener determinados fines. Las principales cualidades de la inteligencia emocional según Goleman (2006) son cinco:
Conciencia de uno mismo: Es la capacidad de reconocer los propios sentimientos, emociones o estado de ánimo. Las emociones tienen diversos grados de intensidad: algunas son suficientemente intensas como para poder percatarnos de ellas en forma consciente, pero otras están por debajo del umbral de percepción consciente. Este tipo de emociones suelen en efecto, traicionarnos, y así estamos bajo su influjo sin ejercer sobre ella un cierto control, podemos fracasar en una entrevista laboral o en cualquier otra situación que represente un escalón hacia el éxito.
Equilibrio Anímico: Se denomina así a la capacidad de control del mal humor para evitar sus efectos perjudiciales, entendidos esto en término de conductas indeseables. El ejemplo típico de la ira, una de las emociones más difíciles de controlar, sin embargo, este autor considera que se puede recurrir por lo menos a cuatro recursos: a) Reconsideración: lo que implica interpretar la situación de manera más positiva. b) Aislamiento: alejarse de la situación y estar unos momentos a solas, con el fin de obtener serenidad. c) Distracción: hacer otra cosa, como por ejemplo salir a dar un paseo a pie. d) Técnicas de relajación como la respiración profunda o la meditación también ayuda.
Motivación: Es la capacidad para auto inducirse emociones y estados de ánimo positivos, como la confianza, el entusiasmo y el optimismo. Señala Goleman (2006), que la predisposición al optimismo puede ser innata, pero la práctica puede revertir esta situación si la persona es capaz de detectar el pensamiento derrotista y reconsiderar el problema desde un ángulo menos sombrío.
Control de los impulsos: Esta cualidad es definida como la capacidad de aplazar la situación de un deseo en aras de un objetivo. En términos psicoanalíticos, de lo que se trata es que el aparato psíquico puede funcionar bajo el régimen del principio de realidad a través del aplazamiento de la descarga.
Sociabilidad: Si las cuatro cualidades anteriores tienen relación con el conocimiento y el control de las propias emociones, la sociabilidad tiene que ver en cambio con el conocimiento y el control de las emociones y estado de ánimo de los demás. En este aspecto, Goleman (2006) afirma que cuanto más hábiles seamos para interpretar las señales emocionales de los demás (muchas veces sutiles, casi imperceptibles), mejor controlemos los que nosotros mismos transmitimos.
Modelos Teóricos de la Inteligencia Emocional
A partir de la década de los noventa, empieza a cambiar la visión cognoscitiva del aprendizaje comenzando a reconocer el papel esencial de los sentimientos en el pensamiento e iniciando en la vida mental. Es, así pues, como se comienza a dejar testimonio de que la inteligencia racional (cognitiva) tiene una hermana gemela, la inteligencia emocional, con la cual funciona en estrecha combinación, y que esta se puede llegar a guiarla a su antojo, dependiendo del tipo de emoción que se active en el cerebro; de esta forma es como se inicia la época de considerar emociones como útiles en el comportamiento humano.
En este trabajo se exponen los modelos teóricos de la inteligencia emocional: Bar–on (2005) y Goleman (2006) por considerar que son las de mayor aporte y trascendencia en el campo de las investigaciones y de sus aplicaciones.
Modelo de Resumen Bar – On: Por su parte, Bar – On (2005) define la inteligencia emocional (IE) en términos de una serie de rasgos y capacidades relacionados con el conocimiento emocional y social; su modelo puede ser considerado de bienestar psicólogo y de adaptación. En este sentido, Bar – On considera su propuesta en términos de “Un modelo comprensivo y una medida de la inteligencia social y emocional”, estructura su modelo de IE en torno a diez componentes: a) Auto consideración, b) Auto conciencia emocional, c) Afectividad, d) Relaciones interpersonales, e) Empatía, f) Tolerancia, g) Control de la impulsividad, h) Evaluación realista, i) Flexibilidad, j) Resolución de problemas.
Modelo de Daniel Goleman: Al respecto, Goleman (2006) afirma que, en su sentido más amplio, “la inteligencia emocional se refiere a las habilidades para reconocer y regular emociones en nosotros mismos y en las demás, y considera que se refleja en la manera en que las personas interactúan con el mundo” (p.49). De modo que, las personas emocionalmente inteligentes prestan especial atención a sus propios sentimientos a los de quienes los rodean; tienen habilidades como: control de impulsos, autoconciencia, motivación, entusiasmo, perseverancia, empatía, agilidad mental, lo que configuran rasgos de carácter como: autodisciplina, la compasión o el altruismo, los cuales son indispensables para una adecuada y productiva adaptación al mundo.
Según este autor, aquellos individuos que no llegan a controlar su mundo emocional y que por tanto tienen un escaso desarrollo de su inteligencia emocional, aumentan sus probabilidades de riesgo. También utilizan el término “competencia emocional” para referirse a una capacidad adquirida, basada en la inteligencia emocional y desarrollada a través de la educación emocional. La IE determina la capacidad con que cuenta el individuo para aprender las habilidades prácticas. Concibe la IE en términos de una teoría de desempeño, con aplicabilidad por el mundo del trabajo y la afectividad organizacional, y afirma que su intención es desarrollar una teoría sobre el desempeño laboral basada en capacidad sociales y emocionales.
Perfil del Docente que Enseña con la Inteligencia Emocional
Desde el punto de vista de la enseñanza tradicional, el aprendizaje de las habilidades académicas, ha cobrado un papel principal, centrándose en el desarrollo cognitivo, con un olvido generalizado de la dimensión emocional. Sin embargo, existe un cierto acuerdo en admitir que la educación ha de lograr que los docentes alcancen unas metas consideradas como valiosas en función de lo valores imperantes en la sociedad, y en que dicha educación debe orientarse al pleno desarrollo de personalidad de los estudiantes, lo que implica que el desarrollo cognitivo se debe completar con la perspectiva del desarrollo emocional, siendo los docentes garantes porque el desarrollo de tal habilidad se consolide en los estudiantes.
Ahora bien, Croker (2009) infiere que “lo que se está poniendo en relieve es el creciente interés que existe sobre el tema y los beneficios que dicha formación conlleva para abordar y resolver conflictos en el aula de clases” (p.49). De allí que, al parecer está claro que dedicar tiempo y reflexiones a este conjunto de capacidades que han sido denominadas inteligencia emocional, siendo una de las mejores maneras de asegurar un desarrollo integral y profesional, que permite diseñar una sociedad futura más tolerante y equilibrada. De allí que los docentes necesiten, en su desarrollo que se les vaya proporcionando los recursos y las estrategias para afrontar con éxito las experiencias que la profesión les depara. Así pues, se expone un resumen del perfil que debe poseer el docente que trabajara con inteligencia emocional:
Tener y aumentar la autoestima.
Aumentar la empatía.
Conocer y mejorar las habilidades comunicativas.
Incrementar el autocontrol emocional.
Saber expresar emocionalmente.
En efecto, todas estas cualidades no podrán dejarse de lado si se quiere potenciar en los estudiantes la posibilidad abierta de reflexionar, de superarse y de ayudar a los demás.
SUSTENTO METODOLÓGICO
Abordaje Epistemológico
En el desarrollo del presente trabajo, se planteó como objetivo Generar reflexiones teóricas sobre la Inteligencia Emocional en la formación profesional del docente universitario, se desarrolló principalmente en una investigación documental. En cuanto al tipo de investigación documental, Montemayor, García, Garza (2000) expresan que “es la presentación de un escrito formal que sigue una metodología reconocida; caracterizándose por el empleo predominante de registros gráficos y sonoros como fuentes de información” (p.216). A través de esta, se desarrollaron los objetivos planteados por lo cual se debió llevar a cabo un proceso metodológico para obtener un rango de información para su posterior aplicación en el contexto referido como lo es en la educación universitaria, debiendo tener una secuencia lógica y ordenada.
Proceso de la Investigación
Para realizar la presente investigación, el trabajo se desarrolló en tres fases, que se denominan: Inicial, Desarrollo y Culminación, a lo que Ary (2000) expresa que “a través de un desarrollo esquematizado, el abordaje de una investigación, tuvo pertinencia en su cronología y por ende racionalidad de cada una de las acciones emprendidas por el investigador” (p.19).
Al respecto, se plantea a continuación el procedimiento ejecutado por la investigadora para la obtención de datos e información pertinente y con relación a la temática en estudio, siendo de la siguiente manera:
Fase Inicial: Comprende los siguientes aspectos.
Visita y observación para la recopilación de información requerida, en escenarios dispuestos para ello como: bibliotecas públicas, privadas y personales
Observación de diferentes fuentes consultadas como: tesis, proyectos, informes, páginas web, entre otros.
Selección de información obtenida y clasificarla.
Fase de Desarrollo:
Recolección de información a través de la elaboración y desarrollo en la búsqueda de información para la elaboración del trabajo investigativo.
Análisis de la información obtenida a través de lectura calificada y seleccionada según la temática en desarrollo.
Fase de culminación:
Conformada por:
Elaboración de un constructo teórico.
Elaboración de Conclusiones y Recomendaciones.
En este orden de ideas, los investigadores deben describir el fenómeno en sus facetas de una manera clara y específica desde su génesis hasta su trascendencia.
Investigación Documental
El Marco Metodológico estuvo relacionado con la utilización de técnicas e instrumentos de recolección de información, en función del problema y de las interrogantes planteadas, en el desarrollo de la presente investigación se inició la selección por medio del fichaje, las diferentes temáticas que guardan relación estrecha con el proceso de aplicabilidad de la hermeneusis como parte del binomio Formación Docentes y su ejercicio en la Educación Universitaria.
Por su parte las fuentes documentales más comunes son:
Documentos impresos: cualquier soporte de información que genera una investigación: publicaciones periódicas, libros, artículos, informes, ensayos, entre otros.
Documentos no impresos: grabaciones, películas o artículos digitalizados en páginas web y afines.
En un sentido general, la presenta investigación se desarrolló sobre la base de la búsqueda que se realizó en fuentes, con el objeto de recabar información, organizarla, describirla e interpretarla de acuerdo con los procedimientos que garantizan confiabilidad y objetividad en la presentación de los resultados, respondiendo a las interrogantes iniciales que dieron origen y desarrollo a esta investigación.
RESULTADOS
Los resultados obtenidos demostraron que existen marcadas diferencias individuales en todas las variables de estudio, ya que según como se desarrolla la cotidianidad del estudiante universitario, es como naturalmente expresaría sus ideas y se relacionaría, ya que ello podría trascender socialmente para la adquisición, desarrollo y potencial del liderazgo en el gerente educativo. De tal modo que, la investigación permite descubrir rasgos de la cultura de comportamientos de los actores académicos, sus prácticas en el hacer docente y estudiantil, los factores favorecedores e inhíbidores del proceso de expresar los sentimientos y emociones de manera inteligente, las características tipológicas de la manera de motivar emocionalmente por parte del tutor a sus estudiantes, las acciones que resultan deseables para la calidad académica y las que pueden afectar la misma. Así pues, los hallazgos científicos obtenidos en esta investigación podrían trascender socialmente en beneficio de los estudiantes y docentes en ejercicio, en los cuales se demostraría que las destrezas y competencias en inteligencia emocional tienen repercusiones reales y positivas en la vida académica y personal de los docentes.
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Conclusiones
En el ámbito educativo, es prácticamente inevitable asociar la actividad docente con actividades propias de asesoría con el estudiante que se trata en el quehacer diario en las aulas del nicho universitario, ya sea en la relación que se establece con el profesor tanto en la hora de impartir la clase grupal, como en las relaciones que se dan de manera individual y particular, permitiendo en los estudiantes depositar en el profesor la responsabilidad de asesorarles tanto en aspectos personales como académicos, convirtiéndose para ellos en un punto de apoyo para su formación personal.
Ahora bien, si la dimensión emocional es la clave en las relaciones humanas y la práctica docente se desarrolla en escenarios interactivos, es válido entonces el llamado de atención a todos y cada uno de los que practican la docencia a cualquier nivel, a desarrollar explícita e implícitamente competencias socioafectivas, pues su papel mediatizador redunda en la adquisición de aprendizajes significativos, en el desarrollo emocional y en la convivencia pacífica de los discentes dentro y fuera del aula; pero también en la emocionalidad del propio docente y la eficacia de su labor
Lo antes expuesto permite inferir que los docentes deben aprender sobre el tema de la Inteligencia Emocional y desarrollar sus competencias emocionales como, por ejemplo:
Las aulas son un modelo de aprendizaje socio emocional adulto de gran impacto para los estudiantes.
Las instituciones educativas deben asumir la educación emocional de los ciudadanos.
Adecuados niveles de inteligencia emocional.
Un ambiente emocional positivo en el aula favorece el aprendizaje.
Finalmente, se destaca la necesidad en la formación de estudiantes como docentes en servicio, haciendo énfasis en la imperiosa necesidad de una adecuada educación en el área emocional de sus estudiantes, donde el papel del profesor cobre un protagonismo a la hora de plantearse el hilo de reflexiones en el tema de lo emocional.
Recomendaciones
Desde el punto de vista del investigador, se considera que debido al carácter mutable, diversificado y complejo de la educación del presente y futuro cercano, se debe adaptar a los requerimientos de la sociedad, a los valores que identifican y demandan las instituciones educativas a nivel superior y el profesional en formación, a quienes se les sugiere interiorizar un modelo de educación centrado en la inteligencia emocional, conociendo las pautas y estrategias para su aprendizaje como son las siguientes recomendaciones:
A las autoridades universitarias, específicamente a los encargados de la revisión permanente de los planes de estudio, contribuir a la implementación de objetivos que propicien un adecuado conocimiento y desarrollo de la Inteligencia Emocional en las asignaturas del Pensum de la Carrera de Educación.
A los estudiantes de pregrado y docentes en servicio, para que orienten sus estudios no solo a una adecuada formación profesional sino también personal y humano.
A los profesores para que aprovechen la información plasmada en esta investigación y sirva de apoyo a otras investigaciones relacionadas con el tema.
Referencias
Ary, J. (2000). Introducción a la Investigación Pedagógica. México: Editorial Interamericana.
Bar-On, R. (2005). El cociente emocional, (EQ-I): Manual técnico, Toronto, Canadá: Sistemas multisalud.
Croker, M. (2009). Conflictos en el aula de clases. México: Editorial Mac Graw Hill Latinoamericana.
Gardner, H (1983). Teoría de las Inteligencias Múltiples. Barcelona: Paidós.
Goleman, D. (2006). La Inteligencia Emocional. Buenos Aires: Javier Vergara. Editor.
Montemayor, M., García M. y Garza Y. (2000). Guía para la Investigación Documental. México: Ed. Trillas.
Thurstone y Thurstone (1999). La Naturaleza de la Inteligencia. Londres. Kegan, Paul & Trench, CO.**