1. Introducción

Uno de los principales retos del siglo XXI en el contexto educativo es, desarrollar al estudiante como unidad bio-socio-histórica, sentando las bases con las cuales actuará en su futuro, permitiéndole que, a través de la formación educativa, afiance sus competencias procedimentales, actitudinales y cognitivas, para enfrentarse a la realidad; de ahí que, la utilización de estrategias de inteligencia emocional (IE) por parte del docente en la cotidianidad de las actividades, oriente su conducta hacia una convivencia escolar sana que conlleve una acción transformadora.

En tal sentido, se realiza una breve reseña de la investigación, la cual encamina al niño en sus primeros años de escolaridad, a integrar conductas, experiencias, vivencias, que le permitan aflorar sus emociones a través del reconocimiento de ellas en las actividades realizadas en el espacio educativo. En este orden, por estar en la etapa de operaciones concretas, tiene la capacidad de usar la lógica y caracterizar aspectos de una realidad compleja. Visto de esta manera, cuando las estrategias de inteligencia emocional hacen presencia en los programas curriculares educativos, se puede combinar actividades que vinculen el área cognitiva y afectiva como parte del proceso, la convivencia como ápice de la pirámide del aprendizaje, considerando la amistad, cooperación, solidaridad y relaciones interpersonales como parte de la misma, adaptadas al contexto de hoy.

Así, la presente investigación se basa en analizar la inteligencia emocional como estrategia que fortalece la convivencia escolar de los estudiantes de cuarto grado de la IE ‘El Carmelo’, en el municipio de San Juan del Cesar, departamento de La Guajira. Para lograr este propósito, el proceso investigativo se estructura en cuatro fases: la primera, comprende el resumen, referido a la línea de investigación, área temática y tema, así como también el problema y la formulación del mismo, la redacción de sub preguntas de investigación, la consolidación de los objetivos, tanto el general como los específicos, para terminar con la justificación.

Asociado a lo anterior, se continúa con la segunda fase, dinamizando el marco de referencia teórico y conceptual en el que se establece la revisión del tema, conforme a investigaciones internacionales, nacionales y regionales para conformar los respectivos antecedentes; a esto se le añade las bases teóricas que sustentan la investigación, soportada por autores estudiosos del tema, así como también, el referente legal y ético que apunta a las buenas prácticas del proceso.

Seguido a esto, se puede encontrar el diseño metodológico, con su paradigma y enfoque, congruente con el método de investigación, dando lugar al establecimiento de las unidades de análisis y de trabajo. Sumado a ello, los criterios de selección de los participantes, al igual que las estrategias de recolección de información, las cuales se detalla en una tabla descriptiva que fue fundamental en la utilización de los instrumentos, como: la entrevista semiestructurada, la guía de observación y el diario de campo, a través de los cuales se desarrolla el trabajo de campo.

A esto se suma la búsqueda de los criterios de calidad, como: credibilidad, transferibilidad, dependencia o consistencia y confiabilidad, para el aval de la interacción en el aula con las estrategias de recolección de información, aspectos de índole metodológica que permite una mayor estructura del documento, vinculando de manera congruente y lógica las áreas o partes de la investigación, enmarcadas, por un lado, por criterios transversales que, con cierta independencia, describen elementos fundamentales de la investigación cualitativa y, por otro lado, actualizan a través de los métodos y las posturas de los referentes teóricos, que dan lugar a las reflexiones conectadas al proceso de la investigación en su conjunto, buscando de este modo que cada vez exista un cuerpo consolidado y reconocido de contenidos relacionados con la inteligencia emocional y la convivencia escolar.

En cuanto a la cuarta fase, se da sentido a la discusión de los nuevos hallazgos, producto de las manifestaciones de los estudiantes acerca de la práctica pedagógica de los docentes en cuanto a uso de estrategias para la enseñanza y aprendizaje de la inteligencia emocional y la convivencia escolar. Aquí, se denota la práctica docente y las reflexiones pedagógicas de los mismos (autorreflexión y autorregulación), conducentes al desarrollo de estrategias de inteligencia emocional como apoyo a la convivencia escolar de los estudiantes de cuarto grado. Por último, se estableció las conclusiones y recomendaciones inherentes al resultado del estudio.

Justificación

Cuando se promueve una educación integral basada en estrategias de inteligencia emocional en la convivencia escolar, los estudiantes desarrollan competencias no solo en el área académica, sino también a nivel personal y social, pues esta les permite adquirir las herramientas necesarias para ser felices y lograr una vida plena con relaciones proactivas en cualquier contexto. Por tanto, esta investigación se justifica desde los siguientes puntos de vista:

Teóricamente, representa un aporte por el contenido bibliográfico consultado y demás investigaciones que sirven de orientación en el campo del conocimiento científico respecto a la inteligencia emocional y la convivencia escolar. De allí, la recopilación de información actual sobre la temática contribuye a la gestión de las emociones mediante las habilidades asociadas a la inteligencia emocional en la convivencia escolar. En efecto, la forma como se fundamenta científicamente la inteligencia emocional, le permite al docente conocer el funcionamiento del cerebro y su estructura, de manera que logre activar en los estudiantes sus capacidades emocionales, para dar respuestas a los desafíos que requieren poner en marcha sus procesos cognitivos, haciéndolo consciente de su amplia comprensión para el trabajo en cualquier área de conocimiento.

El aporte práctico se justifica porque el docente, a través de la puesta en marcha de las estrategias de inteligencia emocional en su hacer pedagógico, posibilita al estudiante el fortalecimiento para aprender a convivir expresando sus emociones en un contexto particular, redundante en el bienestar, prosperidad, calidad de vida y una puesta en marcha de valores y actitudes que ayudan a mejorar su sistema de relaciones en el plano personal, familiar y social. Además, propone el promover estrategias de inteligencia emocional que apoyan la convivencia escolar de los estudiantes.

En cuanto a la pertinencia social, esta temática es de gran relevancia por cuanto el estudio brinda a los docentes y estudiantes de la IE ‘El Carmelo’, herramientas que, en el marco institucional, se convierten en un detonante positivo para la siembra de valores conducentes a la utilización de sus capacidades y destrezas conducentes a establecer relaciones personales de forma asertiva. Además, los resultados podrán ser socializados para viabilizar la forma de llevarlos otros escenarios, dentro o fuera de la institución, brindando solución a sus problemas, ya que es posible influir en la capacidad para variar patrones de comportamiento al enfrentar diferentes cambios, tanto físicos como psicológicos, pues están atravesando una etapa de su vida que trae consigo nuevas experiencias, diferentes formas de ver la vida, marcadas por las emociones.

Su utilidad metodológica ofrece una serie de técnicas e instrumentos de recolección de datos aplicadas a los estudiantes de cuarto grado, que servirán de apoyo y orientación a futuros investigadores que abordan temas de interés como la inteligencia emocional y la convivencia escolar, en el marco de una globalidad que permite la utilización de estos aportes a la problemática planteada, propiciando espacios armoniosos de participación para todos los actores involucrados en el acto educativo.

2. Metodología

A continuación, se describe el diseño metodológico de forma gráfica:

Es aquí donde cobra vigencia la investigación – acción (IA), porque apunta a la producción de un conocimiento propositivo y transformador, mediante la reflexión y construcción colectiva de saberes previos entre los estudiantes de la IE ‘El Carmelo’.

Metodología (Paradigma y enfoque)

La presente investigación está inmersa en un paradigma postpositivista porque busca analizar la inteligencia emocional, como estrategia pedagógica en la convivencia escolar, bajo un constructo ontológico de una realidad para, después, interpretarla considerando los fenómenos sociales que se presentan a través de la interacción de los participantes. Para Martínez (2011), este paradigma se fundamenta en el concepto ‘subjetivo’, lo que significa que tiene influencia en las percepciones y actitudes personales frente a una posición teórica que, por tradición, ha sido aceptada. En este sentido, el estudio busca profundizar sobre el conocimiento y comprensión del porqué la inteligencia emocional como estrategia pedagógica es importante en la convivencia escolar.

Inmerso en este paradigma, la investigación marca un enfoque cualitativo, como un estudio que integra un todo, a través de una unidad de análisis constituida por seres humanos y que hace que algo sea lo que es (Martínez, 2011). Para Watson-Gegeo (1982, citado por Pérez Serrano, 1994), tiene que ver con esas descripciones detalladas que se hace sobre la unidad de análisis, sus interacciones y comportamientos que son observables; igualmente, facilita la comprensión de técnicas cualitativas para interpretar las categorías y subcategorías que se derivan en el ser humano y surgen de las experiencias de un espacio de aprendizaje.

Desde allí, para el estudio se incorpora la experiencia de los docentes y estudiantes en cuanto a sus creencias o reflexiones con expresiones propias del problema existente, bajo una estructura dinámica en una práctica social, permitiendo la relación entre objeto y sujeto, conducentes a desarrollar el pensamiento crítico, creativo y, fomentar la convivencia a través de una participación libre, como parte de una comunicación asertiva que busca el equilibrio emocional.

3. Método

El método utilizado está orientado hacia la IA, considerando que, en el trabajo realizado, el investigador forma parte del problema y está directamente involucrado a través de la observación y participación directa. Uno de los principales objetivos está en conocer cómo las personas interpretan las estructuras sociales para desarrollar actividades comunes (Martínez, 2011). Además, por ser de carácter práctico, la IA abarca la problemática sobre la práctica educativa, teniendo como herramienta principal, la observación, por medio de la cual es posible la reflexión y la posterior acción como solución al problema hallado. Así, la comunidad de estudiantes y profesores proporciona información para llevar a cabo acciones sistemáticas, formulando procedimientos consensuados y participativos.

Por su parte, Mora (2004) asume la práctica del método como objeto de estudio en sí misma, objeto de análisis, reflexión e intervención, con responsabilidad ética y profesional, resaltando la importancia, al desarrollar procesos como este, porque favorecen el análisis riguroso del estudio e implican la búsqueda bibliográfica para extraer de una teoría y los aspectos aplicables para la situación problema en una realidad contextual.

Cuando se utiliza en el campo educativo, permite comprender los procesos que están inmersos en la enseñanza desde la investigación. Para Pérez Serrano (1994), la IA supone una búsqueda continua de información que conlleva entender el hacer docente integrado con la reflexión y el análisis de la práctica, considerando sus experiencias reales de su desempeño. En el caso de la presente investigación, aun cuando los problemas orientan la acción, la IA promueve la exploración reflexiva que, tanto el docente como el estudiante tienen en su práctica diaria, situación que contribuye a generar estrategias pedagógicas adaptadas a la realidad y a las necesidades actuales, afianzando la capacidad de introducir mejoras continuas. Esta autora esquematiza los rasgos que definen la IA, evidentes en la Figura 2.

Unidad de análisis y unidad de trabajo

Para esta investigación fue necesario seleccionar las unidades de análisis que pasarían a conformar la muestra del estudio. Esta apreciación se sustenta en el criterio de Cohen y Mannion (2010), cuando señalan que, la muestra “es una parte representativa de un conjunto, poblacional o universo en la que entran todos los miembros de la población” (p. 109). De igual manera, la elección de unidades de trabajo estuvo manejada por las investigadoras, teniendo en cuenta el criterio de los autores precitados, quienes refieren que, cuando el investigador selecciona una muestra, está obligado a describir los criterios o mecanismos que aplicará para obtenerla.

Unidad de análisis

Díaz-Barriga y Hernández (2005) afirman que “la población es el conjunto de todos los casos que concuerdan con determinadas especificaciones. La población es el conjunto integrado por todas las partes, mediciones u observaciones del universo de la investigación” (p. 121). Por lo tanto, se puede definir varias poblaciones en un solo universo, como tantas características a medir.

Para este estudio, se tomó como unidad de análisis, a 34 estudiantes de cuarto grado de la IE ‘El Carmelo’, en su totalidad, previo consentimiento informado a los padres y/o representantes y, dos docentes, según reporte de la Secretaría de la institución, con los cuales se espera vivenciar los aspectos de la inteligencia emocional y la convivencia escolar, en aras de conocer de primera mano la problemática que pudiera estar afectando los procesos de enseñanza y aprendizaje y lograr soluciones adecuadas para una sana convivencia.

Teniendo en cuenta la situación pandémica provocada por la COVID-19 y que obligó al cierre temporal de los centros educativos por el distanciamiento social y condujo a la virtualidad, el desarrollo de los programas educativos realmente se tornaba difícil, como también, realizar la recolección de datos con todos; por lo tanto, solo diez niños de cuarto grado fueron autorizados por sus padres para formar parte de la investigación; esta población participó de forma activa en el estudio y fue fuente de información en la aplicación de los instrumentos metodológicos.

Unidad de trabajo

Una vez obtenidas las unidades de análisis, se dio lugar a la estratificación de la muestra, definida por Díaz-Barriga y Hernández (2005) como “un subconjunto de elementos que pertenecen a un conjunto definido en sus características, llamado población” (p. 131). En esta investigación, dado que el tamaño de la población era relativamente pequeño, se tomó la totalidad de las unidades de análisis como muestra por conveniencia, con el propósito de que fuera coherente con el método cualitativo, indicando qué se iba a explorar (objetivos), cómo se debía proceder (la estrategia) y qué técnicas se iba a utilizar (la recolección); de este modo se conformó la unidad de trabajo.

Criterios de selección

Es fundamental que, en toda investigación, los hechos y relaciones que se establece con los resultados obtenidos, tengan el máximo grado de exactitud y confiabilidad, todo lo cual va a depender de las técnicas que se utilice. En este contexto, para el proceso de selección se consideró las siguientes características:

• Estudiantes de cuarto grado de las escuelas públicas del municipio de San Juan del Cesar.

• Estudiantes de cuarto grado de la escuela pública ‘El Carmelo’.

• Estudiantes niñas y niños con edades comprendidas entre 9 y 11 años.

• Estudiantes niños y niñas con posibilidades de conexión y autorizados por sus padres.

• Docentes con más de tres años de experiencia en el grado cuarto en la escuela pública ‘El Carmelo’.

• Docentes que, actualmente, estén asignados al grado cuarto en la escuela pública ‘El Carmelo’.

Estrategias de selección de la información

Representan la forma como las investigadoras proceden a recabar la información necesaria para dar respuesta al objetivo de estudio; es decir, “las herramientas que permitirán registrar la información tal y como es expresada por los sujetos seleccionados en el proceso investigativo” (Galeano, 2012, p. 51). Con esto en mente, se hace necesario tomar en cuenta todas las fases preparatorias, la fase de trabajo de campo y la fase analítica para, posteriormente, llegar a la fase de resultados y emitir el informe final; para ello se emplea técnicas e instrumentos orientados a obtener información, los cuales se explica a continuación:

Técnicas de recolección de información. Ya con un perfil claro acerca de las técnicas de recolección de datos, se procede a escoger aquellas que más se ajustan a la investigación y que, de alguna manera, permiten obtener la mayor información posible. Tomando en cuenta esta premisa, para la primera fase preparatoria se procedió a buscar la información y verificar el problema, utilizando fuentes bibliográficas de autores referentes al tema e investigaciones previas; de igual forma, a realizar una entrevista semiestructurada a los docentes y a los estudiantes que, según Hurtado (2010), es una técnica de gran utilidad en la investigación cualitativa para recabar datos y la define:

Como una conversación que se propone un fin determinado, distinto al simple hecho de conversar; tiene como base, contar con una guía de entrevista, con preguntas agrupadas por temas o categorías, con base en los objetivos del estudio y la literatura del tema. Su ventaja es la posibilidad de adaptarse a los sujetos con enormes posibilidades para motivar al interlocutor, aclarar términos, identificar ambigüedades y reducir formalismos, como una forma de obtener resultados más acercados a la realidad objetiva. (p. 74)

Para esta fase también se utiliza la observación participante, como técnica que permite la adquisición de información y que tiene como objetivo, recolectar datos sobre las acciones, opiniones y perspectivas del sujeto historiador (Rodríguez et al., 2016). En efecto, fue una técnica conveniente para las investigadoras, pues a través de su utilización se comprendió el medio social de interacción, al participar activamente en las actividades y establecer relaciones abiertas con los sujetos, recibiendo datos directos y descriptivos sobre el problema presentado.

Como afirma Hurtado (2010), la observación participante es empleada en la investigación cualitativa y busca registrar los sucesos observados, en función de las categorías y subcategorías. Para lograr mayor objetividad, fue necesario construir una guía de observación (lista de cotejo), que se utilizó en el mismo momento en que las observadoras hacían parte de la situación, describiendo los comportamientos de los docentes y los estudiantes del grado cuarto de la IE ‘El Carmelo’.

Los datos recolectados a través de la observación participante fueron sustento para las categorías preestablecidas: ‘Tipos de inteligencia emocional’, ‘Componente y factores de la convivencia escolar’. Bajo este particular, los registros sistematizados durante las fases preparatorias de campo y analítica de la investigación, permitieron desarrollar la propuesta presentada en función de promover estrategias de inteligencia emocional en la convivencia escolar, de suerte que se pueda fortalecer desde un espacio de aprendizaje.

Cabe destacar que, los relatos y anécdotas descritas en los diarios de campo de la segunda fase fueron tomados directamente de la realidad, como sustento de las categorías prestablecidas (tipos, componentes de la inteligencia emocional y los factores presentes en la convivencia escolar) y registros de sucesos observados en la fase inicial y en el desarrollo de la propuesta de intervención, los cuales fueron asentados en el diario de campo, tomados en el mismo momento o inmediatamente después de haber ocurrido. Como expone Hurtado (2010) “es la técnica empleada en la investigación de tipo cualitativa que va a permitir en todo momento el registro de los sucesos observados en función de las categorías y subcategorías en estudio” (p. 124).

En este orden de ideas, la bitácora o diario de campo sirvió a las docentes investigadoras para tomar nota de aspectos que consideraron importantes para organizar, analizar e interpretar la información en función de las observaciones referidas a distinguir los tipos y establecer los componentes de la inteligencia emocional, con el fin de reforzar los factores presentes en la convivencia escolar para promover estrategias de inteligencia emocional en los estudiantes de cuarto grado. Cabe destacar que este instrumento se utilizó durante todo el proceso de la investigación, haciendo énfasis en las categorías de estudio, aportando datos relevantes para la triangulación de las mismas.

Bajo este punto de vista, Porlán (2010) señala que la bitácora o diario de campo es instrumento de monitoreo constante del proceso de observación, fundamental en las investigaciones de prácticas pedagógicas, y tiene lugar en las IE, en la medida en que oriente a los estudiantes a obtener conocimientos, habilidades, actitudes, valores culturales y éticos, contenidos en un perfil profesional del docente a lo largo de un período de tiempo, poniendo de manifiesto los aspectos del aprendizaje.

Hurtado (2010) manifiesta que los instrumentos de recolección de datos comprenden procedimientos y actividades que le permiten al investigador obtener información necesaria para dar respuesta a la pregunta de investigación. Por ende, la Lista de cotejo como soporte del diario de campo, visibiliza el listado y verifica los posibles aspectos a evaluar (contenidos, capacidades, habilidades, conductas, entre otros), actuando como un mecanismo de revisión durante el proceso enseñanza y aprendizaje (Bonilla-Castro y Rodríguez, 2005). En esta investigación, la lista de cotejo se utilizó para establecer los componentes de la inteligencia emocional, reforzar los factores en la convivencia escolar y promover las estrategias de inteligencia emocional de los estudiantes de cuarto grado de la IE ‘El Carmelo’ en el municipio de San Juan del Cesar, departamento de La Guajira.

La entrevista semiestructurada se llevó a cabo a los 34 estudiantes y a las dos docentes, con la intención de alcanzar interpretaciones acordes con el propósito del estudio. Este tipo de entrevistas es la que despierta mayor interés en los sujetos entrevistados, para expresar sus puntos de vista de manera relativamente abierta. Esto permite a las docentes investigadoras, estar preparadas y parecer competentes durante la conversación.

Criterios de calidad para las estrategias de recolección de información

En contexto, se consideró la técnica de la observación participante como una apropiación relevante al medio donde se realizó la investigación, que permitió el acercamiento y la descripción puntual de lo que sucedía en el aula, mientras se promovía las estrategias de inteligencia emocional. Los instrumentos que se usó para la recolección de la información fueron la entrevista semiestructurada, bitácora o diario de campo y lista de cotejo para la recolección de la información primaria en la población a inferir y, posteriormente, obtener el análisis de los resultados arrojados y los respectivos indicadores, para establecer las conclusiones válidas y las recomendaciones.

La validez es un estándar de rigor científico, independientemente de los paradigmas que orientan la investigación, porque el objetivo fundamental de toda investigación es encontrar resultados verdaderos y creíbles. Ahora bien, referenciando la fiabilidad, implica que un estudio se puede repetir con el mismo método, sin alterar los resultados.

Para esta investigación, con relación a las estrategias de recolección de información referidas a la entrevista semiestructurada y la elaboración de las listas de cotejo para sistematizar la información, fue necesario cumplir tanto con el criterio de calidad como con el de credibilidad, transferibilidad, dependencia o consistencia y confirmabilidad, transparencia, reflexividad y, desde luego, coherencia discursiva que, a lo largo de toda la búsqueda de información y análisis se obtuvo; de allí que se presentan de manera formal, al juicio de un experto quien emitió por escrito la pertinencia que tienen los mismos para el abordaje del tema presentado.

Ahora bien, en el manejo de cualquier proceso de investigación, existe un buen número de decisiones (epistemológicas, teóricas, metodológicas, éticas), que son tomadas de un modo u otro, bien por pura inercia de forma que produzcan efectos no intencionados en el transcurso del proceso, o bien de manera estratégica; es decir, la intención por parte del investigador debe ser, tomar las decisiones lo más conscientemente posible, de forma que estas sean lo más coherentes y productivas a la hora de realizar los análisis finales; por tanto, estos criterios deben estar presentes en todo el proceso, a fin de crear un documento científico lo más cercano a la realidad.

Matriz de categorías

La Tabla 3 muestra las categorías y subcategorías cuyas respuestas están adheridas a la aplicación de la técnica de la observación, específicamente la observación participante y, a la información registrada en los diarios de campo y lista de cotejo al momento de la propuesta de intervención, considerando los tipos y componentes de la inteligencia emocional, así como los factores presentes en la convivencia escolar, apoyados en autores que los sustentan teóricamente que, en suma, permiten implementar estrategias de inteligencia emocional en los estudiantes de cuarto grado.

Sistematización, procesamiento y análisis de la información

Constituye una técnica importante en la investigación cualitativa; “al considerar que los datos por sí solos no proporcionan respuestas a la pregunta de investigación, es necesario procesarlos y analizarlos de manera ordenada y coherente con el fin de discernir patrones y relaciones” (Monje, 2011, p. 29), descomponiendo un todo en sus partes constitutivas para así, comprender estas unidades de información y llegar a los resultados del estudio.

En esta etapa se aplica las técnicas de análisis elegidas en el diseño de la investigación; para esta tesis son estudiadas a profundidad las observaciones realizadas, las listas de cotejos, los registros del diario de campo y demás evidencias que permiten llegar a encontrar los hallazgos pertinentes.

Para la interpretación de los resultados alcanzados en este proceso investigativo de corte cualitativo se utilizó la triangulación, para el análisis de las implicaciones de lo observado dentro de un contexto más amplio; es aquí donde el proceso de interpretación comprende la comparación de los resultados con los objetivos del estudio. Según Ortiz (2013), en la investigación cualitativa, el proceso completo implica la categorización, contrastación y la teorización, para llevar a cabo el análisis de los datos mediante la triangulación.

Dentro del marco de esta investigación, la triangulación comprende el uso de varias estrategias cónsonas con el mismo fenómeno de estudio, que no es otro que analizar la inteligencia emocional como estrategia pedagógica que apoya la convivencia escolar de los estudiantes de cuarto grado; la intención es aumentar la validez y consistencia de los hallazgos, como también, ampliar y profundizar su comprensión, categorizando elementos comunes, contrastando la teoría, la realidad observada y el punto de vista de las docentes investigadoras.

Aquí lo imprescindible es dar respuesta al interrogante central de investigación. En ese sentido, la sistematización de la información obtenida en cuanto a inteligencia emocional como estrategia pedagógica en la convivencia escolar, está inmersa en el paradigma post positivista, desarrollándose en escenarios naturales para reunir información en el sitio, buscando comprender la realidad de los estudiantes en sus espacios educativos a través del proceso de observación, interpretación y revisión.

Esta interacción entre el investigador y su objeto de estudio es dinámica y flexible, considerando la inteligencia emocional como estrategia pedagógica cónsona en el contexto de la convivencia, donde día a día se despliegan conversaciones e intercambio social que permiten la comunicación de experiencias, vivencias y otras.

En consecuencia y, para dar cumplimiento al objetivo general, se procedió a construir la primera fase con la revisión literaria, descripción de la situación problema, construcción de antecedentes, explorando la situación real que se quería abordar en la investigación, extendiéndose con la búsqueda de información a través de una entrevista semiestructura a los docentes y estudiantes, para llegar al trabajo de campo y la lista de cotejo que revela los comportamientos de unos y otros en su realidad o contexto de manera objetiva, aportando información de gran utilidad.

Siguiendo con la sistematización, para la segunda fase se considera el diseño de la metodología para el trabajo de campo, considerando la unidad de trabajo donde se aplicó:

a) la técnica de la observación como registro escrito que permitió descripciones de la realidad con precisión y calidad;

b) el diario de campo como instrumento a través del cual se llevó las descripciones de la aplicación de las estrategias, accediendo a sistematizar las prácticas investigativas.

Cuando se organizó los hallazgos, se dio inicio a la tercera fase analítica, orientando la promoción de estrategias pedagógicas de inteligencia emocional en la convivencia escolar, realizando la triangulación para dar mayor veracidad y soporte de validez a todas las observaciones hechas por las investigadoras respecto a los estudiantes de cuarto grado, para, por último, cerrar con la cuarta fase ‘Identificación de los resultados’, ‘Conclusiones’ y ‘Recomendaciones’ del trabajo de investigación.

3. Resultados

Una vez aplicados los instrumentos de recolección de la información, se procedió a realizar el tratamiento correspondiente para su análisis, el cual permitió llegar a obtener los hallazgos finales que generaron las interpretaciones de acuerdo con los referentes teóricos y las experiencias significativas de las investigadoras, destacando su interpretación a través de la triangulación de estos aspectos.

Según esto, la información se presenta en un enfoque cualitativo de análisis, organizado en cuatro fases: preparatoria, trabajo de campo, analítica y de identificación de resultados, diseñadas para dar respuesta a los objetivos e interrogantes de la investigación; además, para el desarrollo de cada fase, se empleó unos instrumentos de recolección de datos a los informantes claves, en este caso a dos docentes y a diez estudiantes de cuarto grado, que permitieron delinear los aspectos referentes a la categoría de estudio: Inteligencia Emocional como estrategia pedagógica en la convivencia escolar.

A continuación, se inicia el proceso de análisis siguiendo el orden de las fases y sus respectivos instrumentos, con el fin de obtener los principios rectores que guiaron la producción de los nuevos conocimientos, con base en: referentes teóricos o contenido significativo sobre las categorías, aporte del informante clave docente y/o estudiante y, reflexión interpretativa de las investigadoras, con sus respectivas evidencias recogidas durante el proceso de investigación.

Fase I. Preparatoria contentiva al Objetivo 1. Distinguir los tipos de inteligencia emocional presentes en la convivencia escolar de los estudiantes de cuarto grado en la IE ‘El Carmelo’ en el municipio de San Juan del Cesar, departamento de La Guajira, para la cual se aplicó una entrevista a profundidad a los estudiantes seleccionados como informantes claves y, posteriormente, la entrevista a los docentes. Su análisis se presenta enseguida.

En cuanto a los resultados de la entrevista a los estudiantes, se obtuvo los siguientes aspectos significativos:

Categoría 1.Tipos de inteligencia emocional

Subcategorías o unidades de análisis: Inteligencia intrapersonal

Referente teórico: para Gardner (2011), este tipo de inteligencia es definida como “el conjunto de habilidades cognitivas que hace referencia a los aspectos internos que tiene el individuo en su manera de pensar, sentir y actuar” (p. 74).

Subcategorías o unidades de análisis: Inteligencia intrapersonal

Referente teórico: para Gardner (2011), este tipo de inteligencia es definida como “el conjunto de habilidades cognitivas que hace referencia a los aspectos internos que tiene el individuo en su manera de pensar, sentir y actuar” (p. 74).

Preguntas relacionadas con esta subcategoría, análisis de las respuestas obtenidas de los estudiantes.

Reflexión de las docentes investigadoras

Al realizar el planteamiento del problema, inicialmente de acuerdo con observaciones no estructuradas realizadas a los estudiantes de cuarto grado en su salón de clase, se pudo conocer que, en la convivencia escolar revelaron la ausencia de aceptación entre ellos, una curva baja de aprendizaje, evidenciada en falta de interés y motivación por unas buenas relaciones o, falta de empatía, irrespeto en su trato, elaboración de juicios en su compañerismo, una vez finalizada la implementación de las estrategias tipo taller, estructuradas en actividades pre instruccionales e inter instruccionales llevadas a cabo por las docentes investigadoras.

Al respecto, se evidenció que los estudiantes tienen las dos inteligencias: la interpersonal y la intrapersonal en el desarrollo de su aprendizaje emocional y cognitivo; no obstante, la de mayor significación es la primera, o la que se da en relación con los otros, ya que en sus diálogos y actuaciones con sus compañeros se mantiene en equilibrio; pero esto se rompe cuando llega una fuerte emoción, o cuando sucede algo que cambia su estado de ánimo; esto los pone tristes o enojados y, es necesario estar conscientes, orientarlos para que se autorregulen y puedan volver a equilibrarse.

Para que haya este equilibrio es esencial permitir que las fuerzas más constructivas de sí mismos sean protagonistas en la elección de las direcciones de los sentimientos. En los estudiantes, manejar las emociones consiste en desarrollar actividades que les permitan viajar al mundo interno de ellos mismos y observarse. Es fundamental reconocer las emociones propias, para luego reconocer las de los demás; realizar este viaje interno es lo más complicado, cuando se trata de tomar conciencia; les cuesta convertir las emociones en sentimientos, pero eso no implica que no se pueda trabajar o desarrollar la inteligencia emocional en ellos.

Teniendo en cuenta los datos suministrados en esta entrevista, las investigadoras, según los referentes teóricos citados y los registros del diario de campo, pueden interpretar que la inteligencia emocional, en sus dos tipos, está presente en la actuación, pensamiento y emociones de sus estudiantes y que, tanto en los eventos de la vida escolar como en la familiar, hay una trayectoria directa sobre las capacidades y habilidades psicológicas, que implican el sentimiento, entendimiento, regulación, modificación de las emociones propias y ajenas.

En este mismo orden de ideas, el tipo de inteligencia que prevaleció, según los hallazgos encontrados, es la interpersonal, ya que es también la edad de las relaciones sociales; les importa mucho quedar bien con el grupo, socializar, agradar a otros, comunicarse, contar lo que quieren y como lo quieren, expresan lo que sienten de forma auténtica; valoran los aportes de los otros, tienen confianza en sus amigos o integrantes de su equipo de trabajo, afirman su interés por sus cosas y aprecian de manera equitativa los intereses de los otros.

De acuerdo con esto, esta experiencia permitió a los estudiantes expresar emociones y acciones frente a situaciones presentadas en su contexto escolar y fuera de él. Además, se convirtió en un soporte para la construcción y fortalecimiento de la convivencia escolar, lo cual lleva a mejorar las relaciones entre pares, a desarrollar formas de trabajo efectivo que generen impacto en la vida escolar y, por supuesto, a una sana convivencia.

Al llevar estos resultados al ámbito educativo de la básica primaria, se puede evidenciar que la inteligencia emocional interpersonal se convierte en un factor decisivo para la convivencia escolar a la hora de formar hábitos de estudio y de comportamiento, lo que implica que, tanto el docente en su rol de líder como el estudiante, tienen la capacidad de gestionar satisfactoriamente sus emociones integrando la inteligencia para lograr los resultados previstos, mejorando así las relaciones propias y con otros.

Posteriormente, en esta Fase I, con relación al Objetivo 2, ‘Establecer los componentes de la inteligencia emocional en la convivencia escolar de los estudiantes de cuarto grado…’, se aplicó a las docentes una entrevista, una lista de cotejo y los aspectos resaltantes del diario de campo registrados para el logro de este objetivo; es interesante destacar los siguientes aspectos que fueron analizados:

Haciendo referencia a las entrevistas realizadas a los docentes con respecto al caso de una rabieta o expresión de ira como emoción en una situación dada, se puede inferir que los docentes investigadores, en circunstancias similares a las presentadas durante la implementación de las estrategias, con su experiencia y conocimiento les permitieron, en primer lugar, identificar qué estaba ocurriendo; segundo, a interpretar y comprender el estado emocional donde se encontraba el estudiante, orientándolo para darse cuenta del momento y gestionar adecuadamente sus emociones, desarrollar empatía en ese momento con el o los demás y, desde luego, establecer y conservar las relaciones con todos.

Por tanto, es necesario que los docentes estén informados sobre el manejo de la inteligencia emocional, para poder brindar orientación y apoyo, ya sea en los procesos internos de reconocer sus emociones o de saberlas conducir con los otros, en el marco de la realización de estrategias encaminadas a fortalecer el desarrollo de las capacidades cognitivas de la mano de las emociones, en la convivencia escolar, desarrollando su autonomía, valores, confianza y dominio propio.

Categoría 2. Componentes de la Inteligencia Emocional

Aunado a lo anterior, cabe destacar, de acuerdo con los datos suministrados por estudiantes y docentes en las entrevistas llevadas a cabo para dar cumplimiento al Objetivo 2, relacionado con establecer los componentes de la IE en los estudiantes, que se aplicó una observación directa a través de una lista de cotejo que se presenta a continuación, con los datos que arrojó para su análisis.

Para la realización de esta actividad, participaron diez sujetos de estudio. La estrategia se llevó a cabo en reunión por medio de la aplicación Google Meet, teniendo en cuenta que el mundo vive la pandemia de la COVID-19.

Inicialmente, se reunió al grupo para compartir información sobre los componentes de la inteligencia emocional, ofreciendo una lectura que les permitió manifestar su postura personal; posteriormente, debían realizar un mapa mental utilizando la aplicación MindMeister, con las preguntas sugeridas por las investigadoras. La temática determinada para la actividad fue una historia sobre una situación cotidiana en la convivencia escolar. En las instrucciones se les explicó que leyeran una historia de su vida cotidiana con aspectos negativos de sus personajes; luego se realizarían preguntas para mirar la postura personal de los estudiantes. Posteriormente, se les leyó la historia, donde se cambió la actitud de los personajes para mostrar una cara positiva de lo sucedido. Al finalizar la actividad se les invitó a disponerse para plasmar en un mapa mental las emociones sentidas por los personajes de la historia, con la finalidad de socializar los comentarios desde su propio punto de vista. Cada uno de los participantes expuso su postura sobre el contenido y, con apoyo de las investigadoras, lo contextualizaron a sus vivencias dentro de la convivencia escolar.

La historia compartida con los estudiantes fue la siguiente: Cierto día, en la hora del recreo, se encontraba jugando a la ronda un grupo de niños de cuarto grado; de pronto, Carlos se acerca a la ronda expresando su interés de participar en el juego, pero Pedro, con tono desafiante, le dice que no puede jugar. Carlos se aleja del grupo, bajando la cabeza.

Este ejercicio permitió evidenciar la forma cómo los estudiantes asumen su posición ante situaciones de la vida diaria, como sustentan sus opiniones y, qué estrategias emplean para lograr la interacción del grupo, las cuales influyen en su accionar. Al concluir el tiempo previsto, a través de la disertación, se observó que sus respuestas se argumentaban por las emociones expresadas; algunos manifestaron sentirse muy tristes por la actitud de uno de los personajes, que fue desafiante con el otro compañero. Todas estas percepciones fueron plasmadas por los sujetos de estudio en un mapa mental; se observó la emoción y afinidad que sintieron con cada personaje de la historia. En esta actividad se hizo el análisis de situaciones emocionales.

Observaciones: los comportamientos observados en los sujetos de estudio, reflejados en el diario de campo, son descritos a continuación:

•Estudiante 1. Durante la actividad se notó seguro, expresando sus ideas con dominio del tema, de manera articulada y coherente frente a la temática.

•Estudiante 2. Realizó respuestas pausadas y manejó el contexto.

•Estudiante 3. Respondió con claridad, argumentó sus participaciones, algunas con confusión, sin contextualización.

•Estudiante 4. Respondió las preguntas del conversatorio, manteniendo atención en la actividad.

•Estudiante 5. Solicitó el espacio para participar, expresándose de manera coherente y elocuente en el desarrollo de sus ideas; se hizo entender con facilidad.

•Estudiante 6. En el ejercicio realizó intervenciones manteniendo sus argumentos con claridad en algunos conceptos de emociones, lo que muestra su claridad conceptual.

•Estudiante 7. Estuvo receptivo; expresó sus ideas teniendo en cuenta el momento de su intervención y las desarrolló ordenadamente; buscó mantener y relacionar sus aportes con las vivencias cotidianas que tienen lugar en su campo educativo y formativo.

•Estudiante 8. Mantuvo el hilo conductor en las respuestas, mostrando interés en el tema.

•Estudiante 9. Mantuvo una disposición de participación en el desarrollo de la actividad, expresando abiertamente su punto de vista.

•Estudiante 10. Se mantuvo callada durante la actividad; solo respondía cuando se le preguntaba.

Interpretación de la estrategia pedagógica. Esto llevó a conclusiones generales de la experiencia, sensibilizándose cada estudiante sobre sus oportunidades de mejora y las fortalezas que están presentes en su convivencia diaria. Además, permitió evidenciar la forma como cada uno de ellos asume su punto de vista y sustenta su posición ante cualquier circunstancia de la cotidianidad, así como las estrategias de mejoramiento de la interacción del grupo y su contexto y, brindó la oportunidad de ver cómo actúan ante estas diferentes situaciones y problemas.

Esta experiencia significativa permitió a los estudiantes asumir el rol desde diferentes acciones planteadas, su capacidad de argumentar y, defender sus pensamientos y sentimientos en cada uno de los momentos en el desarrollo de la discusión. Este tipo de acción apoya a los estudiantes a la exploración de sus dimensiones, donde se evidencie sus debilidades y fortalezas, conociendo los componentes de la inteligencia emocional, como estrategia pedagógica para el fortalecimiento de la convivencia escolar.

Es valioso que, como docentes, propiciemos estos espacios o ambientes de aprendizaje para el desarrollo de habilidades emocionales que permitan a los estudiantes crear y comprender con sus pares, una forma apropiada de valorar, expresar, percibir y sentir las exigencias de su entorno y la salida pacífica de situaciones presentadas en su contexto escolar y fuera de él.

Categoría 3. Factores de la convivencia escolar

Con relación a la Fase II, Trabajo de campo, a continuación se presenta los hallazgos encontrados en la matriz de entrevista semiestructurada y una lista de cotejo, como observación a los estudiantes seleccionados, como primera parte del análisis para esta fase; en seguida se describe la implementación de una estrategia pedagógica o sesión de aprendizaje, que se llevó a cabo con el fin de realizar el abordaje al objetivo 3 de la investigación, referido a reforzar los factores de la convivencia escolar presentes en los estudiantes de cuarto grado.

Al respecto, cabe destacar la Estrategia 2 ‘Me cuentas, te cuento’, realizada de forma virtual a través de teléfonos, con la creación de un grupo de WhatsApp entre las docentes y estudiantes, utilizando además la plataforma virtual Meet para clases en línea. Sin embargo, la estrategia 3 ‘Role Playing’ se efectuó presencialmente, con el consentimiento de sus padres. A continuación, se expone los resultados de la entrevista según este objetivo y la implementación de cada estrategia pedagógica.

Fase II Trabajo de Campo, Primera parte

Entrevista semiestructurada a los estudiantes

Institución Educativa: ‘El Carmelo’

Número de encuestados: diez estudiantes

Acción positiva: vinculada con las reacciones mostradas por los estudiantes frente a los factores de convivencia escolar que demuestran autoconocimiento, autoestima, autorregulación, habilidades comunicativas y habilidades sociales.

Acción negativa: están referidas a las reacciones mostradas por los estudiantes frente a los factores de convivencia que no demuestran autoconocimiento, autoestima, autorregulación, habilidades comunicativas y habilidades sociales.

Acción indiferente: hacen parte de las reacciones mostradas por los estudiantes, que demuestran indiferencia o desinterés frente a los factores de convivencia.

Género: Masculino – Femenino

Se observa en el registro de los datos obtenidos que, las acciones positivas son más frecuentes o significativas que las negativas e indiferentes; es decir, los estudiantes manifestaron emociones ante los planteamientos, evidenciando habilidades sociales que, según Goleman (2013), les permiten tener dominio sobre sus sentimientos y pensamientos en las relaciones con otros; así mismo, con relación a su autoestima, es la apreciación que cada individuo tiene sobre sí mismo, y se muestra a través del afecto que se le entrega al otro en momentos de convivencia.

También, en las respuestas sobre cómo se sienten al pelear con un compañero o, si alguno hace algo mal, ellos manifiestan sentirse tristes; contactan sus emociones y van desarrollando la capacidad de autorrealización y habilidades comunicativas que les permiten expresar sus emociones; como refiere Goleman (2013), cada participante del proceso pueda expresar lo que siente y lo que quiere, desde un mensaje claro y sencillo, adecuado a su nivel de desarrollo, en sus espacios de aprendizaje.

Aunado a lo anterior, se realizó el análisis de la lista de cotejo como observación a los estudiantes, correspondiente al objetivo específico 3, Describir los factores presentes en la convivencia escolar de los estudiantes de cuarto grado.

Con base en la información obtenida se realiza el análisis, revisando referentes teóricos sobre los factores presentes en la convivencia escolar, entre los que se destaca las habilidades sociales. Según Goleman (s.f.), toda persona posee facultades propias que le permiten tener dominio sobre sus sentimientos y pensamientos; en este sentido coinciden con el autor, al mencionar que sí dan muestras de tener o desarrollar habilidades como el respeto, amabilidad, seguridad en el trato con los otros, aceptando y respetando límites en las actividades cotidianas en el aula. En cuanto a la Autoestima, entendida como la apreciación que cada ser humano tiene sobre sí mismo, y que se muestra a través del afecto que se le brinda a otro en momentos de convivencia, en sus conceptos sobre sí mismos, en su mayoría evidencian, precisamente, una autoestima positiva.

Autorrealización: entendida como la capacidad que tienen los individuos para alcanzar sus metas; en el caso de la IE como estrategia pedagógica en la convivencia escolar, para reforzar este factor interno manifestaron responsabilidad en función de las tareas escolares y en el manejo de su realidad con otros estudiantes, de manera que lograban cumplir significativamente lo aprendido, para llegar a otros escenarios. Aunado a esto, se destaca las habilidades de comunicación, referidas al aprendizaje de competencias conversacionales que conllevaron un diálogo generativo, donde los estudiantes manifestaron lo que sentían y lo que querían, desde un mensaje claro y sencillo, adecuado a su nivel de desarrollo.

Los factores externos en la convivencia escolar refieren los elementos del entorno que afectan positiva o negativamente las relaciones en un ambiente de aprendizaje, representando oportunidades y amenazas presentes en la realidad institucional, aspectos que tienen que ver con las relaciones de poder en el aula, cumplimiento de reglas y normas que corresponden al sistema disciplinar.

Acosta et al., (2008) se refieren al conjunto de normas y acuerdos que lleva cada institución educativa; su relevancia subyace en promover el desarrollo de la responsabilidad individual y la autorregulación emocional necesarias para modificar de fondo la conducta de los estudiantes. En esta lista de cotejo, las afirmaciones representan que los estudiantes respetan y obedecen el sistema disciplinar y que sostienen conductas aceptadas socialmente en sus relaciones.

Fase II: Trabajo de Campo - Segunda parte

Implementación de las estrategias pedagógicas

Bajo este escenario, las estrategias pedagógicas de IE establecen conexiones con el conocimiento y la emoción, permitiendo la adaptación y la resolución de conflictos en la rutina de la convivencia en el espacio escolar, bien sea presencial o virtual, a través de la gestión de habilidades mentales e información significativa que proporcionan los estados emocionales y que los estudiantes, con la orientación de sus docentes, pueden aprender para autorregular su comportamiento.

De acuerdo con Calvo (2001), los estudiantes que participan en programas educativos orientados al fortalecimiento de destrezas socioemocionales, muestran una disminución en la ansiedad y agresividad en su entorno, resolviendo de mejor manera los problemas presentados; por ello, plantea la utilización de estrategias de IE con base en el análisis de situaciones emocionales, escritura emocional, juego de roles y visualización positiva, con el propósito de reconocer las emociones en sí mismos y en los demás mediante estos recursos, para establecer lazos de amistad y confianza en los grupos e interacciones libres, que propicien encuentros que fomenten el crecimiento personal, “moderando las emociones negativas e intensificando las positivas” (Fernández-Berrocal y Extremera, 2005, p. 71), “sin restringir o desorbitar la información que transmiten” (Aguaded y Valencia, 2017, p. 177) para el entendimiento y la comprensión de los procesos educativos.

A continuación, se presenta la realización de cada estrategia pedagógica, todas ellas registradas en el diario de campo de las docentes que, haciendo la salvedad, fueron implementadas por las dos docentes y diez estudiantes seleccionados de 9 a. m. hasta las 12 del mediodía, registros con los cuales se procedió al análisis y las respectivas evidencias como hallazgos encontrados en este trabajo de investigación.

Se realizó un encuentro a través de la plataforma Google Meet; se les explicó a los niños el objetivo de la actividad, con la cual reforzarían los factores de convivencia escolar que mejoran las relaciones interpersonales entre pares, docentes-estudiantes y, relaciones familiares. Se les pidió hacer una narración a través de coplas, cuentos, escritos, versos y poesías, resaltando sus habilidades sociales dentro del contexto familiar y escolar en tiempos de pandemia, permitiéndoles apropiarse de los factores que inciden en la convivencia, para ser aplicados en su cotidianidad. Este ejercicio pedagógico permitió aflorar en ellos sus habilidades y destrezas comunicativas que, al ser articuladas con sus emociones, generaron un aporte valioso en la convivencia escolar.

Observaciones. En el desarrollo de la actividad se pudo percibir, a través de las composiciones de los estudiantes, las emociones que han sentido en este tiempo de pandemia. A continuación, se hace una descripción de ellas:

•Sujeto 1. El estudiante expresa a través del cuento, cómo se ha sentido en este tiempo, resaltando la cercanía a sus padres y el compartir juegos de mesas.

•Sujeto 2. El estudiante dedica un cuento a su familia, destacando su unión y el acompañamiento de sus padres.

•Sujeto 3. El estudiante deleita al auditorio, con la interpretación de unas coplas sentidas sobre sus vivencias en este tiempo.

•Sujeto 4. El estudiante expresa, a través de una narración que, en muchas ocasiones no entiende las clases, pero que su profesora le dedica tiempo para explicarle; comenta que quiere volver al colegio.

• Sujeto 5. La estudiante se dirige dando un mensaje positivo a sus compañeros, diciéndoles que pronto se volverán a encontrar.

• Sujeto 6. La estudiante utiliza las coplas para expresarse, mostrando su habilidad para el canto, expresando sus sentimientos y emociones en este tiempo de trabajo en casa.

• Sujeto 7. El estudiante cuenta que este tiempo ha sido difícil, pero demuestra que la familia es especial y que pronto estaremos juntos, siendo él, el protagonista de su historia.

• Sujeto 8. La estudiante, mediante un cuento, describe la historia de una niña preocupada y triste por no encontrarse con sus compañeros y que, poco a poco, fue comprendiendo que todo era para poderse cuidar de un virus que atacaba a todos.

• Sujeto 9. La estudiante expresa con un cuento, la oportunidad de compartir con su familia y la nostalgia de no poder estar con sus compañeros.

• Sujeto 10. La estudiante evidenció mucha alegría al realizar y compartir con sus compañeros, que se reflejaba en sus gestos y en sus expresiones; agradeció la oportunidad de encontrarse con sus compañeros y docentes.

Antes de comenzar la actividad, se les explicó de qué se trataba; luego se los invitó a ubicarse y sentarse en círculo, considerando el lugar escogido previamente; se le entregó los materiales de trabajo como: papel bond, cartulinas, papeles de colores, tijeras, pegamento, cinta pegante, dándoles las pautas para comenzar. Se les dio un tiempo para que pudieran crear un súper héroe, reflejando los valores, las habilidades y competencias que ellos tienen, para mejorar la convivencia escolar y, en este momento, la convivencia familiar, utilizando la visualización positiva para que comprendieran las situaciones de su contexto.

Cada uno debía presentarse en plenaria, explicando lo que quiso expresar en su representación, con dibujos, complementándolos con palabras a través de canciones, poemas, coplas; luego continuaba su compañero o compañera del lado derecho y así sucesivamente. Se les dio total libertad del espacio para realizar su héroe. Al final, todos aplaudieron por la participación de sus compañeros, reforzando su representación.

Observaciones. Durante el desarrollo de la actividad pudimos observar conductas que nos sorprendieron, ya que los estudiantes expresaban con mucha espontaneidad su rol como facilitadores de una mejor convivencia escolar y, a su vez, la articulaban con su contexto familiar. Se muestra a continuación la manera cómo se mostraban durante la experiencia:

• Sujeto 1. Reflejó, a través de la expresión en sus gestos, el disfrute de su representación.

• Sujeto 2. A través de la imagen representada demostró sus habilidades creativas y, al mismo tiempo, el deseo de ver dentro de su contexto escolar una sana convivencia, siendo un participante activo.

• Sujeto 3. El estudiante mostró, a través de un corazón gigante, su sensibilidad para sus compañeros y la importancia que esta representa para la convivencia.

• Sujeto 4. Evidenció una actitud pasiva al momento de realizar la actividad, manteniéndose aislado de sus compañeros.

• Sujeto 5. Sobresalió en su participación porque, a través de su voz, captó la atención del grupo en su intervención.

• Sujeto 6. Proyectó seguridad, entonando la canción de manera majestuosa, mostrando sus emociones a flor de piel.

• Sujeto 7. Reflejó interés y gusto al realizar su representación; se tomó un tiempo más para realizar la actividad, mostrando cambios de ánimo con los gestos de su rostro. En el momento de la plenaria fue elocuente en su presentación.

• Sujeto 8. Mostró ansiedad y se le dificultó expresarse; los compañeros le dieron ánimo diciéndole: “Sí puedes hacerlo”. Algunas veces subió y bajó el volumen de su voz.

• Sujeto 9. Su tono de voz fue bajo, pausado y tímido. Mostró pena al compartir el trabajo con sus compañeros.

• Sujeto 10. La estudiante evidenció mucha alegría al realizar y compartir con sus compañeros, que se reflejaba en sus gestos y en sus expresiones; agradeció la oportunidad de encontrarse con sus compañeros y docentes.

4. Discusión de los resultados

Análisis de situaciones emocionales mediante la promoción de estrategias de IE en la convivencia escolar en los estudiantes de cuarto grado de la IE ‘El Carmelo’, en el municipio de San Juan del Cesar, departamento de La Guajira.

Como estrategia, está dirigida a verificar los comportamientos de los estudiantes en su desarrollo educativo de formación, considerando que pueden adquirir con mayor facilidad diferentes conceptos que influyan positivamente en el desarrollo de su personalidad. A través de su aplicación se previene problemáticas básicas en la etapa más esencial del ciclo vital (Calvo, 2001).

Escritura emocional, también llamada expresiva: es una estrategia que consiste en redactar situaciones reales o ficticias que permiten ventilar lo que sucede dentro del estudiante, pues este puede plasmar sus sentimientos y emociones abiertamente, sin ser juzgado por su interpretación, descubriendo aspectos beneficiosos de su personalidad, para afianzar su convivencia y relaciones. También se refiere a la manera de crear hábitos para soltar los pensamientos que lo detienen y no le permiten avanzar (Goleman, s.f.). La lectura y la escritura emocional, para Sánchez (2005), significa fluir (estado denominado flujo), donde el estudiante tiene la oportunidad de abstraerse en su mundo y centrar su atención en lo que está haciendo.

Todos estos referentes de autores como Sánchez (2005), Calvo (2001) y Goleman (s.f.) estuvieron presentes en el desarrollo de las estrategias pedagógicas implementadas con los estudiantes para describir los factores presentes en la convivencia escolar, teniendo claro el análisis de situaciones emocionales que permitieron a las docentes investigadoras realizar sus interpretaciones sobre los datos, con el fin de extraer un significado relevante con relación al problema y los objetivos de investigación.

En función de dar respuesta al objetivo 4 de la investigación, que consistió en promover estrategias de IE en la convivencia escolar en los estudiantes de cuarto grado, se llevó a cabo la Fase III, titulada Analítica o de Interpretación. A continuación, se presenta una gráfica que comprende las categorías con sus respectivas unidades de análisis, sus referentes teóricos, aprendizajes significativos o descriptores de sus actuaciones y la interpretación, de acuerdo con los datos obtenidos en las observaciones, entrevistas, implementación de las estrategias pedagógicas y los diarios de campo llevados por las docentes investigadoras (GurdiánFernández, 2007).

Triangulación: Categoría ‘Inteligencia emocional en la convivencia escolar’

A través del análisis se pudo llevar a cabo la triangulación de datos en la que las investigadoras presentaron aquellos más significativos, arrojados en la implementación de las estrategias. A partir de estas reflexiones, a continuación, se presenta un modelo como resultado de estos hallazgos, para promover la IE en la convivencia escolar, que constituye una herramienta pedagógica, ya que todo docente puede estar alerta a las emociones que demuestran sus alumnos y las propias, con el fin de potenciarlas de la mejor manera en cada clase; lo importante es contar con un espacio físico o virtual donde se muestre las evidencias del trabajo personal alcanzado y que, en todo momento, los estudiantes puedan darse cuenta o reconocer las distintas emociones, aprender de ellas y canalizarlas en su interacción social (Ver Figura 6).

Idea Generadora. La idea de implantar de forma planificada un modelo de inteligencia emocional en las IE, surge de los resultados de esta investigación, luego de reconocer los pocos trabajos en esta área en los proyectos pedagógicos elaborados por los docentes y gerentes educativos, encaminados a fortalecer la inteligencia emocional en la convivencia escolar.

Referente teórico central. Acosta (2008) expresa que, existe “la creencia de que la educación emocional, el fomento de la inteligencia emocional, puede ser una valiosa ayuda para encarar con mayores posibilidades de éxito los retos a que se enfrenta el sistema educativo” (p. 13).

Propósito. Educar emocionalmente supone corroborar las emociones, empatizar con los demás, reconocer y mencionar las emociones que se está sintiendo, establecer límites, ofrecer modelos adecuados de expresión y de socialización, amarse y aceptarse a uno mismo, respetar a los demás y sugerir estrategias para solucionar los problemas a los que los educandos se exponen diariamente, dentro y fuera de su entorno educativo.

Ruta pedagógica. En un espacio destinado para expresar las emociones entre todos los estudiantes y su docente, construir los siguientes pasos:

Nombre al espacio virtual o presencial destinado para expresar sus emociones

Elaboración de un mural de las emociones. El cual será usado para regular el enfado, la rabia o la tristeza a través de los dibujos que realizarán sobre dicho mural, para solucionar los problemas de forma pacífica respecto a su estado personal y el de los otros, si fuera el caso.

Presentación de evidencias o fotografías. Creación de un grupo de WhatsApp para compartir todas las actividades, conversaciones o, lo que quieran.

Emociones y creatividad. En esta sesión o paso de la ruta, tanto los docentes como los estudiantes, padres, adultos de la familia que gusten participar, pueden exponer poesías, canciones, dibujos, mapas mentales, viajes, visitas a los abuelos, festivales o fiestas y otros contenidos relacionados con las emociones y la convivencia escolar.

Cierre cognitivo y afectivo en cada ruta de aprendizaje. En esta sesión los participantes exponen qué aprendieron, cómo se sintieron en las actividades expuestas en su página o chat, y qué les gustaría realizar con sus compañeros, como Aventuras de Aprendizajes en el descubrimiento y manejo de las emociones.

5. Conclusiones

En la etapa final de esta investigación se presenta las conclusiones y recomendaciones a las cuales se llegó, correspondiente con la Fase IV del diseño metodológico en la cual se pudo analizar la inteligencia emocional en el marco de la convivencia escolar; es importante destacar que todo el trabajo fue interesante y enriquecedor por el manejo de contenidos que, esencialmente, se refieren a la capacidad de percibir, expresar, comprender y gestionar las emociones en los estudiantes de cuarto grado de la IE ‘El Carmelo’.

Respecto al objetivo 1, de donde se desprende la interrogante de: ¿cuáles son los tipos de IE presentes en la convivencia escolar de los estudiantes de cuarto grado?, se pudo evidenciar, a través de las actividades realizadas que, tanto la inteligencia interpersonal como la intrapersonal están presentes en su convivencia escolar; sin embargo, el problema que se inclinó sobre la primera, es cuando los estudiantes carecen de capacidad para regular su estado de ánimo, pues cuando están en presencia de situaciones que les molestan, reaccionan con hostilidad, haciéndose necesaria la presencia del maestro, para que puedan reconocer su estado de ánimo, las consecuencias que trae ese comportamiento y así, poder modificar su conducta, haciéndose responsables de lo que sucedió.

Siguiendo con el desarrollo de la investigación, en cuanto al segundo objetivo que buscó responder a cómo son establecidos los componentes de la IE en la convivencia escolar de los estudiantes de cuarto grado, se pudo concluir, a través de las actividades realizadas, que en el componente de percepción de las emociones, estos reconocieron sus emociones y las de sus compañeros; luego, con el apoyo del maestro, en función de mejorar la convivencia, se valoró la participación de cada uno, propiciando una comunicación con sentido emocional, generando en ellos conductas de cambio frente a situaciones presentadas en su contexto escolar, estimulando el pensamiento creativo, actuando de forma positiva ante situaciones de conflicto y permitiendo la facilitación emocional. En este sentido, se pudo trabajar para que los estudiantes mejoraran la relación con sus compañeros, al brindarles la oportunidad de expresar sus emociones de frustración frente a sus pares, dándole nombre a cada una de ellas: rabia, tristeza, alegría, lo que evidenció la comprensión emocional, identificando que cuando tienen conductas de respeto, las situaciones cotidianas tienden a modificarse; así, comenzaron a darse cuenta de los cambios en sus estados de ánimo. En cuanto a la regulación emocional, comprendieron que cuando estaban contentos y tranquilos, se sentía un ambiente armónico en el encuentro, evidenciando que cuando se establece escenarios agradables, se genera espacios positivos para la formación integral.

6. Recomendaciones

Después de realizar toda la investigación, las autoras se permiten expresar sus recomendaciones, para darle seguimiento y efectividad a este estudio, destacando la importancia de la educación emocional que comienza con los padres, en sus hogares, y se afirma o refuerza en las instituciones educativas y la comunidad. Bajo este entendimiento, se les habló de tomar parte activa en la formación de emociones positivas como la alegría, sorpresa, confianza, tan necesarias para el desarrollo biopsicosocial de los estudiantes y se les enseñó a manejar las emociones negativas desde el amor, para evitar el miedo, la ira, el enojo, la tristeza, que conllevan estados depresivos, de frustración o de estrés, aun en los más pequeños, por ambientes tóxicos.

Por tanto, hay mucho por hacer en este camino de descubrir las emociones y llevar a los estudiantes a una realización personal exitosa y socialmente aceptada. Se propone un modelo proactivo para la educación emocional en las aulas de aprendizaje, donde el centro sean las emociones y los estudiantes puedan tener un dominio personal y una madurez adecuada en su proceso de crecimiento.

Aunado a lo anterior, se recomienda a los investigadores en esta área del conocimiento, a profundizar en nuevos proyectos donde el interés sea la inteligencia emocional, ya que hoy en día, con el uso de la tecnologías de la información y la comunicación, es imprescindible el manejo de las emociones en cuanto a la cantidad de informaciones no siempre constructivas y que a través de las redes sociales les llegan a los estudiantes, docentes y familias, las cuales tiene que luchar con emoticones, signos, símbolos y demás códigos visuales que afectan los conceptos, juicios e interpretaciones de contenidos o mensajes muchas veces agresivos, con la real tarea de dañar.

7. Conflicto de intereses

Los autores de este artículo declaran no tener ningún tipo de conflicto de intereses del trabajo presentado.

Referencias

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