RELACIONES INTERNACIONALES

La universidad cubana ante el reto de la transdisciplinariedad: los Estudios Migratorios y las relaciones internacionales

The Cuban University facing the challenge of transdisciplinarity: migratory studies and international relations

Gretel Marrero Peniche.
Instituto Superior de Relaciones Internacionales “Raúl Roa García”, Cuba

Política Internacional

Instituto Superior de Relaciones Internacionales "Raúl Roa García", Cuba

ISSN: 1810-9330

ISSN-e: 2707-7330

Periodicidad: Trimestral

vol. 3, núm. 3, 2021

politicainternacionaldigital@gmail.com

Recepción: 13 Abril 2021

Aprobación: 17 Mayo 2021



Resumen: El papel de la Universidad, como institución, se ha ido modificando según las exigencias propias de cada contexto social. En consecuencia, desde mitad del siglo XX y hasta la actualidad, se ha cuestionado la función del docente en los procesos de enseñanza-aprendizaje, así como la necesidad de lograr la transversalidad de la educación universitaria. El trabajo indaga en los ejes articuladores de los Estudios Migratorios, las relaciones internacionales y la cultura, en tanto son campos del conocimiento que permiten un abordaje transdisciplinar en los procesos de enseñanza-aprendizaje para la formación profesional de estudiantes del nivel superior cubano. De este modo, responde a una investigación en curso que parte de la experiencia profesional de las autoras en la docencia universitaria, haciendo énfasis en la impartición de asignaturas optativas/electivas en la Universidad de La Habana afines a la temática migratoria. Se realizó un profundo trabajo metodológico, tanto en los programas de las asignaturas como en los contenidos y las formas de impartición de las mismas. Se efectuó una investigación bibliográfica que privilegió los documentos básicos del Ministerio de Educación Superior (MES) cubano relacionados con el perfeccionamiento de la llamada Nueva Universidad. Con el propósito de vincular los contenidos de los textos rectores del MES con la experiencia docente individual, se implementó el método inductivo-deductivo. Además, se aplicó la técnica de la entrevista en profundidad a un experto del tema migratorio en Cuba.

Palabras clave: cultura, enfoque transdisciplinar, Estudios Migratorios, formación profesional, Nueva Universidad cubana, relaciones internacionales.

Abstract: The role of the University, as an institution, has been modified according to the requirements of each social context. Consequently, since the middle of the 20th century and up to the present time, the role of the teacher in the teaching-learning processes has been questioned, as well as the need to achieve the Interdisciplinary methods of university education. The paper research the articulating axes of Migratory Studies, international relations and culture, as they are fields of knowledge that allow a transdisciplinary approach in the teaching-learning processes for the professional training of Cuban higher education students. In this way, it responds to an ongoing investigation that starts from the authors' professional experience in university teaching, emphasizing the teaching of elective / elective subjects at the University of Havana related to migration issues. A deep methodological work was carried out, both in the subject programs and in the contents and forms of teaching them. A bibliographic research was carried out that privileged the basic documents of the Cuban Ministry of Higher Education (MES) related to the improvement of the so-called New University. In order to link the contents of the guiding texts of the MES with the individual teaching experience, the inductive-deductive method was implemented. In addition, the in-depth interview technique was applied to an expert on migration in Cuba.

Keywords: culture, transdisciplinary approach, migratory studies, professional training, New Cuban University, international relations.

INTRODUCCIÓN

La enseñanza superior cubana ha realizado un llamado a la transdisciplinariedad en la impartición de los contenidos de cada asignatura. Los recientes documentos programáticos del Ministerio de Educación Superior (MES) (2017), concretados en el Plan de Estudios E, hacen énfasis en la formación integral del estudiante como concepto guía para la actualización de los programas curriculares, que logran su concreción en las prácticas docente-educativas. Puede considerarse que todas las materias son susceptibles al empleo del enfoque transdisciplinar, no obstante, la enseñanza de la temática migratoria en Cuba se constituye como un espacio ideal para desarrollarlo. Resulta impensable hablar de desplazamientos internacionales sin considerar su relación con la cultura, la política, las relaciones internacionales, entre tantas aristas posibles de estudio.

Los procesos migratorios representan un eje de análisis obligatorio en el escenario internacional. Los movimientos de población se han visto asociados a un cambio global, provocando una serie de transformaciones, tanto en las sociedades donde se originan las migraciones como en las de destino. Durante el siglo XX se produjo un aumento de los movimientos internacionales de población, abarcando todas las regiones geográficas. Como consecuencia, algunos países comenzaron a intensificar las políticas selectivas para restringir la entrada de migrantes a sus territorios, situación que se acrecienta en la década del ’90 a partir del incremento de problemas asociados al narcotráfico, el terrorismo internacional y el tráfico ilegal de personas. Todos estos elementos pueden manifestarse en el orden económico, pero también en las relaciones internacionales; además, el incremento en los movimientos migratorios conduce a una mayor diversidad étnica y cultural.

El ciudadano del siglo XXI tiene ante sí grandes retos de diverso tipo, pero también oportunidades que no eran posibles en épocas anteriores. La globalización, tan criticada, y con razón, ha supuesto un cambio de paradigma en la vida de los seres humanos, que han visto acortarse distancias, y a la vez, hacerlas imposibles de alcanzar. Las relaciones internacionales entre países o bloques políticos/económicos/militares son fundamentales para el desarrollo y la paz de las regiones. En este sentido, los flujos migratorios constituyen uno de los puntos más controvertidos en estos procesos, que muchas veces se presentan asimétricos y desleales.

La Universidad de La Habana, a través de la bolsa de asignaturas electivas/optativas, y el Instituto Superior de Relaciones Internacionales (ISRI), mediante la presencia de valiosos docentes con una obra investigativa de larga data en el tema migratorio, constituyen dos puntos de referencia para el artículo que se propone. Además, las autoras cuentan con la experiencia docente en las materias optativas/electivas Las migraciones internacionales en América Latina: historia y dinámicas —impartida por Marrero Peniche1 en el periodo 2012-15—, y Audiovisual y Migración —dictada por Martín Pastrana desde 2018 hasta la actualidad—.

En el presente trabajo, que forma parte de una investigación en curso2 sobre los Estudios Migratorios (EM) en la Enseñanza Superior en Cuba, las autoras abordan los ejes articuladores existentes entre estos y las relaciones internacionales, cual dueto que se retroalimenta a partir de una enseñanza transdisciplinar. Se realizó un profundo trabajo metodológico, tanto en la revisión de los programas de las asignaturas optativas/electivas, mencionadas con anterioridad, como en los contenidos y las formas de impartición de las mismas. Se efectuó una revisión bibliográfica, privilegiando los documentos básicos del MES relacionados con el perfeccionamiento de la llamada Nueva Universidad. Con el propósito de vincular los contenidos de los textos rectores del MES con la experiencia docente individual, se implementó el método inductivo-deductivo. Como contraparte, se aplicó una entrevista en profundidad al experto Antonio Aja, director del Centro de Estudios Demográficos (CEDEM), de la Universidad de La Habana.

DESARROLLO

La Nueva Universidad cubana: retos de la formación profesional

La universidad, como institución social, tiene a su cargo los procesos de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes. Las dinámicas globalizantes que han influenciado a la sociedad actual, no han pasado desapercibidas en los centros de altos estudios, quedando estos despojados de su lugar privilegiado como único albacea de los conocimientos (Horruitiner, 2011). No obstante, la universidad continúa representando una “institución creadora de cultura, ciencia y tecnología (…) espacio por excelencia dedicado a la preservación, transmisión y recreación de las tradiciones y conocimientos” (Julca, 2006: 38). Esto significa que la universidad debe formar profesionales lo suficientemente competentes para buscar soluciones a las demandas que impone el proceso de globalización y la revolución científica y tecnológica en la era del conocimiento (García en Julca, 2006).

En este sentido, los procesos de enseñanza-aprendizaje, la concepción del papel del docente, y la didáctica en el sentido más general, han variado paulatinamente, ajustándose a los cambios que ha experimentado la universidad en sus características tradicionales.

Al decir de Rodríguez y Fernández (2007), si el colectivo docente y la dirección institucional no están al tanto de estos cambios y de su incidencia en su espacio de actuación, que halla su expresión más concreta en el salón de clases, no se responde adecuadamente a las demandas actuales que socialmente se han ido imponiendo al sistema universitario. Tales demandas hacen referencia al reto que deben asumir las universidades: cambiar mentalidades —sobreentiéndase, producir una auténtica reconversión de la cultura docente e institucional— (Sola, 2004).

Ante este contexto, la figura del docente se vuelve primordial como impulsor del cambio. Por tanto, su formación y sistemática superación debe realizarse de forma consciente en el nuevo papel que le corresponde. Solo así será capaz de implicar a los estudiantes en las nuevas tareas que deberán realizar y que responden a las características de los estudios universitarios en la actualidad.

A los efectos de este artículo, se asumirá la definición de docente innovador y creativo haciendo énfasis en la capacidad de estimular el aprendizaje del estudiantado en los contenidos básicos de la materia y, a su vez, en la preocupación constante por contribuir a su formación integral. En tal sentido, se entiende que el docente no solo deba estar adecuadamente formado en la materia que imparte, sino dispuesto a auto superarse profesionalmente de modo sistemático. Resulta imprescindible que el profesorado reflexione críticamente sobre su práctica, de modo que sea capaz de mejorarla como un proceso consciente y en constante evolución.

Ahora bien, ¿qué papel le ha asignado nuestra sociedad a la educación?

Como parte del proyecto país que se ha propuesto desarrollar la Revolución Cubana, la educación ha tenido un lugar central. En los documentos programáticos Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución (2011)3 y el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta 2030 (2016)4 se definen políticas que marcan el interés del gobierno por desarrollar dicho sector. Ambos documentos oficiales tienen como objetivo general transformar la gestión de la actividad científica en las entidades subordinadas al MES (2017) como único camino para articular de manera coherente la relación entre la formación profesional y los Organismos de la Administración Central del Estado (OACE) (Mena Lorenzo y Mena Lorenzo, 2020).

Como espaldarazo a estas políticas, el presidente cubano ha declarado públicamente su interés por el sector, y la importancia que le confiere para “transitar desde el país que somos al país que queremos ser” (Díaz-Canel, 2019). En este sentido, el MES se ha planteado una estrategia de perfeccionamiento (Rojas y García, 2018) que incluye el establecimiento de prioridades en las líneas de investigación en las universidades —en consonancia con las políticas de producción y desarrollo trazadas por la dirección del país— que se ejecutan a través de proyectos de investigación científica, tecnológica y de innovación, interdisciplinarios, transdisciplinarios y multidisciplinarios.

La concepción de la universidad en Cuba se basa en tres características esenciales: científica, tecnológica y humanista, por lo que persigue la formación de profesionales a partir de un modelo de perfil amplio, que asegure en el estudiante la capacidad de desempeñarse satisfactoriamente en su vida laboral.

Ahora bien, el estudio de las experiencias nacionales e internacionales en el ámbito universitario, así como las transformaciones del rol social de la universidad, han ido introduciendo nuevas dimensiones en el modelo universitario cubano. En consecuencia, se incorporan las dimensiones instructiva, desarrolladora y educativa con el claro propósito de preparar al profesional, no solo en los aspectos básicos del perfil que estudian, sino en su posterior desempeño como ser social (Horruitiner, 2011).

Puede leerse en la actualidad sobre la Nueva Universidad como concepción matriz de todos los procesos que, en función de su perfeccionamiento, tienen lugar en la universidad cubana. Como todo proceso transformador de mentalidades resulta complejo y abarcador. Al respecto, se identificaron grandes ejes temáticos sobre los cuales trabaja intensamente el MES en Cuba y que aluden a la formación integral del estudiante. Por tal razón, la correcta aplicación del enfoque integral para la labor educativa en las universidades constituye la principal prioridad del trabajo docente (Leyva, 2011).

Las ideas anteriores se concretan en las premisas fundamentales que han regido el Plan de Estudios E de la enseñanza superior. Entre ellas, el continuo incremento de la calidad en el proceso de formación y el concepto de formación integral. Esta última forma parte de las bases conceptuales para el diseño de estos planes, proponiéndose lograr una efectiva flexibilidad curricular, término que remite a la existencia de tres tipos de contenidos: base, propio y optativo/electivo. Estos últimos actúan como complemento para la formación integral del estudiante y responden a sus intereses de desarrollo personal.

Mapa de palabras confeccionado por las autoras.
Fig.1.
Mapa de palabras confeccionado por las autoras.
Elaboración propia

Nos detendremos a examinar el concepto de formación integral, teniendo en cuenta la importancia que le confiere la educación superior cubana, convirtiéndolo en la idea rectora de todo su proceso de actualización.

En síntesis, expresa la pretensión de centrar el quehacer de las universidades en la formación de valores en los profesionales de forma más plena, dotándolos de cualidades de alto significado humano, capaces de comprender la necesidad de poner sus conocimientos al servicio de la sociedad en lugar de utilizarlos sólo para su beneficio personal. Implica también la necesidad de lograr un profesional creativo, independiente, preparado para asumir su autoeducación durante toda la vida; que sea capaz de mantenerse constantemente actualizado. (Horruitiner, 2011: 7)

Además, cuando se hace referencia a la formación integral del estudiante, se sobreentiende que influya en su preparación para trabajar armónica y eficazmente en colectivos multidisciplinarios y, por ende, en la construcción social del conocimiento.

Como resultado de procesos globalizadores, el acceso a la tecnología y la educación se ha masificado; Cuba no es ajena a dichos procesos emancipadores, encontrándose entre los países que tienen más del 50% de la población entre 18 y 24 años cursando la universidad (Horruitiner, 2011). En consonancia con la misión de la educación superior de preservar, desarrollar y promover, a través de sus procesos sustantivos y en estrecho vínculo con la sociedad, la cultura de la humanidad (Horruitiner, 2011), la universidad cubana actual no se estructura únicamente a partir de demandas del mercado del trabajo, sino que incluye, además, en su diseño, materias que permiten una formación integral del estudiante, con competencias profesionales y un amplio desarrollo humanístico. De esta manera, la institución nuclea los aspectos educativos con los de carácter instructivo.

No obstante, las ganancias de la democratización de las tecnologías, las brechas sociales se han acentuado de manera galopante en nuestra región. Al enumerar las peculiaridades latinoamericanas de la sociedad del conocimiento, Martín-Barbero (2002) apunta cómo estas son, al mismo tiempo, “sociedades del desconocimiento”, al no reconocer la pluralidad de saberes y competencias culturales que, siendo compartidas por las mayorías populares, no son incorporadas en sus sistemas educativos. Los tiempos globalizadores que vivimos han puesto en crisis la subordinación de los saberes populares —oralidad, visualidad, costumbres, lenguaje— al orden de la letra escrita. Los saberes impresos en papel ya no son la única vía para acceder y transmitir sabiduría. Las nuevas tecnologías han desplazado viejos modos de consumo del conocimiento, para dar lugar a nuevos modos de producción y circulación de saberes, y nuevas escrituras que emergen a través de las nuevas tecnicidades.

Programa Integración de Tecnologías a la Docencia. Fuente: Marta Zapata. Universidad de Antioquia, 2015.
Fig.2.
Programa Integración de Tecnologías a la Docencia. Fuente: Marta Zapata. Universidad de Antioquia, 2015.
Elaboración propia

La convergencia de la globalización y la revolución tecnológica configuran un nuevo ecosistema de lenguajes y escrituras. La tecnicidad ha transformado los modos de aprender y enseñar, ha cambiado nuestra percepción con relación al espacio y el lugar, y en esas dinámicas de aprendizaje se dan, a la vez, fenómenos de integración/exclusión, de desterritorialización/relocalización, de tal suerte que podría afirmarse que la Humanidad se encuentra inmersa en uno de sus cambios más radicales.

Un elemento esencial que no debe faltar en los análisis que se realicen sobre estos temas consiste en no perder de vista la relación lógica que se establece entre cada uno de los términos presentados con anterioridad. En tanto, formación integral apunta directamente hacia el trabajo docente y, este último, a las estrategias didácticas que demandan los procesos de enseñanza-aprendizaje actualmente.

Por tanto, podría plantearse que todo cambio en la docencia universitaria transita obligatoriamente por las estrategias didácticas del profesorado, lo que ha implicado que en nuestros días se le dedique especial atención al “significado de profesor innovador y creativo, el alcance de una enseñanza creativa, la caracterización de las estrategias didácticas innovadoras y la aplicación en el aula de algunas de ellas” (de la Torre y Violant, s.f.: 1).

Enfoque transdisciplinar en los Estudios Migratorios (EM) en la Universidad de La Habana: puntos articuladores con la cultura y las relaciones internacionales

Los EM no deben asumirse como una teoría monolítica, y mucho menos acabada, sino como un constructo teórico en constante debate por estudiosos del tema y decisores, con puntos de vistas divergentes y otros en común, según sea el caso.

En la Universidad de La Habana, los EM se remontan a periodos anteriores a la Revolución Cubana.5 En la casa de altos estudios más antigua de Cuba existe una tradición de estudios demográficos, antropológicos, sociológicos, económicos, que indagan en la movilidad y sus múltiples consecuencias.

“Antes de 1959 hay un grupo de disciplinas de las Ciencias Sociales y las Humanidades que dedicaron un espacio importante a las migraciones, con estudios sobre la lengua, literatura y cultura cubanas, Cuba y sus provincias, la inmigración antes de la Revolución, los estudios antropológicos sobre las etnias. Sobre la cultura se ha investigado mucho más, porque es una simbiosis de la migración. Cuando indagas en la esencia de la cultura cubana, entras de una u otra manera en el tema migratorio. Por lo tanto, el tema migratorio no se puede acorralar a partir de 1959.” (Aja, comunicación personal, 22 de febrero de 2021)

Si bien existe un precedente investigativo, el desarrollo de los EM en el periodo posrevolucionario ha respondido a condicionantes específicas no vistas en periodos anteriores. Esto se debe, en primer lugar, a la magnitud en términos numéricos que tiene la migración en las diversas etapas, y su impacto en la política del país. La producción científica referida al tema estuvo amparada, a mediados de los años ´70, por importantes instituciones como son el Centro de Estudios de América (CEA), el Instituto de Literatura y Lingüística, la Facultad de Artes y Letras, y la Casa de las Américas. No obstante, en las últimas décadas, las investigaciones sobre la temática migratoria no se han realizado de forma constante.

Al decir del experto, “las determinantes para el estudio o no de la migración son: factores políticos, determinados por los propios flujos migratorios en Cuba, momentos de picos o no de esa emigración, conflictividad Cuba-Estados Unidos” (Aja, comunicación personal, 22 de febrero de 2021).

Respondiendo a este legado histórico-investigativo, la casa de altos estudios ha continuado el desarrollo de los EM. La Nueva Universidad cubana tiene entre sus objetivos la creación de diseños curriculares más flexibles, que permitan a los estudiantes perfilar su preparación para la vida laboral acorde con sus intereses particulares.6 En este sentido, las asignaturas optativas/electivas de pregrado vienen a diversificar la formación del Plan de Estudios E. Tal es el caso de Las migraciones internacionales en América Latina: historia y dinámicas7 y Audiovisual y Migración,8 impartidas por las autoras.

La primera, con un programa de 32 horas presenciales, se proponía analizar los movimientos migratorios de América Latina y el Caribe como fenómeno histórico en el contexto internacional. Partiendo de esta idea generalizadora, se abordaban los antecedentes de las migraciones internacionales en ambas regiones, a la vez que se identificaban las particularidades que han caracterizado los movimientos latinoamericanos y caribeños. Estos elementos permitían, a posteriori, profundizar los conocimientos sobre las tendencias actuales de dichos procesos en América Latina y el Caribe, así como estudiar las comunidades latinas y caribeñas en Estados Unidos. Con un marcado componente histórico, el trabajo docente y metodológico privilegió la combinación de conferencias con la proyección de diversos materiales audiovisuales que apoyaron la comprensión del contenido.

Por su parte, la asignatura Audiovisual y Migración fue concebida para carreras de pregrado, y actualmente forma parte de la bolsa de optativas/electivas de la Universidad, con un programa de 32 horas presenciales. Propone una reflexión/interpretación cualitativa en torno a dos agendas autónomas y articuladas, en extremo pertinentes en el campo científico y empírico de la sociedad contemporánea, aún más decisivo para la Cuba de hoy: el encuadre entre el discurso audiovisual joven (construcción simbólica audiovisual) y la migración como agenda pública/temática, en su condición de eje representacional; asimismo sus connotaciones procesuales en la realidad social y los niveles de complejidad que desde los campos académico y científico se validan en torno a ella. Para el análisis del discurso audiovisual joven se emplean materiales —de corto y largometraje— de la Muestra Joven ICAIC.9

Entre los objetivos metodológicos que se propone está dotar a los estudiantes de herramientas analíticas que les permitan caracterizar la construcción simbólica audiovisual del proceso migratorio cubano; valorar los referentes teóricos-conceptuales en torno a los estudios de comunicación-proceso migratorio-agenda audiovisual, cual trilogía pertinente para el análisis de la construcción simbólica audiovisual habilitada; sistematizar las características esenciales del proceso migratorio, teniendo en cuenta cada una de las etapas;10 examinar cómo operan las configuraciones contextuales, institucionales y relativas al autor/creador/intelectual en la construcción audiovisual de esta agenda temática; identificar el comportamiento de las principales mediaciones presentes en la construcción simbólica audiovisual que se objetiva a partir de las Matrices Culturales, las Lógicas de Producción, los Formatos Industriales, y las Competencias de Recepción o Consumo;11 y dominar una perspectiva actualizada, tanto conceptual-teórica, como empírica, del proceso migratorio cubano, desde el análisis de expertos de la academia nacional.

Las dos asignaturas expuestas con anterioridad resultan ejemplos claros de la diferencia de enfoques que pueden ostentar los EM en la enseñanza universitaria cubana y, a la vez, son reflejo de la complejidad del tema. La materia dedicada a las migraciones en América Latina y el Caribe, dotada de un carácter historicista, hacía mayor énfasis en elementos relacionados con la política a nivel mundial y su reflejo en diversas aristas de las relaciones internacionales. Por su parte, Audiovisual y Migración, cuenta con un enfoque marcadamente cultural y comunicológico.

Si bien “la cultura es una simbiosis de la migración” (Aja, comunicación personal, 22 de febrero de 2021), las relaciones internacionales también lo son. Todos los elementos presentes en el proceso migratorio atañen a los asuntos exteriores, en tanto países diseñando políticas selectivas para la inmigración en las naciones de destino, como en las estrategias de permanencia trazadas por las de origen. La migración irregular, la trata y el tráfico de personas, el narcotráfico que involucra movimientos migratorios, entre tantos otros elementos susceptibles de análisis requieren de una mirada integradora.

Por tanto, los procesos de enseñanza-aprendizaje relacionados con los EM deben tener en cuenta la complejidad de la temática en cuestión, identificando contenidos e interrelaciones claves según los perfiles del estudiantado a los que se dirigen. A su vez, deben promover herramientas de participación atractivas para los estudiantes; momentos de reflexión donde los argumentos científicos complementen o desmitifiquen la experiencia personal que sobre el fenómeno migratorio cubano preceda a la enseñanza. Asimismo, se debe hacer un uso interactivo de las Tecnologías de la Comunicación y la Información, empleándolas de una forma más compleja que como mera apoyatura.

CONCLUSIONES

Al revisar extensamente la bibliografía relacionada, más la experiencia docente de las profesoras, es posible concluir que los EM tributan a la enseñanza de las relaciones internacionales, complejizando los puntos de vista y ganando terreno a los prejuicios e ideas preconcebidas del alumnado.

Desde el punto de vista metodológico, el estudio de las agendas relativas a los procesos funcionales de encuentro entre Pedagogía/Formación profesional solo puede ser coherente, holística y sistémicamente enfocado y abordado desde la investigación científica inter/trans/multidisciplinar, siendo legítimos los abordajes que respeten las lógicas procesuales de lo glocal12 y lo cultural, aludiendo a un proceso complejo y siempre multifactorial.

Si bien el proceso de formación profesional no está exento de tensiones —al ser la escuela una zona de constante negociación de saberes y posturas éticas—, es posible distinguir un grupo de contradicciones externas que inciden en el ejercicio académico. Una de las más señaladas por los expertos es la exigencia creciente —en términos de actualización, productividad, proyección de escenarios futuros, capacidad de resolución de problemas— que la sociedad le plantea a la universidad y la capacidad de respuesta a ella por parte de profesores, alumnos y directivos (Ortiz, 2009).

En esta misma cuerda se mueve el estudioso Antonio Aja, para quien el papel de la academia en el escenario político es proactivo, y no de simple apoyatura:

La ciencia, y la ciencia humanística, en particular, tienen que ir delante de la política. Cuando la política se adelanta en sus decisiones, acciones y análisis, la ciencia no cumple su papel, porque sencillamente se limita a tratar de refrendar lo que ya la política hizo. Su relación con respecto a la política es de avanzada, tiene que ir delante, previendo, analizando escenarios (Aja en Martín, 2018).

A partir de la práctica docente de las autoras, es posible afirmar que determinados factores inciden negativamente en el desarrollo del aprendizaje en este nivel de enseñanza. La detección de problemas en la impartición de la disciplina EM, y su vínculo con otras disciplinas, como las relaciones internacionales, pasa por el reconocimiento inicial de problemas asociados a la formación instrumental y memorística que han heredado los estudiantes en niveles de enseñanza inferiores, y en el propio nivel superior.

La propia naturaleza transdisciplinar de los EM pudiera incidir en el hecho de que su estudio ha estado supeditado a intereses docentes de disciplinas particulares que la complementan y no se aborden los EM como un todo, sino solo parcialmente. La disciplina involucra conocimientos de diversas ciencias —análisis estadístico, demografía, historia, economía—, por lo cual debe ser impartida de manera transdisciplinar; pues el conocimiento fragmentado impide al estudiante llegar a generalidades a partir de temas puntuales.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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Notas

1 Durante las dos primeras ediciones (2012-14), Marrero Peniche impartió varias conferencias como parte del equipo de profesores del Centro de Estudios de Migraciones Internacionales (CEMI), convirtiéndose en su profesora principal a partir de la tercera edición (2014-15). El interés por la temática migratoria se inició en el año 2006 y conllevó a la elaboración de la Tesis de Licenciatura en Sociología de la autora, titulada Migraciones internacionales cubanas y su conexión con la migración externa en el mundo, defendida en el año 2008.
2 Para más información consultar las ponencias Enfoque transdisciplinar en los Estudios Migratorios: experiencias en la Universidad de La Habana (Martín y Marrero, 2021a) y Estudios Migratorios en la Enseñanza Superior cubana (Martín y Marrero, 2021b).
3 #14. Priorizar y continuar avanzando en el logro del ciclo completo de producción mediante los encadenamientos productivos entre organizaciones que desarrollan actividades productivas, de servicios y de ciencia, tecnología e innovación, incluidas las universidades, que garanticen el desarrollo rápido y eficaz de nuevos productos y servicios, con estándares de calidad apropiados, que incorporen los resultados de la investigación científica e innovación tecnológica, e integren la gestión de comercialización interna y externa.

#98. Situar en primer plano el papel de la ciencia, la tecnología y la innovación en todas las instancias, con una visión que asegure lograr a corto y mediano plazos los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social.

#106. Asegurar la estabilidad, el completamiento y rejuvenecimiento del potencial científico-tecnológico de los sistemas de ciencia, tecnología, innovación y medio ambiente para retomar su crecimiento selectivo, escalonado, proporcionado y sostenible. Perfeccionar los diferentes mecanismos de estimulación.

#122. Consolidar el cumplimiento de la responsabilidad de los organismos, entidades, consejos de la administración y otros actores económicos, en la formación y desarrollo de la fuerza de trabajo calificada. Actualizar los programas de formación e investigación de las universidades en función de las necesidades del desarrollo, la actualización del modelo económico y social y de las nuevas tecnologías (Partido Comunista de Cuba, 2011).

4 Para más información consultar www.mep.gob.cu
5 Algunos autores que sentaron cátedra desde diversas disciplinas en los Estudios Migratorios: Julio Le Riverend Brusone (1940), Juan Pérez de la Riva (1965) y Leví Marrero (1944).
6 Estos intereses pueden estar relacionados con otras aristas científicas, como los estudios de género y sus implicaciones en el ámbito educativo. Al respecto, puede encontrarse un análisis directamente relacionado con la práctica docente consciente y crítica desde la perspectiva de género en Marrero Peniche, 2019.
7 La asignatura surge a propuesta del entonces Centro de Estudios de Migraciones Internacionales (CEMI), fue creado en 1989 con el nombre de Centro de Estudios de Alternativas Políticas (CEAP), y cuyo objetivo era estudiar, principalmente, la Migración Cubana asentada en los Estados Unidos. En el 2000, por Resolución del Ministro de Educación Superior, cambia a CEMI. Se diversifica en mayor medida la mirada a la migración mundial y a los asentamientos de cubanos en diversas regiones. Hasta su desaparición en el año 2015, el CEMI aunó diversas especialidades como: Sociología, Historia, Ciencias Políticas, Derecho, Bibliotecología y Ciencias de la Información.
8 Dicho empeño pedagógico nació de la tesis de Maestría en Comunicación de Martín Pastrana (2018).
9 Este es uno de los espacios de competencia y exhibición más prestigiosos para realizadores noveles. Fue creado en el año 2000 por el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC). Su objetivo principal es promover la obra de nuevos realizadores —menores de 35 años— de todo el país. La competencia tiene los apartados de ficción, documental y animación; así como premios por especialidades: Fotografía, Edición, Sonido, Guion, Producción, Efectos especiales, Actuación (Femenina/Masculina). El evento tiene una frecuencia anual. Para más información consultar: www.muestrajoven.cult.cu
10 En la literatura especializada prima el criterio de que el proceso migratorio cubano no debe abordarse de manera monolítica, sino atendiendo a las características de cada una de sus etapas: Camarioca (1965), Mariel (1980), el Maleconazo (1994), la ruta del Sur (años 2000). (Aja, 2009; Arboleya, 2015; Duany, 2016)
11 Dicho modelo de análisis parte de la Teoría de las Mediaciones (1998), desarrollada por Jesús Martín-Barbero. A lo largo de toda su producción intelectual, el comunicólogo asume el proceso comunicativo en su dimensión relacional (comunicacional), de intercambio (cultural) y de negociación (política); como un lugar de interacción que es creado por la participación tanto del emisor como del receptor. (Martín-Barbero, 1993, 1998, 2002)
12 El término local/global se utiliza para referirse ya sea a espacios geopolíticos tangibles o para teorizar sobre espacios conceptuales de corrientes de pensamiento y producción del conocimiento.
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