Artículos
Recepción: 04 Noviembre 2022
Aprobación: 06 Diciembre 2022
Resumen: Las corrientes teóricas actuales en el campo de la comunicación política señalan que las redes socio-digitales agudizan la polarización al encerrar a los usuarios en cámaras de eco partidistas donde solo se exponen a información que refuerza sus puntos de vista prexistentes. Sin embargo, este entorno también permite a los usuarios consumir una amplia variedad de información que podría atenuar los efectos de la polarización. Este estudio tiene como objetivo mostrar que las redes socio-digitales como Twitter pueden facilitar, en la misma medida, otras formas organizadas de interacción que, en lugar de activar la polarización, amplían el dialogo entre diversos sectores políticos. A partir de un caso de estudio, en el marco de las elecciones estatales de Guerrero de 2021 en México, se observará cómo los mecanismos que apuntalan la polarización pueden facilitar dinámicas de consenso. Con estos resultados, este estudio contribuye a un debate en cierne sobre la relación entre redes socio-digitales y polarización.
Palabras clave: cámaras de eco, polarización, Twitter, #PresidenteRompaElPacto, México.
Abstract: Current theoretical currents in the field of political communication point out that socio-digital networks sharpen polarization by locking users in partisan echo chambers where they are only exposed to information that reinforces their existing points of view. However, this environment also allows users to consume a wide variety of information that could mitigate the effects of polarization. This study aims to show that social-digital networks such as Twitter can facilitate, to the same extent, other organized forms of interaction that, instead of activating polarization, broaden the dialogue between various political sectors. Based on a case study, in the framework of the 2021 Guerrero state elections in Mexico, it will be observed how the mechanisms that underpin polarization can facilitate consensus dynamics. With these results, this study contributes to an ongoing debate on the relationship between socio-digital networks and polarization.
Keywords: echo chambers, polarization, Twitter, #PresidenteRompaElPacto, México.
INTRODUCCIÓN
En los sistemas democráticos, la polarización ideológica entre partidos no resulta anómala. Incluso puede adquirir una valencia positiva en tanto que presenta con claridad las diferencias entre los programas de los partidos en disputa y, por tanto, facilita la toma de decisiones electorales por parte de la ciudadanía. Sin embargo, en las últimas décadas, la polarización parece acentuarse en el discurso político y social más allá de los procesos electorales, acentuando fracturas profundas en la sociedad. Desde la literatura especializada se enfatiza el papel de las redes socio-digitales en dicho proceso, el cual tiende a la confirmación más que a la confrontación de las posiciones de los ciudadanos (Aruguete, 2019a; Aruguete y otros, 2020; Banks y otros, 2021; Barberá, 2015; Calvo, 2015; Calvo & Aruguete, 2018).
Sin embargo, los intercambios polarizados no son el único tipo de interacción por el que se caracterizan las plataformas de redes socio-digitales. Estudios previos han demostrado que los usuarios están incrustados en redes diversas que superan los límites ideológicos de las cámaras de eco y que dicha heterogeneidad tiene un efecto positivo sobre la moderación política (Aruguete, 2018; Atilano, 2019; Barberá, 2014; Calvo & Aruguete, 2020b).
Atilano muestra, para el caso mexicano, que las cámaras de eco de las redes socio-digitales presentan múltiples fisuras que facilitan “el cambio en los marcos de referencia de las personas y en sus preferencias electorales” (2019, pág. 5). De manera similar, en un estudio que compara el comportamiento en línea de usuarios en España, Alemania y Estados Unidos, Barberá (2014) demuestra que Twitter reduce la polarización política debido a que facilita la exposición a personas que son políticamente más heterogéneas que las redes personales inmediatas de los usuarios. Por último, Calvo y Aruguete (2020b), con datos observacionales del evento #AbortoLegal en Argentina, encuentran que ciertos temas que tienen que ver con la defensa de derechos humanos como el aborto generan un bajo nivel de división según líneas partidarias que rompen con la dinámica de la polarización.
Siguiendo estos estudios, este artículo explora la posibilidad de que las redes socio-digitales como Twitter promuevan otro tipo de interacción a medida que cambian los temas debatidos por los usuarios y de esa forma contribuyan a la reducción de la polarización en línea, rompiendo la lógica de los filtros burbuja y las cámaras de eco. Con esto no pretendemos cuestionar las evidencias que sustentan las conclusiones teóricas predominantes al respecto, lo que buscamos es construir una alternativa teórica para aquellos casos en los que la polarización no se manifiesta.
Para ello, se analiza la reacción de colectivos feministas, líderes de opinión y ciudadanía en general ante la candidatura a la gubernatura del Estado de Guerrero de Félix Salgado Macedonio en 2021, quien contaba con al menos tres denuncias por violaciones y abusos sexuales y era respaldado por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (Barragán, 2021). En las redes socio-digitales el reclamo se articuló en torno a la red PresidenteRompaElPacto.
El artículo discute, en primer lugar, con la literatura especializada en torno a la cuestión de la polarización en redes socio-digitales. Desde allí pretendemos documentar cómo el proceso que mitiga la polarización en la red resulta de un cambio que opera en el nivel de los temas tratados. En segundo lugar, se presenta la estrategia metodológica para el análisis de la red PresidenteRompaElPacto. Se propone un enfoque basado en el análisis de redes para estimar la conformación de las comunidades de usuarios que se aglutinaron alrededor de la estrategia comunicativa de las feministas contra la candidatura de Salgado Macedonio. Un tercer apartado presenta los resultados del análisis que demuestran que la red puede promover otro tipo de intercambio ideológico cuando los temas debatidos se articulan alrededor de un conjunto diverso de actores que difieren en sus opiniones políticas. Finalmente, el artículo concluye con unas reflexiones finales de los resultados a la luz de la literatura especializada.
CÁMARAS DE ECO Y POLARIZACIÓN POLÍTICA EN LAS REDES SOCIALES
Una floreciente literatura, particularmente en el terreno de la comunicación política, ha demostrado que las redes socio-digitales como Twitter profundizan la polarización al reforzar las actitudes partidistas de los usuarios (Aruguete, 2019a; Aruguete y otros, 2020; Banks y otros, 2021; Barberá, 2015; Calvo, 2015; Calvo & Aruguete, 2018). Estos estudios asumen que algunos mecanismos que operan en el nivel individual como la exposición selectiva (proceso mediante el cual los individuos seleccionan información que coincide con sus creencias) y la homofilia ideológica (la tendencia a formar lazos sociales con otros de ideas similares) generan cámaras de eco donde las creencias de los usuarios se amplifican y se refuerzan ya que están continuamente expuestos a información que coincide con sus puntos de vista.
La cámara de eco de las redes socio-digitales al devolverle información que es consistente con las creencias previas de cada usuario, según Calvo, “constituye un cerco informativo que separa a los usuarios en comunidades” (2015, pág. 120). Esta segregación ideológica en comunidades se traduce, según el autor, en una mayor polarización de la opinión pública.
Siguiendo este cuerpo de trabajo, la polarización en la red es el resultado de la combinación de mecanismos que operan en los niveles individual y estructural. Sin embargo, algunos críticos, que cuestionan las premisas básicas de este argumento, sugieren que no se puede hablar de la polarización como si se tratara de un comportamiento de todos los usuarios, asumen, por tanto, que se trata de un fenómeno acotado principalmente entre las élites políticas, simpatizantes y activistas que consumen información a través de líneas ideológicas (Cardenal y otros, 2019; Bail y otros, 2018; Dubois & Black, 2018). Estos usuarios que se agrupan según líneas partidistas, para Waisbord, “no necesariamente son representativos de lo que ocurre en la opinión pública en general” (2020, pág. 266).
Siguiendo estos otros estudios, es probable que en este entorno la polarización esté anclada en lógicas partidarias e ideológicas que se activan cuando ciertos actores políticos instalan temas en la agenda de las redes que invitan a los usuarios más intensos a posicionarse en polos opuestos, dando lugar a las cámaras de eco partidistas.
Trabajos recientes que cuestionan la visión hegemónica de las cámaras de eco han demostrado que no son estructuras cerradas al resto, por el contrario, son porosas (Atilano, 2019; Barberá, 2014; Bakshy y otros, 2015). Es esta porosidad la que explica por qué los públicos no están encerrados en barrios que no dialogan entre sí y la que habilita la circulación de ideas en ambos sentidos. Estas conclusiones se basan, principalmente, en la tesis de que las redes socio-digitales también posibilitan otro tipo de interacción que trasciende los intercambios ideológicos entre personas de ideas afines.
Este comportamiento es más común de lo que se cree, debido a que los usuarios participan de redes heterogéneas que podrían exponer a las personas a contenido trasversal. Para el caso mexicano, Atilano muestra que la participación en grupos primarios y las relaciones con lazos débiles permiten que “los usuarios estén siempre expuestos a diferentes puntos de vista, interpretaciones y relatos sobre el universo político que generan fisuras en las cámaras de eco” (2019, pág. 20).
A pesar de la cantidad de estudios disponibles sobre el papel que las redes socio-digitales pueden estar desempeñando en la polarización, se sabe muy poco acerca de si estas plataformas digitales pueden tener un efecto inverso sobre el comportamiento de los usuarios; particularmente, en lo que respecta a la segregación ideológica (comunidades que no dialogan entre sí). Si bien la mayoría de estos estudios críticos relativizan el papel de las cámaras de eco sobre el comportamiento individual y social, no explican cómo estos procesos podrían contribuir a reducir la polarización en línea.
Cámara de eco y reducción de la polarización en las redes sociales
Sin pretender cuestionar la evidencia empírica que sustenta las conclusiones teóricas predominantes al respecto, este artículo argumenta que ante ciertos eventos como el que se analiza aquí, las redes socio-digitales pueden disminuir la segregación ideológica de los usuarios y, en consecuencia, la polarización. Partimos de lo demostrado por la literatura: la polarización es un fenómeno acotado a cierto segmento de la población (Dubois & Black, 2018; Waisbord, 2020), y en la red hay más que intercambios políticos según líneas partidistas, existen también interacciones trasversales que trascienden las líneas ideológicas de las cámaras de eco (Atilano, 2019; Bakshy y otros, 2015; Barberá, 2014).
Por tanto, en la misma medida en que Twitter genera redes de usuarios segregadas en comunidades que no se comunican entre sí, puede producir otro tipo de redes donde las formas organizadas de violencia quedan en los márgenes. En un estudio sobre la red #2x1 en Argentina, Aruguete confirma empíricamente que “las burbujas de información en las redes sociales no son un factor que explique, de manera excluyente, la aceptación y difusión de determinados contenidos, así como la elusión de otros” (2018, pág. 9). Para este caso en concreto, la importancia social que tienen ciertos temas como los concernientes a derechos humanos parecen jugar un rol definitivo en la forma que adopta la conversación en la red. Al respecto, concluye la autora:
“el reconocimiento de la sociedad argentina hacia una política de derechos humanos y hacia los juicios contra delitos de lesa humanidad produce una reacción cauta entre una parte importante de los moradores virtuales de Twitter, que se desafilian de comunidades atrincheradas en posturas inalterables” (2018, pág. 9).
Estos otros temas políticos que no nos polarizan podrían crear una cámara de eco alterna que redunda en poca dispersión. En esta investigación retomamos la discusión teórica sobre este punto con el objetivo de profundizar acerca de esos otros temas que en lugar de favorecer la polarización generan una conversación más homogénea entre los usuarios de diversas comunidades. Según Calvo y Aruguete, “la relevancia que un tema suscita en determinados usuarios puede crear un grupo y ese grupo, a su vez, tornar legibles códigos comunes y conformar una agenda colectiva” (2020a, pág. 100).
La mayoría de los estudios que miden la polarización en redes socio-digitales se basan en la ideología política de los actores políticos. En realidad, la ideología es una dimensión política central para el análisis de la polarización (Sartori, 1976). Una característica distintiva de Twitter es que en esta plataforma tienden a converger tanto actores políticos como ciudadanía en general. De ahí que un supuesto clave, de los que estudian la polarización en la red, es que las redes sociales son homófilas. Barberá argumenta que “los usuarios prefieren seguir a políticos cuya posición sobre la dimensión ideológica latente es similar a la de ellos” (2015, pág. 6). Estas relaciones de seguimiento se convierten en vectores de información para la estimación de las comunidades segregadas de usuarios y, por ende, de la polarización.
Sin embargo, la ideológica es una de las tantas dimensiones que estructuran las interacciones entre élite política y ciudadanía. Por tanto, un primer paso para entender cómo la red podría disminuir la polarización es asumir que los usuarios están ubicados en un entorno multidimensional. En ese sentido, Calvo y Aruguete argumentan que, “los usuarios priorizan temas políticos y dialogan sobre ellos por afuera de la dimensión primaria que estructura la mayor parte de sus intervenciones” (2020b, pág. 196). En consecuencia, advierten que, “a partir del tipo de tema que se pone sobre la mesa, la polarización en las redes sociales puede activar conexiones que se alinean con la política o conexiones que la cortan de forma perpendicular” (2020a, pág. 95).
En un estudio que analiza la polarización ideológica en Twitter sobre diferentes temas político y no políticos en Estados Unidos, Barberá y otros (2015) observan que la información se intercambió principalmente entre personas con preferencias ideológicas similares en el caso de cuestiones políticas (elecciones presidenciales), pero en lo que respecta a cuestiones no políticas tanto liberales como conservadores eran propensos a participar en igual proporción (atentado con bomba en la maratón de Boston de 2013).
Los resultados les permiten sugerir que “las estructuras de comunicación en línea son flexibles y específicas de la situación, y que el nivel agregado de polarización política depende en gran medida de la naturaleza del tema” (2015, pág. 9). De manera similar, Banks y otros (2021) sugieren que los altos niveles de polarización en Twitter pueden reflejar simplemente la atención a diferentes temas en lugar de verdaderos cambios en las preferencias de los usuarios.
Calvo y Aruguete, quienes abordan ampliamente el problema de la despolarización en la red, definen como rotación “el proceso por el cual los usuarios de una red se enfocan en aquellos temas que son prioritarios en la segunda dimensión de la red” (2020b, pág. 196). Por lo general, esta otra dimensión social trasciende el plano ideológico que estructura el conflicto político. Este tipo de rotación tuvo lugar en la red #AbortoLegal en Argentina, donde observan que la división partidaria entre macrismo y kirchnerismo, que organizaba la política en aquellos momentos, dejó de ser el eje central en la conversación virtual sobre la interrupción voluntaria del embarazo. Según los autores, “la singularidad de esta red reside en que rotó y quedó ubicada fuera del eje dominante gobierno-oposición” (2020a, pág. 197).
La tesis de Calvo y Aruguete se apoya en la teoría de los lazos débiles. Como argumentan los autores, las redes tienen dimensiones en las cuales los usuarios pueden expresar posiciones compartidas. Esos otros nodos que vinculan a usuarios cercanos a la oposición y al gobierno, podrían facilitar el diálogo entre quienes confrontan en la dimensión ideológica.
En un análisis que toma como argumento la propuesta de la teoría de los lazos débiles, Barberá (2014) proporciona evidencia de que las personas que están integradas en redes personales heterogéneas y que están expuestas a contenido diverso se vuelven más moderadas con el tiempo. Lejos de aumentar el extremismo político encuentra que las redes sociales lo reducen, ya que facilitan “la exposición a mensajes de aquellos con quienes las personas tienen vínculos débiles” (2014, pág. 28).
En México, por ejemplo, los usuarios que apoyan al gobierno de López Obrador y los que se ubican del lado de la oposición pueden entrar en conflicto cuando en la red se activa la dimensión gobierno-oposición, pero pueden compartir contenidos de terceros con los que posiblemente mantienen conexión en otra dimensión de la red. Por lo tanto, no todos los temas que se discuten en línea son polarizantes por naturaleza.
Si bien, las confrontaciones entre diferentes agrupaciones políticas en la red podrían ser síntomas de una polarización arraigada en lo ideológico-partidario, Mason (2015) sugiere que es importante distinguir dos tipos de polarización: polarización temática y polarización del comportamiento. La primera se caracteriza por un aumento en el extremo de las posiciones de los temas en el público masivo y, la segunda, por una fuerza partidista creciente, sesgo partidista, activismo e ira.
Los estudios previos demuestran que la mayor parte de la polarización en la red se expresa en la dimensión temática y en menor medida en la dimensión comportamental. Esto no quiere decir, según la autora, que las identidades políticas no tengan efecto sobre las posiciones temáticas, o que las posiciones temáticas no se hayan polarizado en absoluto, más bien que la polarización es dinámica y varía en función de los temas debatidos y de la importancia que los temas tengan para los usuarios.
Por último, Baldassari y Bearman (2007), que también analizan en profundidad la polarización temática por fuera de las redes, observan que hay temas como el aborto o el matrimonio igualitario que se convierten en el foco de una atención intensa y, en consecuencia, polarizan radicalmente a las personas. Estos temas reciben el nombre de take-off issues, “temas de despegue”, que a menudo atraen nuestra atención colectiva y nos distraen del mayor número de temas en los que las actitudes permanecen paralelas, por lo que los individuos perciben la macro-estructura como polarizada a pesar de que en el contexto de un número más amplio de temas la polarización está ausente.
En términos generales, los autores muestran que las conversaciones tienden hacia la homogeneidad porque “discutimos solo un subconjunto de posibles temas políticos con un subconjunto de posibles interlocutores, sin embargo, el grupo más grande en el que están incrustados conserva la heterogeneidad de actitudes respecto a otros temas” (2007, pág. 7).
Si la polarización no depende únicamente de la personalización algorítmica sino también de los temas que se activan ¿qué características tienen los temas que reducen la polarización y en qué medida contribuyen a la formación de un diálogo más heterogéneo, en lugar de intercambios polarizados? Exploramos esta pregunta en un caso de alta visibilidad social y de un fuerte involucramiento político, pero al parecer con niveles relativamente bajos de polarización. #PresidenteRompaElPacto fue una red que atrajo a muchos usuarios de Twitter en México que se aglutinaron a favor de la lucha contra el patriarcado. Podemos comunicar visualmente estas otras dimensiones en las que la polarización es nula o moderadamente baja mediante los mismos procedimientos analíticos que se utilizan para mostrar conversaciones polarizadas; a saber, los métodos basados en análisis de redes sociales.
METODOLOGÍA
Para demostrar que las redes socio-digitales como Twitter pueden facilitar un tipo de diálogo en el que la polarización es nula o relativamente moderada utilizamos las mismas variables y herramientas metodológicas que se emplean para medir los intercambios polarizados. Utilizamos la ideología como métrica para medir la ausencia de polarización. En este trabajo se entiende la ideología como una “variable latente” (Barberá, 2015; Barberá, 2014; Barberá, Jost, Nagler, Tucker, & Bonneau, 2015) que explica la frecuencia de las interacciones entre individuos ideológicamente similares así como el grado de homogeneidad ideológica en las comunidades de usuarios en la red de retuits (Barberá y otros, 2015; Calvo & Aruguete, 2020a). Para Barbera, “la ideología es una variable latente, cuyo valor se puede inferir al examinar qué actores políticos está siguiendo cada usuario” (2015, pág. 3)
Sobre la base de este argumento, Calvo (2015) sugiere que la ideología puede ayudar a diferenciar comunidades separadas e incomunicadas que se forman en la red alrededor de un evento particular, por lo tanto, el grado de polarización que se aprecia en la red puede comunicarse visualmente mediante el uso de herramientas de análisis de redes. Siguiendo estos estudios, la variable dependiente, ausencia de polarización, está presente si en la conversación en torno a la campaña #PresidenteRompaElPacto estos factores están ausentes.
Por lo general, la unidad que nos permite medir la afinidad ideológica entre distintos nodos (usuarios) es el retuit. Los nodos que reciben un mayor número de retuits son conocidos como autoridades en la red, la mayoría de estos nodos suelen ser políticos, medios de comunicación y periodistas (Calvo & Aruguete, 2018). Este argumento toma como base los supuestos básicos del análisis de redes, la cual señala que una red es un grafo integrado por nodos y aristas, donde los nodos representan a los usuarios mientras que las aristas (retuits) dan cuenta de la relación direccional de esos nodos entre sí (Calvo & Aruguete, 2020a; Kessler y otros, 2020).
Selección del caso
La red #PresidenteRompaElPacto describe la masiva movilización que en las calles y en las redes socio-digitales acompañó las denuncias por presuntas violaciones y abusos sexuales en contra del candidato del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) a la gubernatura del Estado de Guerrero, Félix Salgado Macedonio (Barragán, 2021; García, 2021; Padilla, 2021). El 31 de enero el partido ratificaba oficialmente la candidatura del político para competir en las elecciones estatales de 2021, pese a los escándalos que ya habían desatado las acusaciones en su contra.
Durante el periodo prelectoral (febrero-abril de 2021) colectivos feministas, organizaciones defensoras de derechos humanos y derechos civiles, ciudadanía y hasta diputadas del propio partido emprendieron su propia campaña en redes para exigir la renuncia del candidato. Sin embargo, el punto álgido de la protesta inició con las declaraciones del propio presidente, Andrés Manuel López Obrador, líder del partido, las cuales fueron interpretadas como un respaldo a la candidatura del polémico político.
Básicamente, el presidente señalaba en una de sus conferencias de prensa matutina que no opinaba del tema dado que eran tiempos de elecciones y había acusaciones de todo tipo. De inmediato, los hashtags #PresidenteRompaElPacto y #UnVioladorNoSeraGobernador comenzaron a circular masivamente instalando el tema del patriarcado[1] en la agenda de las redes socio-digitales en México.
Tan solo entre el 17 y 23 de febrero de 2021, las interacciones en Twitter alrededor del evento generaron miles de piezas de información, las cuales nos servirán para examinar si el tema de la campaña posibilitó la creación de una cámara de eco que redundó en poca dispersión o más bien reflejó la estructura de una conversación polarizada. A priori podría pensarse que se trata de una conversación con bajos niveles de polarización dado que los simpatizantes del presidente no la compartirían a sabiendas que es una campaña en su contra y la de su candidato.
Sin embargo, estudios previos han documentado ampliamente que en las redes socio-digitales es muy común una práctica que consiste en el secuestro de hashtags (Jackson & Foucault Welles, 2015; VanDam & Tan, 2016; Mousavi & Ouyang, 2021). La práctica es una forma de contra-protesta que estratégicamente usan los adversarios para diseminar narrativas apropiándose de la etiqueta y desafiando de esa forma el sentido original del evento, al hacerlo elevan el nivel de la discusión pública.
Otros estudios explican esta dinámica de conflicto a partir de la teoría de encuadre. Calvo y Aruguete argumentan que, “algunos elementos del encuadre se activan por congruencia cognitiva mientras que otros son ignorados debido a la disonancia que generan” (2020a, pág. 120). Diferentes actores políticos y mediáticos pueden proponer marcos interpretativos sobre algún evento en cuestión, sin embargo, “la decisión de un emisor de proponer un determinado marco para definir un asunto (topic) no garantiza que el resto de los usuarios lo observen” (Aruguete, 2021). La activación de encuadres en red, sugiere Aruguete (2019b), permite repensar la circulación de sentidos en el entorno digital que se genera en el contexto de un conflicto político.
El mismo Calvo (2015), en un estudio previo sobre el caso Nisman[2] en Argentina, demuestra que en torno a este evento se difundieron masivamente dos encuadres que se disputaban el sentido de la cuestión. Por una parte, el encuadre de la comunidad que apoyaba a la entonces presidenta Cristina Fernández enmarcaba el evento como un suicidio, mientras que para la comunidad opositora se trataba de un asesinato. En definitiva, la circulación de encuadre es, desde esta perspectiva, una estrategia de comunicación que se activa para confrontar o disputar el sentido que cada comunidad le da a los eventos políticos en función de su congruencia o disonancia cognitiva.
Por consiguiente, el hecho de que #PresidenteRompaElPacto haya sido una red promovida y activada como encuadre por la sociedad civil en contra de la candidatura de Salgado Macedonio no inhabilita que sectores a favor del candidato la utilicen para maximizar sus propios objetivos políticos y, con ello, activar la polarización en la red.
Diseño y datos
Para crear el diseño e identificar si la red está constituida por comunidades que no dialogan entre sí, debido al efecto de los algoritmos de segregación, seguimos una serie de pasos como muchos otros trabajos en la literatura (Barberá, 2015; Calvo, 2015; Calvo & Aruguete, 2020a; Calvo & Aruguete, 2018). El primer paso, entonces, es la obtención de los datos utilizando a Twitter como fuente, puesto que la plataforma permite el libre acceso a los tuits y a la información de las interacciones entre usuarios.
Se obtienen entonces todos los tuits generados desde el 17 al 23 de febrero de 2021. El recorte temporal responde a la intensidad de la actividad de los usuarios durante ese período, lo cual fue disminuyendo paulatinamente a partir de entonces, por tanto, no agregaría mayor información al propósito del análisis. Se recolectaron en total 33,770 publicaciones utilizando el término PresidenteRompaElPacto. Para recopilar estos datos, conectamos con la API (Application Programming Interface) oficial de Twitter a través del software estadístico RStudio. La data incluye 28,615 publicaciones emitidas por 16,632 usuarios únicos de Twitter.
Posteriormente, procedemos a estimar la ubicación de los usuarios en la red, se utiliza, para este caso, el algoritmo para redes dirigidas FR (Fruchterman-Reingold) que nos permite visualizar a los usuarios en la red. FR posiciona cerca los nodos que se comportan de igual modo, es decir que retuitean a los mismos usuarios (Calvo, 2015).
Después de que se conoce la ubicación de los usuarios en el plano cartesiano de la red, se estima su pertenencia a las distintas comunidades mediante el algoritmo de caminos aleatorios (random walk) del paquete Igraph. Según Calvo y Aruguete (2020a) este algoritmo identifica una comunidad de usuarios aumentando la información disponible y agrupando a los usuarios en comunidades. Bajo el supuesto de que los algoritmos de segregación de Twitter agudizan la homofilia (Pariser, 2017) se afirma que los usuarios que comparten posiciones similares en la dimensión ideológica latente tienden a agruparse y, por ende, a producir comunidades sumamente homofílicas (Barberá, 2015; Igal Browarnik y otros, 2020).
Luego de detectar las comunidades, un paso importante para terminar con este procedimiento consiste en analizar el nivel de centralidad de las autoridades, creando un ranquin de autoridades y jerarquizando los nodos para identificar a los actores importantes dentro de la red (Calvo, 2015). Para tal fin, se selecciona manualmente un conjunto de autoridades de cada comunidad en función del número de retuits recibidos en sus posteos para poder clasificar las comunidades obtenidas (Igal Browarnik y otros, 2020), en las dimensiones que le interesan al investigador, izquierda-derecha, gobierno-oposición, etc., en caso de que la conversación en torno al tema manifieste este tipo de estructura. Para concluir, le asignamos distintos colores a las comunidades detectadas por el algoritmo de caminos aleatorios, con el fin de diferenciarlas entre sí.
RESULTADOS
Encontramos que la conversación acerca de la renuncia de la candidatura de Salgado Macedonio no era coherente con la visión tradicional de una estructura polarizada, más bien refleja una conversación pluralista articulada alrededor de un conjunto de autoridades o nodos centrales ideológicamente heterogéneos cuyos tuits fueron masivamente compartidos por el resto de usuarios.
El repudio generalizado a la candidatura de Salgado Macedonio estimuló una discusión entre individuos que difieren de sus opiniones políticas. Como muestra la Figura 1, #PresidenteRompaElPacto fue una red copada por el activismo, integrada fundamentalmente por las feministas (@LaMZapata, @Marisol_Calva), escritoras ((@DeniseDresserG, @AlmaDeliaMC), artistas (@erederbez), organizaciones defensoras de derechos civiles y derechos humanos (@SiPorMx, @MexicanasU, @TenemosDatos, @VocesFeministas, @LasConstiMX), periodistas (@CiroGomez, @Alvaro_delgado) y actores políticos (@XochitlGalvez) que participaron activamente para generar consenso alrededor de lo que significaría una posible gubernatura de un presunto violador.
De manera coordinada estos usuarios instalaron el tema en la opinión pública a través de una serie de hashtags. El nivel de interacción ideológica cruzada fue relativamente alto, impidiendo que la red se fracturara en grupos ideológicamente homogéneos, lo que generó un bajo nivel de división según líneas partidarias, y, por ende, baja polarización.
Como muestra la Figura 2, con más de 20.000 apariciones en Twitter la etiqueta #PresidenteRompaElPacto, utilizada para encuadrar el evento, fue la que predominó en los mensajes de los internautas que se oponían a la candidatura de Salgado Macedonio. Si bien el hashtag definió el caso, también fue acompañado de otros que circularon masivamente, #UnVioladorNoSeraGobernador, #YaChole o #NingunAgresorEnElPoder.
#YaChole [3], por ejemplo, se convirtió en tendencia en Twitter luego de que el mandatario expresara la frase como respuesta al llamado de las mujeres a que rompiera el pacto. La etiqueta fue secuestrada y convertida en reclamo al presidente por otras tantas demandas sobre la situación de las mujeres en el país. #YaChole con los feminicidios, con las desapariciones de mujeres y niñas, con el machismo, con la violencia contra la mujer y con la protección a violadores. Aunque sin ninguna evidencia, el mandatario posteriormente se refirió a la movilización digital como una campaña de linchamiento en su contra promovida desde la oposición. A continuación, mostramos una selección de imágenes con los tuits más difundidos durante el evento, así como la narrativa construida contra Salgado Macedonio y la posición del presidente sobre la situación judicial del candidato. Veáse las siguientes figuras.
Figura 1: Cuentas más retuitedas en la red #PresidenteRompaElPacto
Figura 2: Los hashtags más difundidos en la red #PresidenteRompaElPacto
Como ejercicio complementario comparamos la red #PresidenteRompaElPacto con otro evento que tuvo lugar en México en 2020, #Frena. El Frente Nacional Anti-AMLO (Frena) es una organización política que, durante los meses de octubre y noviembre de 2020, demandaba la renuncia del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador usando las redes socio-digitales y las calles como escenarios de movilización. Sus ideas son marcadamente de derecha y tiende hacia el conservadurismo, razón por la cual rechazan cualquier programa político de orientación comunista, se oponen al feminismo, la homosexualidad y otras agendas progresistas. Los objetivos políticos de Frena chocaron frontalmente con los de la comunidad oficialista que respaldaba al presidente en Twitter. El enfrentamiento entre ambas comunidades generó una grieta en la sociedad mexicana en el contexto de la pandemia por COVID-19.
Como ejemplo, en la Figura 3 se observa el alto grado de intercambio ideológico al interior de grupos de usuarios con opiniones políticas similares. Es decir, los pro-Frena tendían a retuitear tuits de las autoridades del movimiento y los pro-AMLO eran especialmente propensos a retuitear contenidos de otros simpatizantes del presidente. La burbuja de color verde representa la comunidad a favor de la demanda de Frena; mientras que la comunidad de color rojo a los usuarios que defendieron la legitimidad del presidente López Obrador. La distancia relativa entre ambas comunidades expresa el nivel de polarización alcanzado durante el periodo que duró el evento.
Este tipo de intercambio está ausente en el caso de la red #PresidenteRompaElPacto debido a que las interacciones fueron entre usuarios diversos (lazos débiles). La frecuencia de las interacciones entre individuos ideológicamente similares está ausente en la conversación (homofilia ideológica) y, por consiguiente, no se distinguen comunidades incomunicadas entre sí, como sugiere la literatura. Dado que no se evidencian formaciones de usuarios en la geografía de la red, la distancia ideológica entre comunidades es poca. Las discusiones en la red #PresidenteRompaElPacto se ajustan principalmente al patrón de una conversación heterogénea, con diferentes actores opinando y demandando la renuncia de Salgado a la candidatura del Estado de Guerrero. En este evento, Twitter nos devolvió una estructura con múltiples focos que concentraron la opinión pública.
En síntesis, en lo que respecta a nuestro caso de estudio, los resultados sugieren que en Twitter se expresó, en el caso de la red PresidenteRompaElPacto, la diversidad de la opinión pública debido a que la conversación sobre el tema del patriarcado estuvo desanclada de la dimensión ideológica. Por otra parte, el caso Frena confirma empíricamente que la red reflejó la polarización política a causa de que el tema fue activado y encuadrado desde las mismas élites políticas que invitaban a sus electores a posicionarse a favor o en contra. Observamos, al igual que estudios previos (Calvo & Aruguete, 2020b; Barberá y otros, 2015), que la cámara de eco de Twitter es flexible y cambia en función de los temas debatidos en la red. De esa manera, la red puede devolvernos una cámara de eco que redunda en poca dispersión y otra que refleja polarización.
DISCUSIONES FINALES
Los resultados antes expuestos nos permiten sostener que los mismos mecanismos que favorecen la polarización en la red no anulan el efecto posible de reducirla en la misma medida. Demostramos para el caso de #PresidenteRompaElPacto cómo la red contribuye asimismo a la formación de un diálogo más diverso a medida que van cambiando los temas de debate. Es decir, en lugar de descentralizar el evento mediante la formación de comunidades que podrían confrontar sobre el tema en cuestión, el consenso que alcanzó el tema pudo moldear la topología de la red, permitiendo que la interacción entre usuarios generara una estructura que resistió ser cooptada por los usuarios ideológicamente intensos (Calvo & Aruguete, 2020a).
Si bien es cierto que la polarización resulta una constante en el escenario online contemporáneo, confirmando la conformación de filtros burbujas y cámaras de eco, eventos políticos como #PresidenteRompaElPacto en lugar de dividir ideológicamente a la sociedad facilitan la formación de narrativas más homogéneas que alcanzan altos niveles de propagación en la red. En lo que respecta a esta dimensión, la red no se polarizó como si lo hizo en el caso #Frena, donde la conversación fue dominada por un subconjunto de posibles interlocutores. La red #PresidenteRompaElPacto, sin embargo, conservó la heterogeneidad de actitudes debido a la diversidad de actores que participaron del evento. Como hemos esgrimido, los mecanismos que pueden articular la polarización también pueden operar procesos de despolarización.
El caso aquí analizado demuestra que hay temáticas que rompen con la polarización ideológica y, por lo tanto, no producen el fenómeno de polarización en Twitter. Por ejemplo, los casos relacionados a movimientos feministas o las temáticas relacionadas a los derechos humanos como la red #AbortoLegal (Calvo & Aruguete, 2020b) o #NoAl2x1 (Aruguete, 2018), ambos en Argentina. En estos casos, los temas debatidos en la red van más allá de las posturas políticas extremas y se entrelazan las agendas de los usuarios.
En tal sentido, en ausencia de una contra-narrativa que intentara deslegitimar la demanda de las feministas contra la candidatura de Salgado Macedonio, la conversación virtual no reprodujo una fractura discursiva y, por ende, no se formaron comunidades que se distinguieran localmente por su algún rótulo ideológico. #PresidenteRompaelPacto fue un evento profundamente político, pero, a la vez, poco partidario, que nos permite entender la anatomía de la despolarización en la red.
Por último, este estudio centrado en un caso específico nos permite explicar por qué los estudios que prueban la existencia de la polarización en la red no se contraponen a aquellos que demuestran lo contrario. Consideramos que ambos planteamientos son complementarios y pueden enriquecer la teoría al aportar evidencia empírica en la otra dirección. En tal sentido, tanto la postura presentada en este trabajo, por un lado; como la noción de que los temas políticos activan extremas posiciones de polarización política, pueden convivir y son absolutamente compatibles en entornos digitales como Twitter.
REFERENCIAS
Aruguete, N. (2018). #2X1 diálogos al costado de la grieta. Intersecciones en Comunicación, 1(12), 1-9. http://ojsintcom.unicen.edu.ar/index.php/ojs/article/view/27
Aruguete, N. (2019a). ¿Twiitter acrecienta la polarización política? Beers & Politics, 02, 22-25. https://bit.ly/3DxZuSB
Aruguete, N. (2019b). Network-Activated Frames (NAF), Redefining Framing in a New Digital Era. En P. M. A., & R. Heraud, Encyclopedia of Educational Innovation (págs. 1-6). Springer.
Aruguete, N. (2021). “Activación de encuadres en red. Un modelo para repensar la circulación de sentidos en el nuevo entorno mediático. Profesional de la información, 30(2), 1-18. https://doi.org/10.3145/epi.2021.mar.18
Aruguete, N., Calvo , E., & Ventura, T. (2020). Polarization, News Sharing, and Gatekeeping: A study of the #Bolsonaro Election. Digital Journalism, 9(1), 1-23. https://doi.org/10.1080/21670811.2020.1852094
Atilano, J. (2019). "Fisuras en la cámara de eco en tres procesos electorales". Comunicación y Sociedad, e7259, 1-23. https://doi.org/10.32870/cys.v2019i0.7259
Bail, C., Argyle, L., Brown, T., Bumpus, J., Chen, H., Hunzaker, M., . . . Volfovsky, A. (2018). "Exposure to opposing views on social media can increase political polarization". PNAS, 115(37), 9216–9221. https://doi.org/10.1073/pnas.1804840115
Bakshy, E., Messing, S., & Adamic, L. (2015). Exposure to ideologically diverse news and opinion on Facebook. Science Magazine, 348(6239), 1130-1132. https://doi.org/10.1126/science.aaa1160
Baldassarri, D., & Bearman, P. (2007). "Dynamics of Political Polarization". American Sociological Review, Vol. 72, núm. 5, 784-811. https://doi.org/10.1073/pnas.2116950118
Banks, A., Calvo, E., Karol, D., & Telhami, S. (2021). #PolarizedFeeds: Three Experiments on Polarization, Framing, and Social Media. The International Journal of Press/Politics, 26(3), 609–634. https://doi.org/10.1177/1940161220940964
Barberá, P. (2014). How Social Media Reduces Mass Political Polarization. Evidence from Germany, Spain, and the U.S. American Political Science Association Conference (págs. 1-46). Job Market Paper, New York University, 46. http://pablobarbera.com/static/barbera_polarization_APSA.pdf
Barberá, P. (2015). Birds of the Same Feather Tweet Together: Bayesian Ideal Point Estimation Using Twitter Data. Political Analysis, 23(1), 76-91. https://doi:10.1093/pan/mpu011
Barberá, P., Jost, J., Nagler, J., Tucker, J., & Bonneau, R. (2015). Tweeting From Left to Right: Is Online Political Communication More Than an Echo Chamber? Psychological Science, 26(10), 1-12. https://doi.org/0.1177/0956797615594620
Barragán, A. (11 de 01 de 2021). Dos acusaciones de violación manchan la candidatura de Félix Salgado Macedonio a la gubernatura de Guerrero. El País. https://bit.ly/3DWzodx
Calvo, E. (2015). Anatomía política de Twitter en Argentina: Tuiteando #Nisman. Buenos Aires: Capital Intelectual.
Calvo, E., & Aruguete, N. (2018). #Tarifazo. Medios tradicionales y fusión de agenda en redes sociales. InMediaciones de la Comunicación , 13(1), 189-213. https://doi.org/10.18861/ic.2018.13.1.2831
Calvo, E., & Aruguete, N. (2020a). Fake news, trolls y otros encantos. Cómo funcionan (para bien y para mal) las redes sociales. Buenos Aires: Siglo Veintiuno Editores.
Calvo, E., & Aruguete, N. (2020b). #AbortoLegal: la antired. En E. Calvo, & N. Aruguete, Fake News,trolls y otros encantos. Cómo funciona (para bien o para mal) las redes sociales (págs. 189-209). SigloVeintiuno Editores.
Cardenal, A. S., Aguilar-Paredes, C., Cristancho, C., & Majó-Vázquez, S. (2019). Echo-chambers in onlinenews consumption: Evidence from survey and navigation data in Spain. European Journal of Communication, 34(4), 360–376. https://doi.org/10.1177/0267323119844409
Castro Guerrero, S. [@sofiacastroG]. (2021, abril 28). Hoy las morras chilangas fuimos a la Cámara de Diputados a presentar mas de 17 mil firmas ciudadanas que piden [Tweet]. Twitter. https://bit.ly/3zDHLYV
Dresser, D. [@DeniseDresserG]. (2021, marzo 2). Presidente @lopezobrador El feminismo no es una simulación, ni una importación, ni un montaje del conservadurismo, ni una copia, ni [Tweet]. Twitter. https://bit.ly/3NyYCSy
Dubois, E., & Black, G. (2018). The echo chamber is overstated:the moderating effect of political interest and diverse media. Information, Communication & Society, 21(5), 729-745. https://doi.org/10.1016/j.chb.2017.03.031
El Universal. (17 de 02 de 2021). Piden a AMLO romper "pacto patriarcal" por Félix Salgado Macedonio. El Universal. https://bit.ly/3sYZwhG
García, R. (20 de 01 de 2021). Prescribe una de las dos denuncias por violación contra Salgado Macedonio. El Financiero. https://bit.ly/3E08iCg
Gálvez Ruiz X. [@xochitlGalvez]. (2021, febrero 26) Y se atrevieron a autonombrarse "el gobierno más feminista de la historia". #PresidenteRompaElPacto [Tweet]. Twitter. https://bit.ly/3WqzGAA
Igal Browarnik, M., Ortiz de Zárate, J. M., & Feuerstein, E. (2020). Identificaci´on de comunidades en intervalos de tiempo a trav´es del lenguaje. AGRANDA, Simposio Argentino de Ciencia de Datos y Grandes Datos (págs. 1-5). Buenos Aires: Sociedad Argentina de Informática. Obtenido de http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/116417
Jackson, S. J., & Foucault Welles, B. (2015). Hijacking #myNYPD: Social Media Dissent and Networked Counterpublics. Journal of Communication, 65(6), 932-952. https://doi.org/10.1111/jcom.12185
Johana Mx [@xochitlGalvez]. (2021, marzo 13). Mujeres de Acapulco Guerrero tengan dignidad, aunque el desgobierno se empeñe en ponerles a un violador @FelixSalMac de gobernador [Tweet]. Twitter. https://bit.ly/3FAoXxw
Kessler, G., Focas, B., Ortiz de Zárate, J., & Feuerstein, E. (2020). Los divergentes en un escenario de polarización. Un estudio exploratorio sobre los “nopolarizados” encontroversias sobre noticias de delitos en la televisión argentina. Revista SAAP, 14(2), 211-340. https://doi.org/10.46468/rsaap.14.2.A3
López-Dóriga, J. [@lopezdoriga]. (2021, febrero 18). #YaChole "Las respeto mucho", fue la respuesta del presidente López Obrador a las mujeres que cuestionan candidatura de Felix Salgado [Tweet]. Twitter. https://bit.ly/3DXXK6O
Mason, L. (2015). “I Disrespectfully Agree”: The Differential Effects of Partisan Sorting on Social and Issue Polarization. American Journal of Political Science, Vol. 59, Nún. 1, 128–145. https://doi.org/10.1111/ajps.12089
Mousavi, P., & Ouyang, J. (2021). Detecting Hashtag Hijacking for Hashtag Activism. Proceedings of the 1st Workshop on NLP for Positive Impact. Bangkok, Tailandia: Association for Computational Linguistics. https://doi.org/10.18653/v1/2021.nlp4posimpact-1.9
Padilla, L. (26 de 01 de 2021a). Presentan tercera acusación por violación contra Félix Salgado ante comisión de Morena. Milenio. https://bit.ly/3FJNdxo
Pariser, E. (2017). El filtro burbuja: cómo la red decide lo que leemos y lo que pensamos. Taurus.
Sartori, G. (1976). Partidos y sistema de partidos: marcos para un análisis. Madrid: Alianza Editorial.
Tagle, M. [@MarthaTagle]. (2021, mayo 18) Para quienes despiertan temprano, les dejo por acá mi texto "La torita" sobre el caso #FelixSalgado y la burla a [Tweet]. Twitter. https://bit.ly/3FyQ0t5
VanDam, C., & Tan, P.-N. (2016). Detecting hashtag hijacking from Twitter. Proceedings of the 8th ACM Conference on Web Science, WebSci’ 16 (págs. 370-371). Nueva York: ACM. https://doi.org/10.1145/2908131.2908179
Waisbord, S. (2020). ¿Es válido atribuir la polarización política a la comunicación digital? Sobre burbujas, plataformas y polarización afectiva. Revista SAAP, 14(2), 249-279. https://doi.org/10.46468/rsaap.14.2.A1
Notas