Editorial
Con este número 13 de +E cerramos la convocatoria 2020 “Sujetos y relaciones en extensión universitaria” y las celebraciones por los 10 años de nuestra revista, lo cual involucró una serie de acciones virtuales. Conversatorios, instancias de capacitación y visibilización de acciones que las universidades latinoamericanas desarrollan en momentos de pandemia se sumaron al impulso de creación de una Red de Editores de Revistas de Extensión (REDREU) en el marco de la Asociación de Universidades del Grupo Montevideon (AUGM).
Recientemente, lanzamos la primera encuesta sobre “Escrituras, referencias y lecturas vinculadas a la extensión universitaria” destinada a la comunidad académica latinoamericana y caribeña y que permanecerá abierta durante todo 2021. Las respuestas permitirán reconocer algunas prácticas de escritura y lectura, categorías teóricas y autores de referencia, sitios de consulta y frecuencia con la que se publica sobre políticas, temas o acciones relacionados con la extensión universitaria. Los resultados serán publicados periódicamente y servirán para orientar mejor las acciones vinculadas a la revista. (Error 2: El enlace externo Escrituras, referencias y lecturas vinculadas a la extensión universitaria debe ser una URL) (Error 3: La URL Escrituras, referencias y lecturas vinculadas a la extensión universitaria no esta bien escrita)
Asimismo, a lo largo del año +E se sumó a importantes índices y fue especialmente significativo el ingreso a Núcleo Básico de Revistas Científicas, organismo dependiente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Argentina.
En este sentido, 2020 fue un año muy intenso para la revista (y para la mayoría de las revistas académicas) a pesar de la adversidad del contexto mundial. En foros y conversatorios, no se dudó en remarcar la duplicación de la cantidad de artículos académicos, ensayos y publicaciones relacionados con causas, consecuencias y proyecciones sobre todos los aspectos afectados por el virus: desde los genéticos hasta los psicosociales. Además, la pausa en la vorágine universitaria permitió reflexionar sobre los modos de entender el sentido del trabajo académico.
Si 2020 fue un año muy difícil en todos los órdenes, el próximo se anticipa con un horizonte no más esperanzador: vacunas compiten con reticencias sobre su utilización a escala masiva al igual que las posibilidades de mutación acelerada del virus. Las consecuencias de las decisiones políticas en todas las áreas las veremos, sin lugar a dudas, en el próximo quinquenio. Se requerirá distancia para evaluar síntomas y secuelas sociales, económicas, políticas y, especialmente, aquellas vinculadas al orden de la subjetividad.
Frente a este panorama, se desnudan ciertos escenarios que ya no son posibles ni deseables de sostener, ni desde la política y mucho menos desde la ética: las profundas desigualdades sociales, las problemáticas ambientales, las violencias de todo tipo (de género, raciales, sobre minorías, institucionales), muchas de ellas ligadas a las paradojas estructurales que propone el “desarrollo”. Paradojas que pusieron sobre la mesa de forma descarnada los modos de operar del poder sobre la salud y el cuerpo, individual y colectivo.
¿Cuál es —o debería ser— el rol de las universidades frente a estas paradojas? ¿De qué maneras la formación y la organización universitaria son igualmente atravesadas? ¿Qué problemas sociales cruzan las agendas universitarias? ¿En qué medida y con qué incidencias el conocimiento académico interpela a las agendas públicas?
Por lo pronto, las preguntas que habilitaron la convocatoria 2020 de +E giraron en torno a los sujetos y las relaciones que establecemos con ellos en el marco de las prácticas de extensión. Si bien en esta ocasión no hay artículos que referencien directamente a la pandemia, propusimos analizar críticamente quiénes son esos sujetos, por qué los elegimos —o nos eligen— y qué tipo de relaciones instauramos con ellos. Así, abrimos una serie de interrogantes para orientar la escritura: ¿cómo los denominamos y desde qué marcos teóricos y metodológicos los pensamos? ¿Cuáles son las percepciones o imaginarios que ponemos en juego sobre “ellos” y “nosotros”? ¿Qué tipo de participación tienen en nuestros proyectos? ¿Cómo se dan los procesos de empatía, alteridad y otredad? ¿Cómo y desde dónde ponemos en juego conocimientos y saberes? ¿Qué impacto tiene la intervención sobre los actores involucrados en términos de desarrollo de capacidades de participación o fortalecimiento organizacional? ¿Qué sucedió hacia el interior del proyecto, práctica o espacio curricular a partir del vínculo establecido con los actores/sujetos participantes? Estas preguntas, lejos de ser exhaustivas, enmarcan este número 13 de +E.
En la sección Perspectivas, se pueden encontrar artículos referidos a las implicancias del registro de experiencias para dar cuenta del trabajo con los otros (Universidad Nacional del Litoral); problematizar la noción de territorio y el poder que entraman las intervenciones sociales (Universidad Nacional de Cuyo); los modos en que se construye lo colectivo desde los Espacios de Formación Integral (Universidad de la República) y la co–construcción de conocimientos desde la antropología con poblaciones indígenas (Universidad de Buenos Aires).
En Desafíos de gestión, la Universidad de Santiago de Chile sistematiza y analiza la relación del territorio con los sujetos y temáticas que la academia escoge para las intervenciones en su vinculación con el medio, y desde los Espacios de Formación Integral de la Universidad de la República se advierte la importancia del dispositivo en el medio rural para la formación de los estudiantes de Nutrición.
En Intervenciones, las Universidades de Córdoba, Entre Ríos, de Nordeste y del Litoral (Argentina), la Universidad de la República (Uruguay), de Santa María (Brasil) y la Universidad Nacional (Costa Rica) problematizan los sujetos y relaciones respecto de los ámbitos rural, educativo, de la economía social y solidaria, y productivo ligado a los complejos pesqueros y de las identidades comunitarias a partir de la revalorización del patrimonio cultural.
En Reseñas, se da cuenta de los libros: Los caminos de la extensión en América Latina y el Caribe, Glosario de términos que se utilizan en Extensión Universitaria; Universidad en Movimiento. Curricularizar la Extensión; El pensamiento ambiental del Sur. Complejidad, recursos y ecología política latinoamericana, y Más allá de la supervivencia. Experiencias de economía social y solidaria en América Latina.
Finalmente, en Apuestas, se pone de relieve la trayectoria de +E en estos 10 años y los desafíos que se le presentan.
Como siempre lo hacemos, agradecemos a todos los autores que postularon sus artículos en esta convocatoria de +E por la confianza expresa hacia nuestra revista y a los revisores que año tras año se comprometen para velar por la calidad de la misma.
Nuestra más sincera gratitud a los lectores que nos acompañan desde hace 10 años y a aquellos que se fueron sumando en el camino. Lectores que comentan y recomiendan. Lectores activos que puntúan, complementan, discuten. Sin lectores, los artículos de +E no tendrían sentido. Proponer nuevas lecturas es lo que intentamos hacer desde hace 10 años con el mayor de los respetos.