Artículos científicos
Recepción: 03 Diciembre 2021
Aprobación: 07 Marzo 2022
Resumen: Se realizó un estudio acerca del proceso de preparación técnico-táctica de los judokas escolares en la categoría 9-10 años del municipio de Santa Clara, visto como un fenómeno complejo. Se pretendió como objetivos: diagnosticar diferentes listas de conceptos en función del orden de selección de ataques y defensas en el plan táctico de los judokas en la etapa de iniciación y describir la frecuencia de asociación de conceptos sobre ataques y defensas para el plan táctico, acorde a la matriz de relaciones individuales. Se estimula la habilidad de solucionar problemas en correspondencia con el análisis estructural del plan táctico y en respuesta al adversario durante el combate, todo ello, sobre una base teórica y psicológica que implique el empleo de una nueva herramienta para construir nuevos modos de combatir. Se emplearon diferentes métodos; se destacan la revisión documental, la observación y la entrevista a entrenadores de Judo; se centró el estudio en torno a los métodos de análisis y síntesis, inducción y deducción, así como el enfoque de sistema en el diseño de mapas conceptuales de orientación técnico-táctica para el combate con tareas en Judo. Se concluye que el mapa conceptual de orientación técnico-táctica permite visualizar y unificar los contenidos que más se relacionan con el plan táctico en la etapa de iniciación, y que, a menor cantidad de conceptos seleccionados, según el orden de los ataques y defensas se puede contribuir a una mayor frecuencia de asociaciones.
Palabras clave: habilidad, solucionar problemas, análisis estructural, mapas conceptuales.
Abstract: A study was carried out about the process of technician-tactical preparation of the school judokas in the category 9-10 years of the municipality of Santa Clara, seen as a complex phenomenon. It was sought as objectives: to diagnose different lists of concepts in function of the order of selection of attacks and defenses in the tactical plan of the judokas in the initiation stage and to describe the frequency of association of concepts on attacks and defenses for the tactical plan, chord to the womb of relationships singular. The ability is stimulated of solving problems in correspondence with the structural analysis of the tactical plan and in answer to the opponent during the combat, everything it, on a theoretical and psychological base that implies the employment of a new tool to build new ways of combatting. Different methods were used; they stand out the documental revision, the observation and the interview to trainers of Judo; the study was centered around the analysis methods and synthesis, induction and deduction, as well as the system focus in the design of conceptual maps of orientation technician-tactics for the combat with tasks in Judo. You concludes that the conceptual map of orientation technician-tactics allows to visualize and to unify the contents that more they are related with the tactical plan in the initiation stage, and that, to smaller quantity of selected concepts, according to the order of the attacks and defenses you can contribute to a bigger frequency of associations
Keywords: skill, to solve problems, structural analysis, conceptual maps.
Introducción
El judoka escolar cuenta con gran cantidad de recursos para operar en los randoris (combate de estudio), topes de control y la competencia. Por esta razón, es necesario desde los Combinados Deportivos hasta las Escuelas de Iniciación Deportiva (EIDE) a nivel provincial, estudiar cada combate ya sea real o de estudio, en función de cada niño, niña y adolescente, complejizando su comprensión en relación con los elementos más generales y menos inclusivos que han entrado en el entrenamiento orientados a preparar al judoka a aprender por sí solo el modo más efectivo de combatir (González y García, 2004; Ramírez, 2017; Hernández, 2018).
Estos elementos vistos desde diferentes aristas constituyen fuentes de argumentación de la investigación, que en el sentido didáctico, permitieron identificar en la etapa de iniciación de los judokas escolares del territorio, la existencia del riesgo de que el entrenador de Judo, esté incidiendo en ofertar una estrategia de combate al judoka aislada al contexto en que este opera, a través de una tarea planteada durante y después de actuar en un combate.
Teniendo en cuenta la teoría de los mapas conceptuales de Novak y Cañas (2006), en la investigación llevada a cabo los judokas son guiados para analizar el contenido de diversos combates con tareas, a través de la construcción de un mapa conceptual de orientación técnico-táctica sobre el campo táctico de los judokas escolares.
En el mapa, se puede notar la presencia de ideas, frases y listas de conceptos que parecen funcionar como puentes. La presencia de “frases” son reconocidas como proposiciones: siendo éstas uno de los mayores desafíos de comprensión al elaborar el mapa conceptual, ya que el significado de cada concepto es complejo de asimilar (Badilla, Ocampo y Acuña, 2018).
Para Kandel (2007) lo anterior corresponde a la biología mental, definida como: “el conjunto de operaciones mentales que llevan a cabo los circuitos neurales especializados, siendo éstos los que nos permiten resolver los problemas que afrontamos a diario”. De ahí, que en el presente estudio se parte de la acción mental como base para la formación de ideas, conceptos y pensamientos.
Ambos aspectos tienen que ver, por una parte, con la necesidad de un plan táctico más problémico, inclusivo y jerárquico para la formulación de un juicio acerca de ideas, conceptos, acciones y operaciones con respecto al judoka que se entrena y su oponente. Por otra parte, se relaciona con una limitada comprensión de la relación entre ideas tácticas vistas como acción y operación ante idénticas o disímiles señales en secuencias de ataque y defensa (Pérez, 2016; Hernández, 2014).
En un contexto de combate en Judo, dominado por la incertidumbre, “representada por el azar, y lo imprevisible de su acción”, se hace necesario tener varias opciones de solución a los problemas, estas ideas previas pueden estar configuradas en un mapa conceptual de orientación técnico-táctica como una herramienta didáctica, para comprender las relaciones cruzadas, necesarias y lógicas que se establecen entre ideas tácticas esenciales para cada combate y en su integración conceptual para incidir en las “causas menores que ocultan la determinación de posibles efectos mayores”, al ceder para vencer, según las exigencias del combate (Espinosa, Santana y González, 2019ª; Hernández, 2014)
Todo ello, en función de elegir soluciones y asumir un modo de actuar en el combate. Aquí, según las exigencias del combate con tareas, en las condiciones iniciales, se orientan los contenidos del campo táctico del Judo para las dos esferas de actuación tanto el Tachi-waza como en el Ne-waza; los cuales se refieren a los movimientos básicos de ataques, combinaciones, contraataques y defensas a realizar, en el Judo arriba (Tachi-waza) y el Judo abajo (Ne-waza), teniendo en cuenta las características del adversario (Copello, 2001; González, 2016).
Asimismo, en las condiciones iniciales para lograr que el plan táctico tenga efectividad de realización, es fundamental explicitar el conocimiento a seguir con las pautas necesarias para su desarrollo con éxito en el combate. Esto se lleva a cabo, en función de la sensibilización del judoka, con vistas al trabajo con situaciones problémicas las cuales se comprenden con la realización de un primer mapa conceptual de orientación técnico-táctica que describa cómo ejecutar las tareas, elaboradas previamente por el entrenador lo que ayuda a organizar los ataques y defensas de un modo sostenible para garantizar efectividad de realización.
Paralelamente y en respuesta a las exigencias del combate se parte de la utilización del error para alcanzar el desarrollo de lo que se quiere lograr, eliminando los errores técnicos, hasta llegar a la consolidación de lo planteado tácticamente, en el paso de una acción táctica a otra en el combate, donde la lógica esencial debe incidir en que cada oponente cometa un error, lo cual reduce que ocurra esta posibilidad en el competidor (Hernández, 2014).
En el cierre, es importante una mirada a todas las razones o causas que puedan provocar la aparición de errores, para esta verificación, que realiza tanto el entrenador como el propio judoka, se tiene que reordenar el mapa conceptual, tantas veces como sea necesario, con una frecuencia de rediseño dada a partir de la intervención en cada combate de estudio, en los randoris, confrontaciones, topes de control y en las competencias preparatorias hasta llegar al ejercicio fundamental en función de lograr los objetivos pedagógicos de la etapa.
Con este reajuste se estimula la reflexión táctica del judoka en aras de seguir “la ruta 1”, que consiste en enfocar de modo ordenado y realista la ejecución de tareas, que se caractericen por ser nuevas y superiores; así como, “la ruta 2”, que da origen a los objetivos buscados en pos de promover el regreso a la realización de subtareas de menor nivel de integración conceptual, cuya ejecución técnica no se domina aún, o es necesario rectificar su ejecución con vistas a enfocar de diferentes maneras los problemas para obtener valiosas opciones de solución (Frade, 2016).
Estos elementos permiten arribar a la situación problémica dada por las insuficiencias en la organización estructural del plan táctico de los judokas en la etapa de iniciación del municipio de Santa Clara.
Por lo anterior esta investigación tiene como objetivos diagnosticar diferentes listas de conceptos en función del orden de selección de ataques y defensas en el plan táctico de los judokas en la etapa de iniciación del municipio de Santa Clara y describir la frecuencia de asociación de conceptos sobre ataques y defensas para el plan táctico, acorde a la matriz de relaciones individuales en el combate con tareas.
Materiales y métodos.
La muestra estudiada está compuesta siete (7) judokas del equipo 9-10 años, seleccionados de la población de 20 judokas pertenecientes a preselección del municipio de Santa Clara, que participaron en el Campeonato Provincial Pioneril (2018). Se seleccionan a partir de tener como promedio un año de experiencia en el Judo y poseer cinturón amarillo (5to Kyu), con buenas condiciones físicas y técnicas. Se cuenta además con la participación activa del colectivo de entrenadores del equipo 9-10 años de Santa Clara que participan en el Proyecto de investigación “Enseñanza de la técnica y el perfeccionamiento del modo de combatir en Judo y otros deportes de combate”.
Para la descripción de las etapas por las que transita la investigación se parte de que el desarrollo de la misma constituye un proceso contextualizado en la iniciación deportiva en Judo y el cual transita por tres etapas.
En la primera etapa se elaboran las unidades de análisis para caracterizar los tipos de combates con tareas y se aplican los instrumentos del diagnóstico comenzando dicho diagnóstico con la lista de conceptos para el sondeo de la estructura de los pequeños planes de acción táctica empleados en la categoría 9-10 años.
En la segunda etapa se lleva a cabo el análisis de la estructura y el contenido de planes tácticos de los judokas para incidir en los combates con tareas en la etapa de iniciación en función de conocer cómo debe proceder el entrenador en la planificación de combates con tareas de orientación técnico-táctica por enseñanza problémica en Judo.
En la tercera etapa se finaliza el análisis estructural del plan táctico a partir del sondeo de opinión sobre las adquisiciones de los judokas y el criterio de los entrenadores en el territorio sobre la estructura y el contenido del plan táctico en función de los combates con tareas.
Análisis y discusión de los resultados
En el diagnóstico realizado el orden de selección de ataques y defensas del equipo masculino de Judo de la categoría 9-10 años, se comporta de la siguiente manera. Desde el punto de vista del contenido, se establecen pequeños planes de acciones, operaciones y sus relaciones que se sintetizan en la preparación del judoka en función de la habilidad solucionar problemas, a través, de combates con tareas de orientación técnico-táctica, según las condiciones o recursos personales con que cuenta el judoka (Hernández, 2014; Espinosa, Santana y González 2019b).
De ahí, la importancia de que la estructura del plan táctico se apuntale sobre los contenidos más esenciales del campo táctico del Judo (Copello, 2001); identificados en la etapa de iniciación de los judokas con los movimientos básicos de ataque, contraataque y defensa. En la propuesta de análisis, se parte de la configuración de mapas conceptuales de orientación técnico-táctica como herramienta para construir un modo de combatir en función de combates con tareas y subtareas de soporte en torno a la Figura 1.
Orden de selección: sub-grupo de judokas atacadores de hombro
Para sintetizar se toma como ejemplo el análisis estructural realizado al plan táctico del sujeto 3, de donde se identifica que el concepto central es el Seoi-nage con un total de 20 conceptos periféricos. En el Tachi-waza se observan 12 conceptos en función de los ataques, combinaciones y contraataques.
Las técnicas auxiliares en Tachi-waza: Ippon, O-uchi, Ko-uchi, mientras que las técnicas auxiliares en el Ne-waza son: Kesa-gatame, Kami-shiho, Yoko-shiho, viradas con palanca y derribe. Contraataques para defenderse de: Harai-goshi y O-goshi con Ko-soto en ambos casos. Combinaciones que realiza: Seoi-->Ko-uchi, Ippon-->O-uchi. Las combinaciones en continuidad: Ko-uchi-->Kesa, Seoi-->Kesa, Ippon-->Kami-shiho.
Frecuencia de asociación: sub-grupo de atacadores de hombro.
El sujeto 3 tiene un total de 7 relaciones posibles con el concepto central que es el Seoi-nage. La frecuencia de asociación con el Ippon es de 5 relaciones posibles, en Tachi-waza con 3 y en Ne-waza con 2. La frecuencia de asociación más significativa con al menos 2 relaciones, se establece con O-uchi (2), Ko-uchi (2).
Descripción de la frecuencia de asociación de ataques y defensas.
En la entrevista realizada a los entrenadores sobre la utilidad de conocer la frecuencia de asociación de ataques y defensas; se considera por parte de los mismos, que el análisis estructural del plan táctico a partir del diseño de mapas conceptuales de orientación técnico-táctica en combates con tareas es un procedimiento de trabajo individual adecuado. Además, plantearon que la propuesta permite representar un plan táctico a utilizar con el judoka en un determinado tiempo del combate, es capaz de reflejar el número de tareas a orientar en un minuto distribuyéndolas en conjunto con las diferentes secuencias de movimientos que el judoka ejecutaría durante el tiempo de combate.
Novak y Cañas (2006) y Pinto, Cortés y Alfaro (2018), consideran que los mapas conceptuales representan de manera gráfica el conocimiento organizado, y están compuestos, como se observa en la figura 2, por conceptos, palabras de enlace y proposiciones. En este caso, los mapas conceptuales ayudaron a dar sentido y significado al uso de los elementos técnicos expresados en la lista de conceptos que integran el campo táctico de cada judoka, permitieron identificar los conocimientos previos de dichos judokas y organizar nuevos significados a partir de la conexión entre dichos conceptos. Con vistas a la ejecución con efectividad de realización de ataques combinados, contrataques y defensas tanto en Tachi-waza como en el Ne-waza.
En Judo, durante el combate con tareas, la efectividad de realización se expresa si la acción cumplió o no con el objetivo que se propone el entrenador. Esto en relación con el resultado del efecto de entrenamiento retardado provocado por cada subtarea de soporte físico-especial, articuladas coherentemente con la utilización de las subtareas de ajuste técnico-táctico. Ambos tipos de tareas facilitan el trabajo individual de ataque y defensa en la salida hacia la realización de cada subtarea núcleo, orientadas al cumplimiento del plan táctico en una situación de oposición.
Aquí, existe impacto competitivo del esquema táctico, sí el resultado respecto al objetivo se relaciona con la satisfacción del problema en cada combate según la tríada siguiente:
Esto significa solucionar el problema en el combate con calidad en lo que se realiza o alcanza en las tareas propias del modo de combatir, en ambas esferas de actuación del Judo.
O sea, un resultado efectivo y de calidad en el proceso de entrenamiento deportivo en Judo y dentro de las etapas de la preparación de los judokas escolares, demanda del impacto competitivo que estará dado en la calidad de la formación y desarrollo de habilidades, hábitos y capacidades en función de su utilización racional en el combate. Es por tanto, un proceso consciente y se realiza antes, durante y después de la impartición del acto motor, esto significa que comprende todos los elementos que componen dicho acto en las diferentes etapas del aprendizaje motor y las fases de la creación del hábito motor, tanto en su planificación, organización como en su desarrollo y control del resultado.
Finalmente, y con el objetivo de ilustrar como se arriba al diseño de un mapa conceptual para configurar el esquema táctico de un combate con tareas. Se tuvo en cuenta el proceder para entrenar, según la estructura temporal del esquema de un sistema de movimientos, donde es necesario resaltar las siguientes reglas (Donskoi y Zatsiorski, 1988) se parte de una lista de conceptos que establecen los límites para cada subsistema; 2) se determina la tarea concreta del subsistema dado, teniendo en cuenta la calidad de las acciones, el aprovechamiento de las oportunidades para realizarlas y el cumplimiento del fin para el que se realiza las acciones, como parte del objetivo general del sistema y 3) se analiza la interacción de todos los movimientos en el subsistema. (Figura 3)
Desde el punto de vista biomecánico se satisface el problema de la correspondencia dinámica, es decir, estar en correspondencia con el ejercicio competitivo según los criterios siguientes: a) amplitud y sentido del movimiento, b) tramo acentuado de la amplitud de trabajo del movimiento, c) magnitud de la fuerza de acción, d) rapidez de desarrollo del máximo de la fuerza de acción y e) resistencia específica inherente al régimen de trabajo muscular (Donskoi y Zatsiorski, 1988).
A partir de este esquema se ve que el sistema de movimientos de ataques y defensa en el transcurso del combate posee determinado estado en cualquier instante (comienzo, intermedio y final). Asimismo, en las condiciones iniciales, el orden de estructuración del esquema táctico en cada estado del sistema de movimientos, se analiza como conducta o modo de combatir del judoka ante diferentes rivales en el combate.
En las condiciones variables durante el intermedio de un combate en Judo, si el entrenador y el judoka no diseñan con anticipación un plan táctico, el objetivo del modo de combatir se define con frecuencia en el transcurso de las acciones y operaciones; es decir, depende del carácter que adquieran sus relaciones. El modo de combatir del judoka, se desarrollará arbitrariamente en dependencia de la línea de conducta en cada situación de oposición.
De ahí, que sea tan necesario asegurar una línea de acción táctica precisa con base en el trabajo individual con ejercicios de fuerza, velocidad y combates. A la vez, que en el contexto en que opera el judoka; se convierte en una obligación para alcanzar el éxito, disponer de un mapa del esquema táctico en combates con tareas, lo que significa contar con un mapa de (n+1) rutas a seguir con la ayuda de acciones de dirección del entrenador, que hacen variar el estado del sistema necesario.
En resumen, como parte esencial del análisis en lo estructural, lo funcional y lo estratégico que resulta el plan táctico de los judokas escolares para el cumplimiento de un fin en situaciones de oposición, se requiere de las disposiciones técnico-tácticas que permiten incidir en el modo de combatir del judoka para el logro de un objetivo preestablecido en el combate. Esto se alcanza si se dispone de un esquema táctico que obliga a un movimiento dado en los randoris (combates de estudio); lo que implica un entrenamiento de fuerza y velocidad que disponga pequeños cambios en función de lograr una alta efectividad de realización, tanto en la prueba técnica y combates con tareas como en la competencia fundamental de forma integral y de manera que se refuerce y consolide la sostenibilidad de las transformaciones educativas en los judokas escolares.
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