Resumen: La mayoría de las madres pueden y deberían amamantar a sus hijos, la implementación de una lactancia materna adecuada podría prevenir la muerte de 820 000 menores de 5 años en todo el mundo (Organización Mundial de la Salud [OMS], 2018). En Nicaragua se ha abordado muy poco esta temática a pesar de su relevancia en la salud infantil por tanto el presente estudio tuvo como objetivo determinar las limitaciones para la implementación de la lactancia materna exclusiva y su efecto en el estado nutricional de los niños menores de 1 año atendidos en la consulta externa de pediatría del Hospital Alemán Nicaragüense en el mes de mayo de 2019. Se realizó un estudio descriptivo de corte transversal, la muestra fueron 120 madres y niños menores de 1 año, la cual se obtuvo mediante un muestreo por conveniencia utilizando como instrumento una encuesta y ficha de recolección de información, obteniendo los siguientes resultados: el 35.8% de las madres encuestadas tenía entre 16 a 20 años de las cuales el 18.3% brindó lactancia materna, el 65.8% refirió estar en unión libre y tener escolaridad secundaria, ser amas de casa que provenían de la ciudad de Managua y reportaron 1 parto previo además de depresión postparto. Al interrogar a las pacientes sobre cómo consideraban la lactancia materna el 4.2% considera que es una práctica indecente por lo que no brinda lactancia materna, El 59.25% mencionó falta de apoyo familiar y el 40.8%de las mujeres encuestadas tuvieron un conocimiento regular sobre la lactancia materna. El 66.7% refirió haber recibido consejería sobre lactancia y no reportaron enfermedades de la mama, infecciones o enfermedades graves, ni uso de drogas ni fármacos que dificultaran la lactancia, el 45.8 % no reportó factores del niño que impidieran la lactancia, el 35.8% de los niños tenía subnutrición grave y el 36.7% tenían entre 1 a 3 meses de edad. Concluimos que el principal factor psicosocial que influye en la negación de la lactancia materna es la falta de apoyo familiar y no la edad de la madre, la negación de lactancia materna repercute en el estado nutricional del niño por lo que recomendamos el fortalecimiento sobre la concientización de sus beneficios.
Palabras clave: Lactancia materna exclusiva, nutrición y lactancia, factores psicosociales que impiden la lactancia materna.
Abstract: Most mothers can and should breastfeed their children; the implementation of adequate breastfeeding could prevent the death of 820,000 children under 5 years worldwide. (WHO,2018). In Nicaragua, this issue has been addressed poorly in spite of its relevance in children's health, therefore the present study aimed to determine the limitations for the implementation of exclusive breastfeeding and its effect on the nutritional status of children under 1 year attended in the external pediatric office of the German Hospital Alemán Nicaragüense in May 2019. A descriptive cross-sectional study was conducted, the sample was 120 Mothers and children under 1 year old, which was obtained by convenience sampling using as a tool a survey and information collection sheet, obtaining the following results: 35.8% of the mothers surveyed were between 16 and 20 years of which 18.3% provided breastfeeding, 65.8% reported being in free union, and have secondary schooling, housewives who came from the city of Managua and reported 1 previous delivery, and postpartum depression. When questioning patients about how they considered breastfeeding 4.2% consider it an indecent practice and that is why they do not breastfeed, 59.25% mentioned lacks of family support and 40.8% of the women surveyed had regular knowledge about breastfeeding, 66.7% reported having received breastfeeding counseling, reported no breast diseases, infections or serious illnesses, no use of drugs and drugs that hinder breastfeeding, 45.8% did not report factors of the child that prevented breastfeeding, 35.8% of children had severe undernutrition and 36.7% were between 1 and 3 months old. We conclude that the main psychosocial factor that influences the denial of breastfeeding is the lack of family support and not the age of the mother, the denial of breastfeeding affects the nutritional status of the child so we recommend strengthening on awareness of its benefits.
Keywords: Exclusive breastfeeding, nutrition and breastfeeding, psychosocial factors that prevent breastfeeding.
Salud y Servicios sociales
Limitaciones para la implementación de la lactancia materna exclusiva y su efecto en el estado nutricional de los niños menores de 1 año
Limitations for the implementation of exclusive breastfeeding and its effect on the nutritional state of children under 1 year
Recepción: 25 Febrero 2020
Aprobación: 13 Julio 2020
La leche materna es el mejor alimento para el recién nacido, tomando en cuenta la calidad, consistencia, temperatura y equilibrio de sus nutrientes. A pesar de que es considerada como un proceso fundamental para la salud y desarrollo de los niños, no se ha logrado mantener por los períodos recomendados mundialmente por la Federación de las Naciones Unidas para la Protección de la Infancia (UNICEF) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo cual constituye un problema de salud ya que el abandono de la lactancia materna es un factor de riesgo para el aumento de la frecuencia de enfermedades durante el primer año de vida. La implementación de una lactancia materna adecuada podría prevenir la muerte de 820 000 menores de 5 años en todo el mundo (OMS, 2018). La mayoría de las madres pueden y deberían amamantar a sus hijos, y sólo en circunstancias excepcionales debe descartarse como primera opción de alimentación para el recién nacido. Sin embargo, se ha observado que un gran número de madres no brindan esta alimentación aduciendo múltiples factores, entre ellos destacan: la falta de conocimiento sobre la importancia de la lactancia materna, los mitos, la preocupación por la estética femenina, actitudes desfavorables hacia la lactancia materna por parte de la mujer o su entorno familiar y factores psicológicos como la depresión posparto.
Determinar las limitaciones para la implementación de la lactancia materna exclusiva y su efecto en el estado nutricional de los niños menores de 1 año atendidos en la consulta externa de pediatría del Hospital Alemán Nicaragüense en el mes de mayo de 2019.
El universo estuvo constituido por 120 madres y niños menores de 1 año. La muestra fue el total del universo, Se utilizó una ficha de recolección de datos y una encuesta la cual fue validada mediante una prueba piloto en la cual se revisaron 10 expedientes clínicos y se entrevistaron 10 usuarias, las unidades de análisis utilizadas en el proceso de validación del instrumento no fueron incluidas en esta investigación.
Las variables sometidas a estudio fueron: edad materna, edad del niño, estado civil, escolaridad, ocupación, procedencia, paridad, lactancia materna exclusiva; condiciones médicas y biológicas, y el estado nutricional del niño. Para el procesamiento estadístico de estas variables se utilizó el programa informático IBM-SPSS® (Statistical Package for the Social Sciences) versión 22.0 para Windows 7 de 32 bits, se utilizó el paquete de software Microsoft 365 Office® 2010: Microsoft Word® para la depuración de cualquier error de redacción o digitación facilitando de este modo el análisis y reproducción de los resultados y Microsoft Excel® para editar los gráficos y las tablas que expresan en frecuencia y porcentajes los resultados obtenidos, con el objetivo de hacer más comprensible la información obtenida.
El 35.8% (n=43) de las madres encuestadas tenía entre 16 a 20 años de edad, de los cuales el 18.2% (n=22) dio lactancia materna a su hijo y un 17.5% (n=21) no dio lactancia materna exclusiva.
Con respecto al estado civil, el 65.8% (n=79) refirió estar acompañada (unión libre), el 18.3% (n=22) eran casadas y el 15.8% (n=19) solteras. El 61.7% (n=74) tenían escolaridad secundaria, el 20% (n=24) había cursado estudios de primaria, el 12.5% (n=15) eran universitarias, el 87.5% (105) de las encuestadas provenían de la capital del país (Managua), el 84.2% (n=101) de las mujeres eran amas de casa de las cuales el 44.2% (n=53) no brindaron lactancia materna exclusiva y el 40% (n=48) si reportaron esta práctica y el 45.8% ( n=55) de la mujeres reportaron 1 parto previo. En el caso de las mujeres que reportaron 1 parto previo el 23.3% (n=28) no brindaron lactancia materna exclusiva mientras que el 22.5% (n=27) sí ofrecieron este tipo de lactancia a sus hijos.
El principal factor psicosocial referido por la población encuestada en el 59.25% (n=71) fue la falta de apoyo familiar lo cual supuso que el 31.7% (n=38) negó la lactancia materna exclusiva a su hijo, pero un 27.5 (n=33) sí dio lactancia materna a su hijo. En el 94.2% (n=113) se evidenció que la población encuestada no tuvo una mala actitud hacia la práctica de lactancia materna, sin embargo de estas pacientes que refirieron no tener una mala actitud hubo un el 47.5% (n=57) no dio lactancia materna.
El 40.8% (n=49) de las mujeres encuestadas tienen un conocimiento regular sobre la lactancia materna, de estas pacientes el 20.8% (n=25) no brindó lactancia materna. El 66.7% (n=80) refirió que si había recibido consejería sobre lactancia materna; de estas mujeres encuestadas un 35% (n=42) no se negó a practicar lactancia, cabe mencionar que un 18.3% (n=22) no contaron con esta asesoría y se negaron a practicar la lactancia materna exclusiva.
El principal factor biológico referido por las pacientes en un 49.2% ( n=59) fue dolor mamario excesivo lo cual supuso el 25.8% (n=31) de las pacientes que no dieron lactancia materna. El 85% (n=102) de las mujeres no presentaron enfermedad grave. El 96.7% (n=116) no reportó uso de drogas. El 89.2% (n=107) no refirió uso de fármacos contraindicados para la lactancia materna. El 45.8% (n=55) no reportó factores del niño que impidieran la lactancia materna exclusiva, En relación al estado nutricional de los niños, se encontró que el 35.8% (n=43) de estos tenía subnutrición grave de los cuales el 28.8% (n=25) tenían entre 1 a 3 meses de edad.
Se encuestaron 120 mujeres con el objetivo de conocer las limitaciones que se presentan para la implementación de la lactancia materna exclusiva y su efecto en el estado nutricional de los niños menores de 1 año. Las mujeres encuestadas eran jóvenes, se encontraban principalmente entre los 16 a 20 años, estos datos son similares a lo reportado por López, Martínez y Zapata (2013) y Martínez (2015) quienes reportaron edades entre los 15 y 30 años, lo anterior sugiere la hipótesis que las mujeres jóvenes presentan mayor incidencia en la negación de dar lactancia materna.
El 53.3% de las mujeres estudiadas no brindaron lactancia materna exclusiva, esto difiere de lo reportado por Ubillús et al. (2007) y Rondán (2015) donde la mayoría de la población había brindado lactancia materna exclusiva. Se conoce que las mujeres menores de 25 años tienden a presentar mayores dificultades para brindar lactancia materna debido a la falta de experiencia o prejuicios que persisten en la población joven, no obstante, en este estudio se observó que el 33.3% de las mujeres en estas edades brindaron lactancia materna y un 31.6% no lo realizaron, siendo muy poca la diferencia entre ambos grupos, por lo cual, se considera que la edad no fue el principal motivo para negar la lactancia materna.
En relación al estado civil, la mayoría de las pacientes convivían con sus parejas ya sea en unión de hecho estable o casada y provenían de áreas urbanas (Managua) al igual que en el estudio de Martínez (2015). Es importante conocer el estado civil de las pacientes ya que el ser madre soltera es considerado un factor de riesgo para el abandono de la lactancia materna, tal y como lo mencionan Rondán (2015), Cáceres y Canales (2016). La escolaridad secundaria predominó en la población, lo que concuerda con el estudio de López, Martínez y Zapata (2013) mientras que Martínez (2015) y Rondán (2015) reportan que la mayoría de las pacientes incluidas en sus investigaciones tenía un nivel de escolaridad bajo, en base a lo antes mencionado, consideramos que el hecho de tener educación primaria, es decir un grado de escolaridad bajo, puede suponer un factor desfavorable para la implementación de la práctica de la lactancia materna. La ocupación que predominó fue la de ama de casa, lo que coincide con el estudio de Martínez (2015), al analizar esta variable se debe tener en cuenta que las mujeres que trabajan fuera de casa tienen menos oportunidades para amamantar a su hijo, Rodríguez (2014) expresa que algunas amas de casa tampoco logran tener el tiempo suficiente para dar de lactar debido a las diversas labores domésticas que deben realizar. La primiparidad constituye otro obstáculo para la implementación de la lactancia materna exclusiva como se pudo observar en esta investigación y en los estudios de Laghi-Rey et al. (2015) y Rondán (2015), no obstante, en el estudio de López, Martínez y Zapata (2013) las mujeres refirieron tener 2 o más hijos y pese a su nivel de experiencia en comparación con las madres primigestas optaron por no amamantar a su hijos.
Los factores psicosociales que más influyeron en la madre para no brindar lactancia materna exclusiva fueron la falta de apoyo familiar contrario a lo encontrado por Romero, García y Góngora (2014), en el cual el principal motivo para abandonar la lactancia materna fue el temor a que se deformen los senos y con ello la pérdida del atractivo físico para sus parejas, Rondán (2015) coloca en tercer lugar los motivos estéticos. Llama la atención que las mujeres reporten el poco apoyo que reciben por parte de su familia ya que se reconoce que las mujeres que reciben asesoría y cuenta con una red de apoyo en su núcleo familiar practican la lactancia con mayor seguridad y sensación de bienestar según lo expresa Cáceres y Canales (2015), por tanto, es necesario fomentar la lactancia materna desde los hogares y las comunidades, basándose en el Modelo de Salud Familiar y Comunitario (MOSAFC) vigente en nuestro país. Lo anterior concuerda con el nivel de conocimiento regular y deficiente encontrado en la mayoría de las madres; a pesar que un 66.7% refirió que había recibido consejería sobre este tema durante sus visitas al centro de salud, es preocupante que un 18.3% haya expresado que no ha sido asesorada, contrario a lo que establece la normativa sobre lactancia materna y todas las campañas de promoción en salud que se realizan en los medios de comunicación y en las distintas unidades de salud, este dato coincide con el estudio de Martínez (2015) realizado también en Nicaragua, pero difiere del estudio internacional de López, Martínez y Zapata (2013) en el cual el 96% de las pacientes mencionaron haber recibido información sobre lactancia materna. Los profesionales de la salud están obligados a brindar una consejería de calidad, durante el embarazo y después del mismo, donde se le proporcione a la paciente toda la información necesaria para que ella realice la lactancia materna exclusiva de forma voluntaria, correcta y consciente de la importancia que tiene esta práctica para la salud de sus hijos (Ministerio de Salud de Nicaragua [MINSA], 2010). Las características biológicas o médicas que constituyeron una barrera para la lactancia materna fue el dolor mamario excesivo; cabe destacar que en el estudio de Rondán (2015) también prevaleció este factor, Laghi-Rey et al.(2015) reportó que las mujeres aquejaron problemas en los pezones; no obstante, se debe aclarar que el pezón invertido no contraindica la práctica de la lactancia materna, así lo expresa el MINSA (2010) en su normativa sobre lactancia materna, los profesionales encargados de la atención de la embarazada deben aconsejar a la paciente acerca de las medidas que debe tomar cuando se presenta esta condición anatómica, así como brindar otras recomendaciones para disminuir el dolor en las mamas y estimular la producción de leche, ninguna padeció infecciones como hepatitis, VIH o tuberculosis y el 85% tampoco desarrolló una enfermedad grave que le impidiera dar lactancia materna exclusiva al igual que en el estudio de Martínez (2015). El 96.7% de la madre no refirió uso de drogas y el 89.2% no utilizó fármacos contraindicados para la lactancia materna. Entre los factores del niño que dificultaron la implementación de la lactancia materna exclusiva está el nacimiento por vía cesárea, lo que coincide con el estudio de Rondán (2015), la cesárea interfiere con el apego precoz ya que el niño suele ser trasladado al área de neonatología para su atención, por lo que se insta a garantizar el contacto entre madre e hijo lo más pronto posible; el porcentaje de niños con enfermedad grave fue bajo, tanto en el presente estudio como en el de Martínez (2015). Se observó que la mayoría de los niños en estudio tenían algún grado de subnutrición, y esto se presentó con mayor frecuencia en los menores que no recibieron lactancia materna exclusiva y que se encontraban en las edades de 1 a 3 meses. Al respecto Breigeirona et al. (2015) comenta que la lactancia materna exclusiva es un factor protector contra las alteraciones del estado nutricional (desnutrición o sobrepeso) por lo cual favorece el desarrollo psicomotor de los niños y se requiere educar a las madres sobre este beneficio, promoviendo de esta manera la salud y el bienestar de las futuras generaciones.
Las mujeres jóvenes, amas de casa tiene mayor incidencia a negarse a practicar la lactancia materna exclusiva, siendo el factor psicosocial el que más influye en la negación, la falta de apoyo familiar y no la edad de la madre, la falta de consejería y factores biológicos o asociados al niño lo cual repercute en el estado nutricional del niño.
Fomentar la lactancia materna exclusiva desde el entorno comunitario y familiar.
Realizar estudios cualitativos y de acción-participación que profundicen en los factores psicosociales que influyen en la negación de la lactancia materna.
Las autoras declaran que no se realizaron experimentos en humanos o animales para este estudio.
Las autoras declaran que en todo momento se respetó la confidencialidad de la relación médico–paciente registrada en el expediente clínico, ya que en ningún momento durante la recolección de información y divulgación de los resultados se registró el nombre o cualquier información que identifique a estas pacientes.
Las autoras declaran que en este estudio la fuente de información fueron las pacientes que acababan de dar a luz y la información consignada en el expediente clínico, por lo que se solicitó su consentimiento previo, el cual se encuentra en resguardo de las investigadoras.
Las autoras no tienen ningún conflicto de intereses que declarar. Fuente de financiación: ninguna.