Resumen: El inicio de la pandemia provocó, entre otros efectos, una profunda transformación digital de los procesos de enseñanza-aprendizaje a nivel mundial. A partir de entonces, y como consecuencia de la obligada virtualización, el estudio de las habilidades digitales ha despertado un interés creciente. Por ello, la presente investigación se planteó analizar la producción científica iberoamericana en torno a las competencias digitales en tiempos de COVID-19 (2020-2021), publicada en 3 bases de datos (Scopus, Redalyc y Redib). Se obtuvieron 62 documentos que fueron analizados en base a un amplio conjunto de indicadores bibliométricos, como la producción temporal, el índice de producción por revista, el índice de coautoría, el país de filiación institucional, el idioma del documento, el tipo de estudio y el enfoque metodológico, entre otros. De acuerdo con los resultados, se produce una clara tendencia hacia los trabajos colaborativos, destacando como país productor España. Además, se aprecia una clara prevalencia de las investigaciones empíricas de carácter cuantitativo. Estas se dirigen, sobre todo, al estudio de las competencias digitales docentes, especialmente entre el profesorado universitario. El análisis realizado documenta la producción científica en este ámbito y sirve como referencia para futuras investigaciones centradas en programas de capacitación digital en Iberoamérica.
Palabras clave: Competencias digitales,COVID-19,Bibliometría,Educación,Pandemia.
Abstract: The start of the pandemic caused, among other effects, a profound digital transformation of teaching and learning processes worldwide. Since then, and as a consequence of the obligatory virtualization, the study of digital skills has aroused growing interest. Therefore, this research set out to analyse the Ibero-American scientific production on digital competences in times of COVID-19 (2020-2021), published in 3 databases (Scopus, Redalyc and Redib). Sixty-two documents were obtained and analyzed on the basis of a broad set of bibliometric indicators, such as temporal production, production index per journal, co-author index, country of institutional affiliation, language of the document, type of study and methodological approach, among others. According to the results, there is a clear trend towards collaborative works, with Spain standing out as the leading producer country. Furthermore, there is a clear prevalence of quantitative empirical research. The main focus is on the study of digital competences in teaching, especially among university teaching staff. This analysis documents the scientific production in this field and serves as a reference for future research on digital literacy programmes in Ibero-America.
Keywords: Digital skills, COVID-19, Bibliometrics, Education, Pandemic.
Artículos Originales
Las competencias digitales en Iberoamérica en tiempos de COVID-19: análisis bibliométrico
Digital skills in Ibero-America in times of COVID-19: bibliometric analysis
Recepción: 29/04/2021
Corregido: 01/09/2021
Aprobación: 18/10/2021
Desde el 29 de diciembre de 2019 toda la población mundial ha visto, en mayor o menor medida, alteradas sus rutinas y su vida cotidiana por la aparición del virus SARS-CoV-2. Desde entonces y hasta ahora, nuestra sociedad se encuentra sumida en una profunda crisis sanitaria, económica, cultural y, en definitiva, general, con efectos que, al menos a largo plazo, todavía se desconocen [1]. Pese a ello, uno de los espacios en los que el impacto de la pandemia se ha dejado sentir con especial virulencia ha sido, sin lugar a dudas, el ámbito educativo [2]. Así, y con el objetivo de evitar la propagación del virus, los centros de enseñanza de la mayoría de los países suspendieron inicialmente sus actividades de carácter presencial. De hecho, según los datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura [3], 1.200 millones de estudiantes de todos los niveles educativos se quedaron sin enseñanza presencial a mediados de 2020; en el caso de América Latina y el Caribe la cifra total ascendió a más de 160 millones de alumnos y alumnas. Así, la mayoría de los hogares se convirtieron en escuelas y se agudizaron, aún más si cabe, algunos de los problemas de desigualdad y pobreza existentes en la región [4].
Ante ello, los países respondieron a partir de tres aspectos, referidos al ámbito universitario [5], pero extrapolables al resto de niveles educativos: (1) medidas administrativas para la salvaguarda del funcionamiento del sistema, (2) recursos financieros y (3) disposición de medios para dar continuidad a las actividades formativas. El desarrollo de acciones de contingencia también fue una de las estrategias más empleadas por la mayoría de los estados. El ámbito iberoamericano, como bien indica George [6], no fue una excepción y numerosos planes de acción se desarrollaron en instituciones tanto públicas como privadas. Por ejemplo, en el caso de Chile, tras decretar la suspensión de las actividades académicas presenciales el 15 de marzo de 2020 −inicio del curso escolar en el país−, se puso en marcha el programa Aprendo en línea, con el objetivo de dar respuesta a más de tres millones de estudiantes [4]. Una situación similar se produjo en Paraguay, Argentina y Perú, donde se desarrollaron algunas plataformas específicas de aprendizaje, como Tu escuela en casa, Seguimos educando o Aprendo en casa[7], [8], [9]. Sin embargo, estas medidas resultaron insuficientes en algunas zonas rurales, como Minas Gerais en Brasil o Chiapas en México, donde la situación sobrevenida por la COVID-19 supuso un agravamiento de la brecha digital existente ya en la región [10], [11]. Además, y como evidencian algunos estudios en este ámbito, todo ello se realizó con un gran sufrimiento por parte del profesorado y del alumnado, entre otras razones, por la falta de medios, como en Venezuela, Ecuador o Colombia, y la escasa cultura digital de los agentes implicados [12], [13], [14].
De hecho, en todas estas iniciativas las herramientas tecnológicas se pusieron al servicio de la enseñanza-aprendizaje online con el fin de poder continuar el proceso formativo del alumnado. No obstante, esto se llevó a cabo de manera abrupta, pues los agentes educativos comenzaron a adoptar modalidades de enseñanza virtual que no habían utilizado de forma generalizada hasta entonces [15]. Supuso, pues, un esfuerzo extraordinario rediseñar la práctica curricular, lo cual se plasmó en iniciativas, programas y experiencias específicas [14] en las instituciones educativas con el fin de mejorar la enseñanza en un contexto como este [16]. Se han desarrollado, así, numerosas y variadas iniciativas, no solo respecto a la materia científica de estudio, como Biología [17], Inglés [18] y Programación [19], por indicar ámbitos diferentes entre sí, sino también respecto a los niveles educativos, donde se han implementado experiencias, tanto en el entorno universitario [20], [21] como no universitario [22].
Este cambio drástico, provocado por la pandemia hacia un escenario no presencial con una formación en modalidad en línea, puso en evidencia las desigualdades y carencias, no solo en cuanto a soportes tecnológicos [23], sino también respecto a las capacidades de los docentes y del alumnado para desarrollar con el máximo aprovechamiento este proceso de enseñanza-aprendizaje virtual [24]. Se trataba de utilizar las denominadas “competencias digitales”, es decir, “un conjunto de conocimientos, destrezas, capacidades, habilidades y actitudes necesarias en torno al uso eficaz, crítico, seguro y creativo de las tecnologías de la información y la comunicación para alcanzar los objetivos relacionados con el trabajo, la empleabilidad, el aprendizaje, el tiempo libre, la inclusión y participación en la sociedad” [25].
Estas competencias digitales son fundamentales en el ámbito educativo actual, contextualizado en general por la sociedad de la información, pero especialmente durante la pandemia, donde los procesos de enseñanza-aprendizaje son no presenciales. En ellos, e independientemente del nivel educativo, cumplen un rol fundamental vinculado al aprendizaje autónomo y auto-regulador del estudiante [26].
La práctica académica se ha jalonado de nuevos recursos y métodos de enseñanza que han requerido de la aplicación de estas competencias digitales para asegurar la continuidad académica [6]. También se han llevado a cabo iniciativas institucionales para la formación de dichas competencias bajo la premisa de determinados modelos de formación [27], exigidas también por este proceso de adaptación a un nuevo contexto de emergencia, en primer lugar, y excepcional, en el momento actual.
Sea como sea, esta adaptación ha supuesto una aceleración en el proceso de transformación digital del proceso de enseñanza-aprendizaje, la cual demanda una alfabetización digital necesaria para la sociedad actual, la sociedad de la información [28]. Dicha alfabetización abarca el conjunto de competencias digitales necesarias para el contexto educativo. En este sentido, destacamos el marco de referencia común DigComp (The Digital Competente Framework for Citizens) [25], una aportación desde la Unión Europea y cuya versión actual se denomina DigComp 2.1. En este modelo, las competencias digitales se engloban en cinco áreas, a saber, información y alfabetización de datos, creación de contenidos digitales, comunicación y colaboración online, seguridad en la red y resolución de problemas.
Estas competencias digitales hacen referencia a aspectos tales como: la búsqueda y evaluación de información en Internet; la gestión de datos; la interacción con otras personas para compartir información, colaborar, participar y seguir unas normas de conducta, la creación de contenido digital; los derechos de autor; la seguridad; la protección de dispositivos; la protección de datos personales y privacidad; la protección de la salud y el bienestar; la resolución de problemas técnicos; el uso creativo de lo digital; e identificación de brechas digitales [29]. Como vemos, las competencias se tornan requisitos, tanto del profesorado como del alumnado, para garantizar el éxito de las iniciativas educativas, por lo que será fundamental atender a las mismas.
Desde este marco de consideraciones, y teniendo en cuenta la relevancia del tópico para el diseño de políticas educativas en esta área, nos planteamos como objetivo realizar un análisis bibliométrico de la literatura científica iberoamericana sobre investigaciones, programas, acciones y experiencias educativas en torno a las competencias digitales durante el periodo de pandemia. Se trata de un estudio que pretende contribuir a la discusión necesaria en torno a las diversas respuestas basadas en la tecnología digital que, desde el ámbito educativo iberoamericano, se han planteado en este contexto.
El estudio ha tenido como resultado un total de 62 documentos (61 artículos de investigación y 1 proceeding paper), que han sido publicados durante el periodo comprendido entre el segundo cuatrimestre de 2020 (mayo-agosto) y el primero de 2021 (enero-abril). Todos ellos han sido evaluados por expertos y se puede consultar, al menos, el resumen. Los motivos que justifican la elección de este periodo radican en el interés por conocer la respuesta inmediata y a corto plazo que las instituciones educativas dieron a la situación sobrevenida, sobre todo teniendo en cuenta que en la mayoría de las regiones y países de Iberoamérica el confinamiento se inició a mediados de marzo de 2020 [30].
Para llevar a cabo la búsqueda se consultaron las bases de datos SCOPUS, Redib y Redalyc. Los motivos que justifican su elección se basan en su amplia utilización y, especialmente en el caso de las dos últimas, por indexar la producción científica del ámbito iberoamericano.
Tras seleccionar las palabras clave, basadas en el Tesauro de la UNESCO, se definió la estrategia de búsqueda, integrada por los siguientes términos, truncadores y boleanos: <“competencias digitales” y educación y “COVID-19”>. En junio de 2021 se introdujo dicha estrategia en las 3 bases de datos elegidas y se acotó el periodo temporal de análisis entre el segundo cuatrimestre de 2020 y el primer cuatrimestre de 2021, ambos inclusive. En el caso de SCOPUS se empleó la traducción de los mismos términos utilizados en castellano (<“digital competences” and education and “COVID-19”) y, dado el carácter generalista de Redalyc, en esta se marcó la categoría de Educación.
Como resultado de la aplicación de esta estrategia, se obtuvieron inicialmente 238 documentos. No obstante, y con el objetivo de conformar la muestra definitiva, se procedió a la lectura de todos los resúmenes. En aquellos documentos, cuyo abstract era demasiado escueto, se leyó íntegramente todo el texto. De este modo, se pudo garantizar que todos los trabajos analizados abordaran el tópico de estudio. Tras este filtrado, se seleccionaron los 62 documentos que conformaron la unidad de análisis. Los criterios de exclusión en los que se basó el proceso de depuración fueron: (1) investigaciones que no se ciñeran a la temática de interés, (2) estudios que no se circunscribieran al contexto iberoamericano y (3) trabajos que no hubieran sido publicados en el periodo analizado. Es interesante señalar, además, que no se identificó ningún documento repetido por estar indexado en más de una base de datos, no siendo precisa la eliminación de duplicados.
Localizados y descargados los 62 documentos, se llevó a cabo la búsqueda e identificación de los datos utilizados en la presente investigación. De manera concreta, la atención se centró en las siguientes variables: (1) cuatrimestre de publicación, (2) revista en la que se publicó, (3) país de la institución de filiación de los autores, (4) idioma, (5) número de autores del documento, (6) índice de coautoría, (7) tipo de estudio, (8) método empleado en las investigaciones empíricas, (9) muestra utilizada y (10) etapa educativa abordada en el trabajo.
Se trata de un estudio ex post facto de carácter retrospectivo [31], basado en los principios del análisis bibliométrico [32]. El análisis de los datos se llevó a cabo mediante el empleo de técnicas descriptivas y de frecuencias. Dado el tamaño de la muestra documental, durante este proceso no se utilizó ningún programa de análisis estadístico, sino que se hizo uso de la hoja de cálculo de Microsoft Excel 2013.
El análisis de los 62 documentos (ver Apéndice), que conformaron la unidad de análisis, permitió constatar que el intervalo de tiempo más productivo fue el primer cuatrimestre de 2021 (Figura 1).
Los trabajos integrantes de la muestra fueron publicados en un total de 38 revistas. En la Tabla 1 se recogen las 13 revistas con mayor número de artículos publicados sobre el tópico de estudio. De entre todas ellas, sobresale Revista Latinoamericana de Estudios Educativos, Revista Electrónica Educare y Sustainability, que se convierten en las 3 con una producción más elevada en este ámbito.
Respecto al país de procedencia de los autores, más de la mitad de los firmantes estaban adscritos a una institución de Educación Superior española, seguidos estos por quienes pertenecían a una universidad mexicana y peruana, respectivamente (Figura 2).
En relación al idioma, tal y como se muestra en la Figura 3, el 66.74% de los trabajos fueron escritos en castellano.
En lo concerniente a la autoría, la mayor parte de los trabajos se realizaron de manera colaborativa (77.42%), con un cierto predominio de los grupos de 4 o más firmantes (Tabla 2). El índice de coautoría (IC) o media de firmas por documento fue de 2.81.
De acuerdo con la clasificación propuesta por Montero y León [31], durante el periodo de producción analizado se hallaron 42 documentos de naturaleza empírica frente a 20 teóricos y retrospectivos (Figura 4).
Los 42 trabajos empíricos se categorizaron, a su vez, en función de la metodología utilizada. En este caso, y tal y como se recoge en la Figura 5, sobresalieron los estudios de carácter cuantitativo.
Por otra parte, y si se atiende a la muestra utilizada, la mayoría de las investigaciones de carácter empírico se centró en el estudio de las competencias digitales docentes (66.67%) (Figura 6).
El análisis del contenido de la muestra documental permitió establecer 6 categorías temáticas respecto al nivel educativo en el que se centraba el estudio (Tabla 3). Los resultados, en este caso, mostraron que la etapa más frecuente fue la universitaria, abordada por el 41.93% de los trabajos que forman parte de la unidad de análisis.
La virtualización de los procesos de enseñanza y aprendizaje provocada por el COVID-19 ha suscitado una notable preocupación por el estudio de la capacitación digital a nivel mundial y, especialmente, en el contexto iberoamericano [24], [33]. En base a ello, este estudio se propuso realizar un análisis bibliométrico de la producción científica iberoamericana sobre competencias digitales en tiempos de COVID-19. El limitado número de documentos hallados sobre el tópico evidencia que se trata de una línea de investigación emergente [34]. Algunas de las razones que pueden explicar esta escasez de trabajos provienen, sobre todo, del breve tiempo transcurrido desde el inicio de la pandemia, así como de la merma que esta ha provocado en las actividades investigativas de las instituciones de Educación Superior iberoamericanas, situación evidenciada por IESALC y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura [35].
No obstante, y como prueba del interés creciente que presenta, se ha de reconocer la tendencia al alza que muestra la producción científica durante el segundo cuatrimestre del año 2020 y, especialmente, el primero de 2021, lo que permite pronosticar que los resultados de esta línea de investigación acabarán teniendo un importante efecto a la hora de diseñar acciones y programas de formación digital [6], [28], [36]. De hecho, esta preocupación resulta especialmente evidente entre los autores de España, México y Perú, quienes cuentan con una mayor producción científica en este ámbito. Aunque algunas de las causas de este hecho puedan provenir de la evolución que la pandemia ha tenido en cada uno de los países, las instituciones de Educación Superior y los centros de investigación del resto de países iberoamericanos deben promover el fomento de este tipo de estudios, especialmente en aquellos casos en los que la cultura digital de los agentes educativos resulte débil e insuficiente [33], [37].
Por otra parte, el análisis de la producción en función de la revista evidenció la existencia de una amplia diversidad de revistas centradas en la publicación del tópico, lo que de algún modo viene a ser reflejo de la atención que está despertando dicha cuestión en el ámbito editorial [38]. De hecho, no es posible establecer un perfil de revista específica sobre el tópico objeto de estudio. Más bien al contrario, este es abordado por publicaciones tanto de carácter educativo como otras de índole interdisciplinar e, incluso, por algunas cuyo foco de atención no parece estar vinculado inicialmente con la capacitación digital y el empleo de la tecnología en las aulas. Asimismo, y en línea con el modelo científico actual, basado en la colaboración, en la movilidad y en la construcción de redes de conocimiento, se observó un claro predominio de estudios firmados por más de un autor [39], [40], [41], [42], lo que denota que también en este tópico de estudio se produce una clara tendencia cooperativa.
Respecto al tipo de trabajo, destacaron sobre todo las investigaciones de carácter empírico, lo que denota que el interés por la evaluación y el diagnóstico parece haberse antepuesto a la reflexión teórica en tiempos de pandemia. Algunas de las posibles razones para ello descansan en la necesidad de identificar el estadio inicial de partida y, en base a este, arbitrar actuaciones de capacitación digital más ajustadas y precisas a las características del contexto y del colectivo destinatario [36], [43]. Esta recomendación se torna especialmente perentoria en aquellas situaciones sobrevenidas e imprevistas, como la del COVID-19, en las que se precisa de una respuesta rápida, eficaz y capaz de satisfacer las exigencias impuestas por los diferentes condicionantes del contexto [44], [45].
De hecho, la preocupación por obtener información de un número elevado de sujetos explica, en buena medida, la preponderancia de los estudios cuantitativos en la producción científica analizada [46], [47]. Las investigaciones cualitativas, en cambio, se han utilizado de manera minoritaria y solo en aquellos casos en los que el interés radicaba en comprender la percepción que los agentes educativos tenían respecto a sus competencias y experiencias digitales durante la pandemia [48], [49], [50], [51]. En base a ello, y teniendo en cuenta la potencialidad que la tradición cualitativa presenta para captar las necesidades de formación digital desde las voces de los protagonistas [52], se considera esencial el incremento de estudios basados en el paradigma interpretativo.
En cuanto a la población de referencia utilizada, se apreció una mayor prevalencia del análisis de las competencias digitales entre el profesorado y un menor interés en el caso del alumnado. Este hecho puede venir motivado por la estrecha relación que se establece entre el nivel de alfabetización digital docente y el aprendizaje del alumnado, especialmente en contextos de virtualidad [53]. Ahora bien, aunque la creación de entornos formativos mediados por lo tecnológico constituya una competencia básica para el profesorado, no se puede ignorar que los estudiantes también han de contar con ciertas destrezas y habilidades en este ámbito, tal y como destacan Sales et al. [51]. En última instancia, resulta interesante subrayar que la mayor parte de los documentos se centraron en el estudio de las competencias digitales en el ámbito de la Educación Superior, siendo una escasa minoría los que abordaban su estudio en las etapas iniciales. Por ello, y con el objetivo de desarrollar los conocimientos y destrezas digitales desde la primera infancia, se ha de prestar una mayor atención a lo que acontece en otros niveles educativos, cuando el alumnado establece las primeras relaciones con las herramientas tecnológicas [54], [55]. Además, el estudio longitudinal de la adquisición y desarrollo de las competencias digitales permitiría, en la práctica, comparar las experiencias, los logros y las dificultades que se producen en cada una de las etapas [56].
Como posibles limitaciones del estudio, cabe mencionar la existencia de otros indicadores bibliométricos que no se han tenido en cuenta en la presente investigación, como la clasificación de los autores en función de su producción o el índice de impacto de los trabajos. La consideración de tales variables, unida al análisis de otras bases de datos, permitirá obtener en investigaciones prospectivas una visión más holística de la producción científica iberoamericana sobre el tópico de estudio. Pero pese a dichas limitaciones, lo cierto es que este trabajo permite conocer la actividad científica generada en torno a la formación digital durante los momentos iniciales de la pandemia en Iberoamérica. Por ello, sirve como referencia para aquellas futuras investigaciones dirigidas al diseño e implementación de programas de capacitación digital en la región.
Cita sugerida: M. Urrea-Solano, R. Martinez-Roig,
G. Merma-Molina, “Las competencias digitales en Iberoamérica en tiempos de
COVID-19: análisis bibliométrico,” Revista Iberoamericana de Tecnología en
Educación y Educación en Tecnología, no. 31, pp. 133-145, 2022. doi: 10.24215/18509959.31.e13
https://teyet-revista.info.unlp.edu.ar/TEyET/article/view/1741 (html)
Doctora en Investigación Educativa por la Universidad de Alicante, profesora asociada del Departamento de Didáctica General y Didácticas Específicas de la Facultad de Educación de dicha universidad.
Información de contacto: Calle Aeroplano s/n, 03690, Facultad de Educación, Universidad de Alicante, San Vicente del Raspeig (Alicante), España. mayra.urrea@ua.es
Becaria de colaboración (Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, España) en el Departamento de Didáctica General y Didácticas Específicas de la Universidad de Alicante.
Información de contacto: Calle Aeroplano s/n, 03690, Facultad de Educación, Universidad de Alicante, San Vicente del Raspeig (Alicante), España. rmr67@gcloud.ua.es
Profesora de la Universidad de Alicante. Licenciada en Educación y Doctora por la misma universidad. Directora de la Red de Investigación en Diseño y Oportunidades de Género en la Educación Superior.
Información de contacto: Calle Aeroplano s/n, 03690, Facultad de Educación, Universidad de Alicante, San Vicente del Raspeig (Alicante), España. gladys.merma@ua.es